1963• El Centro Simón Bolívar completa el proyecto de restauración de la Cuadra de Bolívar e inicia el proceso de recuperación de la edificación en colaboración con el Ministerio de Relaciones Interiores a través de la Dirección del Ceremonial y Acervo Histórico el cual se completó para su inauguración como museo en 1967. La edificación, propiedad rural de la familia Bolívar Palacios desde 1750, está ubicada entre las esquinas de Piedras y Bárcenas (Av. Oeste 18 con Sur 2). En esta casa transcurrió parte de la infancia y de la juventud del Libertador Simón Bolívar. En 1959 la Junta Nacional Protectora y Conservadora del Patrimonio Histórico y Artístico de la Nación la declaró Monumento Histórico Nacional, momento en el cual el Centro Simón Bolívar adquiere las construcciones que existían hasta la esquina de Bárcenas, donde se hallaba una cochera, y donde originalmente estaba ubicada la cocina, los lavaderos y las caballerizas. Como puede apreciarse en la imagen para ese momento la Cuadra se encontraba en deplorables condiciones. Afortunadamente el proceso de restauración se hizo respetando la arquitectura original. Se pudo recuperar muestras de la cerámica y ladrillos utilizados remplazándolos por otros de ruinas del XVIII y XIX. Se logró decapar paredes encontrando frescos de vivos colores y el color añil utilizado en las casas de campo en la colonia. Se pudo reconstruir los techos de caña y mangle, y colocar tejas también recuperadas de otras edificaciones antiguas. Siguiendo el trazado de las bases de las fundaciones se pudo demoler paredes y rehacer muros y reconstruir la fuente del patio gracias a un brocal de piedra desenterrado. Se sembraron a la usanza de esos años, limoneros, sauces, granadas, un ciprés, un cedro y un totumo, naranjos dulces y agrio, cacao, mangos y una higuera hija de la sembrada por Simón Bolívar en la quinta Magdalena en Lima.
Una vez que el Centro Simón Bolívar concluyó los trabajos de restauración patrimonial de la Cuadra de Bolívar esta se inauguró el día 23 de julio de 1967, solo tres días antes del terremoto que afectó seriamente a Caracas, causando grandes daños al nuevo museo, razón por la cual se tuvo que cerrar para restaurar el conjunto y reinaugurarla el 24 de junio de 1971.
Fuente: Museo Virtual de América y el Caribe. Cuadra de Bolívar. Centro Nacional de Historia.
1960• El Centro Simón Bolívar conjuntamente con el Ministerio del Trabajo y el Ministerio de Relaciones Exteriores organizan en espacios del Centro Simón Bolívar y la Plaza Diego Ibarra, del entre los días 17 de abril y 1ero de mayo, la Feria de la Cultura Popular.
Las instalaciones de la Feria de la Cultura Popular fueron diseñadas por el joven arquitecto Edmundo Díquez (FAU UCV promoción 8/1958) quien contó para su montaje con la colaboración de: Julio Coll Rojas, Illari Mirena de Egiarte, Enrique Berard, José María Lugo, Ana Díaz, Tony Solanilla, Peter Albers y José Antonio Cadavieco, todos estudiantes de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad Central de Venezuela.
Las instalaciones de la Feria de la Cultura Popular incluyeron un teatro ubicado en la Plaza Diego Ibarra, el cual fue proyectado y realizado por Alberto de Paz y Mateos, ejecutado también por Edmundo Díquez, con el equipo de producción de la Escuela de Formación Artística del Ministerio del Trabajo, todos bajo la dirección general del maestro Alberto de Paz y Mateos. La programación de los espectáculos celebrados fue realizada por la Dirección de Cultura del Ministerio del Trabajo. El sonido con que contó el teatro durante sus funciones fue cedido por la Casa Phillips La feria, tanto en la exposición como en el teatro, fue visitada por un nutrido público.
1971•El día 17 de mayo a los arquitectos Jesús Sandoval Parra, Tomás Lugo Marcano y Dietrich Kunckel se les otorga el Primer Premio en el Concurso Sala de Conciertos y Sede de la Orquesta Sinfónica Venezuela. La invitación al Concurso había sido realizada por el Centro Simón Bolívar, C.A. el día 28 de septiembre de 1970. Se inscribieron 56 equipos integrados por más de 100 profesionales, recibiéndose el 14 de mayo, fecha improrrogable fijada para la entrega, 19 anteproyectos para su consideración.
Los arquitectos Jesús Sandoval Parra, Tomás Lugo Marcano y Dietrich Kunkel ganadores del Concurso “Sala de Conciertos y Sede de la Orquesta Sinfónica Venezuela”, reciben en un acto protocolar el Primer Premio por su propuesta.
