1967• Se concluye la construcción y abre sus puertas al público el Centro Comercial Santa Mónica, ubicado en la Av. Teresa de la Parra, entre las avenidas Agustín Codazzi y Rufino Blanco Fombona, urbanización Santa Mónica Caracas. proyectado un año antes por James Alcock (FAU UCV promoción 9/ 1959). Entre sus notables proyectos se destacan el Centro Comercial Paseo Las Mercedes (1967); el Poliedro de Caracas (1972) y el edificio de oficinas y centro comercial Parque Cristal (1977). El arquitecto James Alcock fue galardonado con Premio Nacional de Arquitectura en 1993 por el conjunto de su obra.
1959•Se termina la construcción de un edificio comercial ubicado en la Avenida Francisco de Miranda cruce con Avenida Principal de Las Mercedes, Urbanización El Rosal, diseñado por el arquitecto Federico Beckhoff (1919-1982).
El pequeño centro comercial es ocupado por la línea aérea Air France (que le dio el nombre con el cual se conoció la edificación), el afamado restaurante El Petronio, del chef italiano Franco Calore y la joyería Angel Briozzo, representante de Vacheron et Constantin.
El edificio era una caja de cristal, definida y soportada por una ligera estructura metálica, grácil, leve, muy transparente.
Había existido, debajo de múltiples y desafortunadas intervenciones, hasta enero de 2022 cuando fue demolido.
2001• En el mes de mayo se concluye la construcción y diseño interior de los locales comerciales del Centro Comercial Sambil Margarita, ubicado en la Av. Jóvito Villalba, entre Porlamar y Pampatar, Estado Nueva Esparta, diseñado por la arquitecto Helena Trotta.
C.C. Sambil, Margarita. Vista interior
Este nuevo centro comercial de 80.000 m2 de construcción tiene 243 locales (9 locales ancla, 7 salas de cines, 18 locales para feria de comida, 14 restaurantes , 26 kioskos, una tienda aislada en el estacionamiento) y una playa de estacionamiento para 2.350 automóviles.
C.C. Sambil, Margarita. Vista interior
La construcción de la edificación que fue gerenciada por el Grupo Cabaleiros se inició en 1999 y estuvo concluida en 14 meses.
Cuando la semana pasada nos referimos al lugar ocupado por el Centro Comercial Los Palos Grandes (o “Canaima”) dentro de una posible evolución de ese tipo de edificación en la capital, adelantábamos el importante sitial ocupado por el Centro Comercial Chacaíto. Hoy nos correspondería añadir que este emblemático edificio marca un antes y un después tanto en la manera como fue concebida su organización y resuelta su implantación en el sitio donde le ha correspondido estar, como por el impacto que su apertura aportó a la manera de entender su trazado y el rol que puede jugar un grupo concentrado y diverso de comercios dentro de la trama de la ciudad. Se trata de una obra aleccionadora que, sin duda, envió un claro mensaje sobre la integración que debe darse entre un edificio de esta naturaleza, el trópico, la ciudad y el usuario el cual tuvo una consideración privilegiada.
1. Centro Comercial Chacaíto. Plano de ubicación
El lugar donde se desarrolló el centro comercial, al este de la quebrada Chacaíto, límite natural entre lo que antes era el Distrito Federal y el Distrito Sucre del estado Miranda (o, en la actualidad, entre los Municipios Libertador y Chacao), no sólo ofrecía las ventajas que otorga su condición de nodo articulador urbano de fácil acceso, sino que imponía un complejo reto a la hora de enfrentar la topografía, sectorizar los usos que debía albergar, resolver mediante un esquema claro la relación entre el vehículo y el peatón, y decidir cómo responder a los dos frentes que lo limitan: al norte la avenida Francisco Solano López, y al sur lo que para entonces era el fin de la Calle Real de Sabana Grande y el inicio de la avenida Francisco de Miranda.
