1959• Se concluye la construcción de Edificio Teatro Altamira, ubicado en una parcela que limita por el oeste con la Av. Sur Altamira, por el sur con la Av. José Félix Sosa y por el este con la Av. del Ávila, en la urbanización Altamira Sur, diseñado por el arquitecto Luis Malaussena (1900-1963).
Esta edificación, que reúne oficinas, comercios, viviendas y la sala de cine más grande de las construidas en Caracas, está compuesta por un basamento que ocupa la totalidad de la parcela, claramente dividido en tres partes, dos externas y una central. En las externas (oeste y este), de cuatro niveles de altura, se ubicaron los comercios en planta baja y tres niveles de oficinas. Los comercios poseen acceso directo desde las avenidas y las oficinas están servidas por ascensores y escaleras. En el centro del basamento, a todo su largo, se ubicó el cine Altamira, el cual, con un aforo de 1.600 puestos, abrió sus puertas el mismo año en que la película Araya, de la cineasta venezolana Margot Benacerraf, ganó el Premio de la Crítica Internacional en el XVIII Festival de Cannes. El cine está provisto de un amplio vestíbulo abierto en su totalidad hacia la Av. José Félix Sosa, una antesala de la misma proporción, las taquillas entre éstas y luego, el patio y su balcón, con muy cómodas butacas y una enorme pantalla. La fachada norte del basamento estaba cegada en esos cuatro niveles en respuesta a la zonificación, que preveía la posibilidad de adosamiento de un edificio bajo. Sobre el basamento, separado por una planta libre de servicios complementarios, se levantaban en forma de U, seis pisos de apartamentos y un PH, a los cuales se accedía por corredores abiertos y ventilados hacia el patio creado sobre la cubierta del cine. Los apartamento ubicados al final de la circulación eran más amplios en área, disponiendo de un balcón compartido entre dos de sus habitaciones, que tenían una excelente vista hacia la Plaza Altamira y El Ávila.
El edificio sufrió estructuralmente durante el sismo de 1967 y hubo que reforzarlo en varios sitios, siendo el más evidente la columna hueca de concreto armado que se adosó a la fachada norte, eliminando los balcones y creando un nuevo espacio en los apartamentos afectados, provisto de un ventanal. El edificio contaba con un sótano de estacionamiento de doble altura en su parte central (debajo del cine) y en los bordes ocupado por otros comercios y depósitos. Entre los comercios que funcionaron en esos sótanos hubo varios night clubs muy populares. «El Hipocampo» de Renato Salani (que se trasladaría en 1968 al Centro Comercial Chacaito), el «Novgorod» en donde se presentaba Aldemaro Romero, entre otros.
Con el pasar de los años, por diferentes factores, el edificio Teatro Altamira fue desocupándose progresivamente siendo finalmente demolido en el año 2008, por la Corporación Andina de Fomento (CAF), institución que había adquirido el terreno para construir su edificio sede, objeto del concurso de arquitectura organizado ese mismo año.
HVH