El Jurado Calificador estuvo integrado por los arquitectos Martín Vegas, Tomás Sanabria, Guido Bermúdez, Julio Coll y Américo Faillace, quienes contaron con la colaboración del especialista en acústica Robert B. Newman y de los destacados profesionales venezolanos Eduardo Arnal y José Miguel Rodríguez. El Complejo Cultural fue construido e inaugurado en el año 1983, con el nombre de Teresa Carreño (1853-1917), virtuosa pianista y compositora venezolana.
1947• Luego de dos años de trabajo se concluye la construcción y el equipamiento del Hotel Nacional, ubicado en el cruce de la Av. Este 6 con la Av. Sur, al oeste del Pasaje Zingg, diseñado por el arquitecto de origen turco Arthur Kahn Sibrover (1910-2011), quien estudió en la Escuela de Bellas Artes de París, Francia, graduándose en 1940. Hizo la reválida de su título en la FAU UCV en 1962 cohorte 12/B.
El edificio del Hotel Nacional consta de planta baja, mezzanina, siete pisos tipo que albergan 100 habitaciones, cada una con su baño y como complemento de él en el décimo piso, un restaurante, un bar, un “dancing” y una terraza cubierta. Las ventanas de la fachada oeste fueron protegidas de la insolación con brise-soleil.
Hotel Nacional, Caracas. Perspectiva incluida en una postal promocional. Arquitecto Arthur Kahn (1910-2011).
Este fue el primer proyecto de arquitectura de importancia que obtuvo el arquitecto Arthur Kahn en Venezuela. Había llegado en 1942 al país. Integró el equipo de proyectista que desarrollaron la Ciudad Universitaria de Caracas bajo la coordinación del maestro Carlos Raúl Villanueva y en 1945 se independizó creado su propia empresa de diseño, Arquidec. El Hotel Nacional, propiedad del Sr. Manuel Guillermo Díaz, fue adquirido por un millón de bolívares por el Centro Simón Bolívar durante la gestión del Dr. Miguel Márquez Rivero (1952-1955), para ser, al igual que el Hotel Majestic, demolidos para construir los enlaces viales de la Avenida Bolívar.
… que en 1980 se concluye la construcción del Bulevar de Catia?
1. Bulevar de Catia frente al mercado.
Con la realización de las obras que dieron por resultado la inauguración de la primera etapa de la línea 1 del Metro de Caracas en 1983 desde Propatria hasta Chacaíto, se dejó atrás un período en el que la ciudad se vio impactada a nivel superficial de cuanto acontecía por debajo con los consabidos problemas e incomodidades que afectaron a conductores, transeúntes y comerciantes.
Desde que Rafael Caldera inauguró la estación Agua Salud al final de su mandato en 1974, sin haberse iniciado las obras en el subsuelo pero con el proyecto prácticamente concluido, hasta que Luis Herrera Campíns tiene el privilegio de inaugurarlas en 1983, transcurrieron casi 10 años de trabajos ininterrumpidos que el gobierno intermedio de Carlos Andrés Pérez con visión de Estado y a pesar del fuerte ruido que causó la posibilidad de construir un “Aerocarril”, entendió como una necesidad impostergable y un clamor, por lo que finalmente decidió darle continuidad a la obra, correspondiéndole en marzo de 1975 anunciar la construcción de la línea 1 (Propatria-Palo Verde) comenzando por el oeste.
Si bien el Metro transcurría por debajo y con ello terminaría aliviando de manera importante el siempre problemático tráfico de la capital, las obras, una vez concluida la línea 1 en 1989 hasta Palo Verde (para cuando ya se había concluido el tramo Las Adjuntas-El Silencio de la línea 2), le dejaron a la ciudad una serie de espacios públicos de efectos dignificantes como nunca antes el caraqueño del siglo XX había percibido. En otras palabras al final del camino se entendió que los sacrificios sufridos tenían todo el sentido del mundo y el beneficio colectivo sobrepasaba con creces los posibles efectos individuales que se hubiesen creado.
2. Intervenciones urbanas que se originaron a partir de la construcción de la Línea 1 del Metro de Caracas
Las mejoras sustanciales que trajo la apertura del sistema en su primera etapa dieron como resultado la creación de lo que Max Pedemonte, arquitecto jefe desde 1968 del Metro de Caracas, denominó como “Rutas paralelas”, que no son otra cosa que las intervenciones que a nivel de la superficie se produjeron junto a la construcción del subterráneo que redundaron en un incremento de la movilidad de grandes masas, no dependientes del vehículo privado, y derivaron en la realización de toda una infraestructura peatonal complementaria, consistente en la ampliación de aceras, construcción de bulevares y plazas que le empezaron a dar sentido al término acuñado.