Producto de parte de la venta de los 50.000 m2 de terreno que conformaban la antigua Hacienda Sans Souci, los 23.000 m2 que conforman el lote trapezoidal que se destinó al centro comercial, se separan de los 33.000 m2 que darían pie a un importante desarrollo habitacional que tomó el nombre de la hacienda, diseñado por José Miguel Galia, por la ya mencionada avenida Solano, vía que comunicará la Av. Principal de la urbanización El Bosque con la urbanización Las Delicias de Sabana Grande.
El proyecto, encargado al arquitecto Antonio Pinzani (1927-2009), construido entre 1965 y 1968, que contó con la participación de los ingenieros Sergio Piccín y Antonio Froyo en el diseño estructural, enfrentó con gran sabiduría la articulación de las complejas situaciones que presentaba el nodo de Chacaíto ideando un conjunto abierto al clima, con amplios corredores peatonales separados del automóvil que permitían recorrerlo disfrutando a la vez de lo que sus vitrinas mostraban.
2. Arriba: Planata baja y planta alta del Centro Comercial Chacaíto. Abajo: Dos vistas desde las áreas de estacionamiento de cada uno de las dos plantas en fechas cercanas a su apertura.
Conformado por dos grandes piezas, una en forma de “L” que ocupa los linderos norte y este, y otra con planta cuadrada ubicada al sur-oeste, el centro comercial se divide en 3 niveles: sótano (donde se combinan estacionamientos y comercios); planta baja comercial (con fuentes de soda y una plaza central luego convertida en estacionamiento), y planta alta (que tiene usos comerciales y oficinas con área de estacionamiento independiente al norte). Inicialmente tuvo 97 tiendas y contaba con un total de 600 puestos para automóviles.
El nivel superior del cuerpo en “L”, donde destaca al oeste el volumen destinado al supermercado (ocupado finalmente por la cadena Central Madeirense que para la época ya se convertía en la competencia de CADA), conecta la avenida Francisco Solano López por medio de escaleras y una rampa al nivel principal (planta baja comercial). La segunda pieza, rodeada por cómodos pasillos y abierta la calle, contempla la existencia de un espacio central a doble altura donde el tratamiento de la luz se convierte en protagonista. En general, las tiendas ordenadas a partir de corredores perimetrales sin cerramientos, que mantienen al paseante entre las vitrinas y el exterior, junto a unos letreros comerciales de alta calidad gráfica, fueron claves en su imagen vanguardista en los años 70.
3. Vistas de algunos de los espacios del Centro Comercial Chacaíto. Arriba a la izquierda: el muy conocido (hoy desaparecido) Le Drugstore.
El centro comercial, ubicado, como ya se dijo, en un punto neurálgico de la ciudad y de interconexión del transporte público, facilitó el desarrollo y éxito de diversos comercios “ancla”. Al ya mencionado supermercado, se sumaron fuentes de soda (como El Papagayo y el Ovni), librerías (como El Acento y Lectura), varias agencias bancarias, cines (como los tres “cinemas” ubicados en el sótano), un teatro, discotecas (como El Hipocampo a nivel de la Solano y la Eva en el sótano), tiendas que representaban a las mejores marcas (Carnaby Street, Wilco, Adams o Vogue) y muy especialmente Le Drugstore, espacio de ambientación juvenil que ofrecía en su interior, además de una fuente de soda que destacaba por la originalidad de sus platos y el nombre que llevaban, una cantidad de mini tiendas destinadas, entre otras, a la venta de discos, tarjetería y cerrajería, todo bastante alejado de lo que su nombre parecía sugerir.
Recién inaugurado, el conjunto de 45.000 m2 de construcción, cuyo diseño original proponía la realización de una torre de oficinas sobre el centro comercial (la cual fue desechada), se convirtió de inmediato en ícono comercial en Caracas.
