
1916• Se inician los trabajos de restauración de la Casa Natal del Libertador, coordinados por el ingeniero e historiador Vicente Lecuna, con la participación de los arquitectos Alejandro Chataing y Antonio Malaussena, el historiador Manuel Landaeta y el anticuario Christian Witzke, entre otros.
La casa, ubicada entre las esquinas de Traposos y San Jacinto, que había sido construida en el siglo XVII, fue comprada por el gobierno nacional en 1912 por solicitud de un representativo grupo de ciudadanos, con el fin de honrar la memoria de Simón Bolívar convirtiéndola en un museo.
La casa, típico ejemplo de nuestra arquitectura colonial, tiene un solo nivel, planta rectangular, zaguán y dos patios. Alrededor del primero se ubicaban las áreas sociales y las habitaciones. En torno a segundo, las dependencias de servicio.
El día 5 de julio de 1921, Juan Vicente Gómez la abre como monumento conmemorativo, modificando la modesta apariencia que siempre había tenido.
Hoy la conocemos con murales pintados por el artista venezolano Tito Salas, mármoles recubriendo paredes y pisos, y otros materiales presuntuosos, un falso lujo que la casa nunca tuvo mientras Bolívar vivió en ella.
HVH