Pedemonte, nacido en Cuba en 1936, residenciado en Europa entre 1938 y 1945 y establecido en Venezuela en 1946, realiza estudios de arquitectura en la UCV entre 1955 y 1960 bebiendo de los aprendizajes que Carlos Raúl Villanueva fue dejando a través de la construcción de la Ciudad Universitaria de Caracas y en particular del edificio sede de Facultad de Arquitectura y Urbanismo. Trabaja en el Ministerio de Sanidad y Asistencia Social entre 1961 y 1967 lapso en el que realiza un postgrado en la Universidad de Columbia. Ya previamente había empezado a desarrollar su vena artística la cual lo acompañará desde muy joven lo que le permite obtener en 1962 el Premio Nacional de Escultura del XXIII Salón Oficial de Arte. El 1967 ingresa como docente de diseño arquitectónico en la FAU UCV en el Taller Borges de donde se jubila en 1992. Como ya adelantamos, en 1968 Pedemonte pasa a ser arquitecto jefe del Metro de Caracas encabezando una de las acciones de renovación urbana más importantes en la historia de Caracas. De dicha actividad derivó la publicación en 1983 del libro “Rutas paralelas. Plan de recuperación urbana del Metro de Caracas” que posteriormente presentó para ascender en el escalafón universitario en 1985. En 1987, con motivo de la VIII edición de la Bienal Nacional de Arquitectura, última de las que concedió el Premio Nacional, con la presentación de “Rutas paralelas” dicha distinción recayó en el Metro de Caracas y en particular en el arquitecto Pedemonte por la obra realizada por la División de Arquitectura a su cargo. Otra característica importante de su actuación en el Metro fue la de haber incorporado el arte en cerramientos, revestimientos de paredes y techos, y el haber convocado a diferentes y connotados artistas plásticos a colaborar con intervenciones tanto en el interior como en el exterior de las estaciones del subterráneo incluidos los espacios públicos que se generaron.
Pues bien, quizás entre las más importantes “Rutas paralelas” que dejó la apertura de la línea 1 del Metro estuvieron las plazas Caracas (entre las torres del Centro Simón Bolívar), La Hoyada, Palo Verde y Brión en Chacaíto y, sobre todo, la transformación de la antigua avenida España en Catia y la Calle Real de Sabana Grande (avenida Abraham Lincoln) en sendos bulevares que se convirtieron de inmediato en disfrute y desahogo del ciudadano y alegría para los comerciantes dado el notable incremento en la calidad ambiental que ello trajo consigo y el cambio en la conducta de quienes usaban dichos espacios y también las instalaciones ubicadas bajo tierra.
3. Izquierda: La trama reticular de la Nueva Caracas. Plano de Caracas y sus alrededores, 1941. Derecha arriba: Oficinas de venta de la Nueva Caracas, 1929. Derecha centro: Vista aérea de Catia. Derecha centro: Plaza Pérez Bonalde. Derecha abajo: Inauguración de la Plaza Sucre por Juan Vicente Gómez en 1928 con el nombre de su hermano Juan Gómez.
El Bulevar de Catia, abierto en 1980 y terminado en 1984, transcurre en una longitud de 870 metros ocupando el eje central de lo que fue la urbanización Nueva Caracas, creada en 1929 por el Sindicato de ese mismo nombre donde se desarrollaron unas 58 manzanas (rectangulares y cuadradas), equivalentes a 80 cuadras del casco tradicional, diseñadas por el ingeniero Oscar Ochoa. De entre ellas, doce manzanas con nombres de países hispanoamericanos y siete avenidas, convergen en una plaza de planta circular (atribuida a Ochoa) que inicialmente fue denominada “Plaza Cataluña”, luego se llamó “Plaza Las Orquídeas” y finalmente, en 1946, plaza Pérez Bonalde en honor al poeta Juan Antonio Pérez Bonalde -máximo exponente de la poesía lírica, el romanticismo y el modernismo venezolanos del siglo XIX-, momento en que se coloca un busto de mármol blanco sobre un pedestal del escultor Lorenzo González (ejecutado en la Marmolería Artística Prof. Emilio Gariboldi) en medio del espacio arbolado. El desarrollo de Ochoa incluía un club social y deportivo ubicado frente a la plaza y estuvo conformado por casas adosadas sin retiro de frente para vivienda y comercios, y áreas de uso industrial que ocupaban parcelas de mayor tamaño al sur. El Banco Obrero, por su parte, construye a través de la empresa de los Hermanos Mancera en 1929, dentro del trazado de la Nueva Caracas, luego de su exitosa experiencia de San Agustín del Sur, 38 viviendas adosadas las cuales sólo podían alcanzar un solo piso adicional, ya que el suelo era arenoso, inestable y con niveles freáticos altos corroborado por la existencia en las proximidades de la Laguna de Catia.