Antonio Pinzani, graduado de arquitecto en 1953 en la Universidad de Venecia, Italia, quien revalidó su título en la FAU UCV en 1963 y siempre estuvo muy vinculado a la colonia italiana en nuestro país, alcanzó con el Centro Comercial Chacaíto su obra más lograda y se abrió paso para que posteriormente fuera considerado para diseñar la Escuela Técnica de Catia (1972) y el Unicentro El Marqués (1973) edificaciones que, pese a variar sus usos y sus escalas tienen claras vinculaciones con el de Chacaíto en cuanto al tratamiento espacial, volumétrico y ambiental. Más adelante se le contratará para proyectar la sede del Centro Social Ítalo-Venezolano (1980)y luego, asociado con Giampiero Pierucci Renta, a través de Pinzani + Pierucci, en 1991 el Edificio Sede Gerencial La Castellana; en 1995 el Centro Comercial La Colina, San Antonio de los Altos (estado Miranda); en 1996 el edificio sede de la Casa Oliveira, en Boleíta Norte; y en 1999 el Centro Comercial Santa Fé.
4. Dos tomas de la fachada sur del Centro Comercial Chacaíto hacia 20145. La Plaza Brión de Chacaito.
Luego de la inauguración del Metro en 1983, Chacaíto acentuó su condición de nodo dentro de la ciudad y los alrededores del centro comercial se vieron beneficiados por prolongación de la peatonalización del Bulevar de Sabana Grande y la creación de la Plaza Brión ubicada sobre la estación del subterráneo. No obstante, su condición de edificio permeable le ha traído, en momentos en que el deterioro de la ciudad ha ido en franco aumento, problemas para poder defenderse de la inseguridad, y lo que antes fue lugar de referencia por la variedad y calidad de los usos que ofrecía hoy ha dejado de lado el toque de exclusividad que lo distinguía a favor de una mayor mimetización con lo que existe en su entorno.
Acreedor del Premio Municipal del Distrito Sucre en 1970 en la IV Bienal Nacional de Arquitectura, a pesar de sus años y alteraciones, y de la imposición de la nueva tipología del “mall” (ensimismado y aislado de su entorno) que introdujo una nueva forma de vivir la ciudad, tal y como se señala en Caracas del valle al mar. Guía de arquitectura y paisaje (2015) el de Chacaíto “sigue siendo considerado por muchos, desde el punto de vista arquitectónico, como el mejor centro comercial de la ciudad”.
ACA
Procedencia de las imágenes
Postal. Colección Crono Arquitectura Venezuela.
1, 2 arriba y 3 arriba derecha. Mariano Goldberg, Guía de edificaciones contemporáneas en Venezuela. Caracas. Parte 1, 1980
…que en 1964 se concluye la construcción del Centro Comercial Los Palos Grandes, también conocido como Centro Comercial “Canaima”?
1. Centro Comercial Los Palos Grandes. En primer plano volumen del cine «Canaima», en segundo plano volumen del Pin 5 y en tercer plano (al fondo) Parque de Cristal.
Si el boom de los centros comerciales en Caracas tiene en el Centro Comercial Chacaíto su mayor detonante cuando se concluye en 1968, colocando el listón en lo más alto, han pasado por debajo de la mesa a la hora de establecer una especie de cronología de lo que este fenómeno ha sido para la capital venezolana (trabajo aún pendiente de realizar con verdadero rigor académico), otros que lo antecedieron y se constituyeron en referencia particularmente para los habitantes del este de la ciudad.
La fórmula de contar con usos considerados “ancla” que garantizarían la afluencia de público a este tipo de edificación, quedó claramente establecida cuando en 1955 Don Hatch proyecta en Las Mercedes lo que sería la primera incursión en Caracas de IBEC (International Basic Economy Corporation), empresa de Nelson Rockefeller fundada en 1947, cuya subsidiaria en Venezuela adoptaría las siglas VBEC (Venezuelan Basic Economy Corporation), quien asociado a empresarios nacionales dueños de los automercados Todos, de Maracaibo, financian el centro comercial donde se ubicaría el primer Automercado CADA (Compañía Anónima Distribuidora de Alimentos) de la capital. De esta manera, se daría inicio a la conformación de una cadena pionera en la venta al detal de alimentos bajo estándares norteamericanos que acompañaría la apertura de otros centros comerciales como elemento jerárquico, en los cuales se vería normalmente complementado con una fuente de soda de la misma franquicia y de otra serie de locales que irían adquiriendo identidad propia. A ello se fueron sumando usos de importante tamaño que junto al supermercado acrecentarían el atractivo de estas pequeñas ciudades dentro de la ciudad.
Al CADA de Las Mercedes siguió el de La Vega y luego el de La Florida incorporado al centro comercial del mismo nombre, el cual empezó a señalar un importante cambio en la escala reforzado por la adición de un local con 12 canchas de bowling, deporte que se empezaba a poner de moda a inicios de los años 60.
2. Imágenes y propaganda del Coney Island de los Palos Grandes en cuyo terreno se construyó el centro comercial
Dentro de esta secuencia le correspondería a la urbanización Los Palos Grandes contar a partir de 1964 con un centro comercial que se ubicaría en los terrenos de lo que fue el Coney Island, lugar de recreación, diversión y atracciones de gran importancia durante los años 50 que funcionó hasta 1963.
El proyecto, ubicado con frente sobre la avenida Francisco de Miranda, entre la 2ª y 3ª avenidas de Los Palos Grandes, estaría a cargo de la firma Coto y Loperena Arquitectos (Alvaro Coto Asenjo y José Gabriel Loperena). Sería construido por la empresa Aldrey y Simon siendo Luis Borges Villegas y Francisco Borges los ingenieros residentes y su costo total alcanzaría los cinco millones de bolívares provenientes en su totalidad de capital privado.
El programa contemplaba el funcionamiento de un automercado, una fuente de soda, 24 canchas de bowling, 20 establecimientos comerciales, una sala de cine y estacionamiento para 360 vehículos.
El partido arquitectónico orientó la organización de los tres grandes cuerpos (el cine, el bowling y el automercado) en torno a un espacio central donde se ubicaría la fuente de soda presidida por un enorme mijao, árbol común en la zona de los Palos Grandes, a quien la urbanización debe su nombre. Hacia la periferia (donde se resolvieron los estacionamientos divididos en tres zonas), bajo el volumen del bowling y en parte del espacio central se ubicarían el resto de los locales comerciales. La circulación, resuelta correctamente, permitía el acceso independiente a los locales principales y secundarios localizándose el automercado al norte (con estacionamiento propio y una amplia área de carga y descarga), el cine al oeste y el bowling al este.
3. Vistas exteriores del centro comercial. Abajo a la izquierda: foto de la maqueta
El centro comercial se caracterizó por tener una estilizada solución estructural y por estar realizado con materiales de muy buena calidad, excelentes, acabados y una lograda volumetría. Así, el prisma en el cual se desarrolló la sala de cine fue utilizado con mucho acierto por los proyectistas como volumen con fuerza suficiente para presentar el edificio hacia el frente de la avenida Francisco de Miranda. La pendiente interna de este espacio, necesaria para la gradería de asientos, se convierte en su exterior en antesala techada de acceso peatonal y vehicular al teatro.
Tanto la cubierta de la sala del cine como la del boliche y el supermercado fueron construidas utilizando paraboloides hiperbólicos de concreto armado diseñados por el arquitecto Coto Asenjo, los cuales se dejaron en obra limpia. Para la tabiquería exterior se utilizaron ladrillos de arcilla, colocados también en obra limpia.
Los más importantes locales, todos adjudicados con carácter de alquiler, estarían ocupados por CADA, el Pin 5 (que con 24 canchas de bowling se convirtió en el mayor espacio de este tipo de la capital), el teatro Canaima (primera sala diseñada para proyectar películas sobre una enorme pantalla curva en el formato llamado “supercinerama”), la discoteca El Hipopótamo (ubicada bajo el cine y una de las primeras en su género) y la Librería ABC (de los mismos dueños que posteriormente abrirían LECTURA en el Centro Comercial Chacaíto).
4. Izquierda: Elemento que identificaba del bowling Pin % ubicado en el centro comercial. Derecha: Anuncio en la prensa de la inauguración del cine Canaima el 29 de octubre de 1964.
La apertura del centro comercial se concretaría en septiembre de 1964 y la de la sala de cine sería el 29 de octubre con la superproducción “La Conquista del Oeste”, dirigida John Ford, Henry Hathaway y Georges Marshall en la que participaron hasta 24 famosas estrellas del celuloide, constituyéndose en todo un evento.