4. Izquierda: Dos tomas de la avenida España en las décadas de los 50 y 60 del siglo XX. Derecha: La avenida España transformada en el Bulevar de Catia5. El Bulevar de Catia y algunos de sus hitos más importantes hoy en día: la Plaza Sucre y la Plaza Pérez Bonalde (izquierda), el Mercado de Catia y el Teatro Catia (centro). A la derecha el Bulevar cualquier día de la semana.
De tal manera, entre la Plaza Sucre al norte (inaugurada por Juan Vicente Gómez en 1928 con el nombre de su hermano Juan Gómez tomando su actual denominación en 1935) y la Pérez Bonalde al sur, el Bulevar de Catia se convirtió acto seguido a su inauguración en una pujante zona comercial y lugar de recreo y esparcimiento para los habitantes de la zona, actividades que se incrementan durante los fines de semana sobre las calles que corren paralelas y se colman por la gran afluencia de vecinos desde los superbloques del 23 de Enero, las Lomas de Urdaneta y Altavista, y la zona baja de los Magallanes. En su recorrido se ubican dos edificaciones de carácter patrimonial: el Mercado Municipal de Catia instalado en 1951 (que tomó como referencia el Mercado de San Jacinto –demolido en 1942- del cual aprovechó el techo y las rejas) y el teatro Catia inaugurado en 1940 y cerrado en 1980 para convertirse hasta 2006 en una tienda clausurada por el mal estado del edificio en 2007, el cual fue restaurado en 2015.
6. Propuesta para el Bulevar de Catia del Instituto de Arquitectura Urbana (IAU). Derecha: Torres de vivienda y Jefatura Civil de la parroquia Sucre, únicos elementos construidos (1984) por el Centro Simón Bolívar.
Para el Bulevar, mientras se construía el Metro, el Instituto de Arquitectura Urbana (IAU) creado en 1979 por 26 arquitectos de reconocida trayectoria, que Oscar Tenreiro define en su blog Entre lo cierto y lo verdadero del 01/02/2014 como “institución de carácter gremial-cultural … en cierto modo calcada del IAUS (Institute for Architecture and Urban Studies) que funcionaba en Nueva York por esos tiempos y disfrutó de un considerable éxito”, hizo una propuesta enmarcada en «la exploración de ideas de Diseño Urbano para distintas zonas de la ciudad, (que era) su actividad preferencial». Dicho planteamiento interesó particularmente al Centro Simón Bolívar y a la Gobernación del Distrito Federal, «instituciones donde tenía un buen poder de decisión (era miembro de la Directiva del Centro Simón Bolívar y alto ejecutivo de la Gobernación) el Arq. Francisco Pimentel Malaussena”, quien “se abrió hacia este grupo promoviendo un diálogo sobre la ciudad de carácter muy fructífero y de allí dependieron algunas realizaciones promovidas por el Centro Simón Bolívar, entre las que destacan lo que se llamó el Boulevard de Catia en el Oeste de la Ciudad…”. De hecho, el Centro Simón Bolívar con base en la propuesta del IAU, emprendió la construcción de tres torres de vivienda sobre el espacio que estamos comentando (que no tuvieron la repercusión deseada) y de la Jefatura Civil de la parroquia Sucre, ambos trabajos de 1984.
7. Diversas tomas del Bulevar de Catia en la actualidad
Como se recoge de la ficha elaborada por María Isabel Peña en Caracas del valle al mar. Guía de Arquitectura y paisaje (2015), “desde 2009 el Bulevar se extendió a partir de la sexta avenida de El Atlántico hasta la avenida principal de La Silsa, en una modalidad mixta, incorporando en tramos el paso de automóviles. Las ultimas transformaciones efectuadas en el Bulevar hicieron esfuerzos importantes en recuperarlo para el uso de los niños y la población de la tercera edad, incorporado mobiliario urbano”.
8. El Bulevar de Catia en tiempos de pandemia a comienzos de 2011
Hoy en día, en medio de la pandemia, el Bulevar de Catia mantiene su vitalidad, cuenta con una buena arborización, sigue siendo el espacio de mayor dinamismo de la zona, y su principal lugar de abastecimiento, encontrándose, una vez más, tras haber sido recuperado entre 2012 y 2014, preso de la anarquía y tomado por el comercio informal. Es la clara demostración de que ante la necesidad de obtener los medios mínimos para subsistir no hay prohibición que obligue a la gente a quedarse en casa.