Alvaro Coto Asenjo (1928-2013), arquitecto de origen mexicano que revalidó su titulo en la FAU UCV en 1970 y desarrolló su carrera en Venezuela, constituyó en los años 50 junto a José Gabriel Loperena Taboada la empresa “Cubiertas Ala de Venezuela, C.A.” que diseñó y construyó un gran número de estructuras de paraboloides hiperbólicos de concreto armado en nuestro país, y actuó como filial y representante de los proyectos y contratos del ingeniero y arquitecto Félix Candela.
5. Algunas de las obras y proyectos realizados por Alvaro Coto y la empresa Cubiertas Ala de Venezuela, C.A. entre 1950 y 1970. Arriba izquierda: Paragua invertido de la estación de servicio de Coche,en Caracas. Arriba derecha: Espacio interno del terminal de autobuses de San Critóbal. Centro izquierda: Nave central de la planta ensambladora Volkswagen. Centro derecha: Proyecto para silos agroindustriales. Centro a todo lo ancho: Edificio Sede del Colegio de Médicos del Zulia. Abajo: Proyecto para tanques de agua semienterrados de 500 mil litros en la Isla de Margarita.
La firma entre los años 50 y 70 ejecutó una importante cantidad de dichas estructuras a modo de paraguas invertidos que se utilizaron como cubierta en el área de surtidores y en otros volúmenes en numerosas estaciones de servicio (bombas de gasolina) en Caracas, de los cuales sólo unos pocos quedan aún en pie. También colaboró en el proyecto y construcción en 1963 de la cubierta a base de paraboloides de la Planta ensambladora de la Volkswagen en Palma Sola (Morón, estado Carabobo) de Dirk Bornhorst y Pedro Neuberger, y en la construcción en 1964 del Edificio Sede del Colegio de Médicos del Zulia, del arquitecto Miguel Casas Armengol. En 1968 Coto proyectó y construyó el Terminal de Pasajeros “Genaro Méndez” en San Cristóbal, estado Táchira y, en 1969, realizó el diseño para la cubierta del Terminal de Autobuses de Ciudad Bolívar. Más adelante Coto creará las firmas Constructora Orión y Cubiertas Orientales desde donde continuará su particular investigación, planteando entre 1980 y 1990 una tipología de silos agroindustriales de gran capacidad que tuvo su antecedente en las propuestas solicitadas por Fedeagro Turén y Fedeagro Araure a “Ala de Venezuela” durante los 60. También propondrá una estructura con base a paraboloides para construir tanques de agua semienterrados de 500 mil litros en la Isla de Margarita e intentará patentar en 1994 una cubierta denominada “Pieza reversible, prefabricada en forma de dos sectores de paraboloides hiperbólicos, usable en repetición ensamblada en la ejecución de cubiertas”, a base de fibra de vidrio y resinas plásticas, tal y como reseña Rafael Gerardo Páez en el artículo “Edificaciones con paraboloides hiperbólicos. La obra de Félix Candela en México y de Álvaro Coto en Venezuela”, aparecido en la revista Tecnología y Construcción 27 I, septiembre 2013.
6. Izquierda: Imágenes del Centro Comercial Los Palos Grandes después del incendio de 1978. Derecha: Torre Telefónica (hoy Movistar) ubicada en el terreno anteriormente ocupado por el centro comercial.
Debido a un incendio de grandes proporciones que hubo en 1978, el cual destruyó por completo la tabiquería del centro comercial, el Cine Canaima tuvo que cerrar sus puertas, el Pin 5 fue mudado a la urbanización La California y la edificación fue demolida a finales de los años 80, teniéndose que utilizar explosivos para derrumbar la estructura y los paraboloides hiperbólicos de concreto armado que habían sobrevivido sin daño al evento. Luego de ser demolido el centro comercial, se construyeron en el mismo lote, la Torre Telefónica (hoy Movistar) y el Centro Comercial El Parque, situados entre la 2ª y 3ª avenidas de Los Palos Grandes, es decir, entre la Torre Hewlett Packard y el Parque Cristal.