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ALGO MÁS SOBRE LA POSTAL Nº 350

San Luis es una urbanización inmersa en un valle verde entre colinas ubicada en el sureste de Caracas, Parroquia El Cafetal (una de las tres parroquias constitutivas del Municipio Baruta del Estado Miranda, Venezuela), que contiene una macro-urbanización del mismo nombre.

El desarrollo urbanístico de El Cafetal (todo un modelo de expansión urbana) se inicia a partir de 1964, en lo que fuera una hacienda cafetalera, cuyo territorio era frecuentemente inundado por quebradas afluentes al río Guaire.

Así, la avenida Principal de El Cafetal, eje de todo el desarrollo, se construye sobre la quebrada homónima, una vez realizada la compra de las tierras por parte de Eugenio Mendoza y Armando Planchart, en sociedad con Venezolana de Inversiones C.A. (VICA) empresa que tuvo a su cargo la realización de la Urbanización Las Mercedes. Tras la quiebra de VICA, Mendoza y Planchart deciden vender los terrenos abriéndose la posibilidad a la participación de diferentes urbanizadores entre los que se encontraban Venezolana de Bienes S.A. y también el Banco Obrero.

Esta avenida central denominada Raúl Leoni, en honor al expresidente que gobernó Venezuela entre 1964 y 1969, y que tradicionalmente conocemos como Boulevard El Cafetal, alimenta distintas urbanizaciones construidas entre los años 60 y 70 cuyo modelo de organización y planificación residencial se extendió desde Chuao, colindante con el rio Guaire, hasta el gran terreno que hoy ocupa el centro comercial Plaza Las Américas.

El éxito de El Cafetal se debió, por un lado, a su planificación urbana y, por el otro, a la posibilidad que se le abrió a la clase media de obtener financiamiento bancario para comprar vivienda. Por otra parte, cada una de las urbanizaciones que lo componen como parroquia, fue desarrollada independientemente a partir del estudio de la geografía de los valles que fueron ocupando para, a partir de allí, proceder a trazar la vialidad y realizar el parcelamiento siguiendo un modelo de desarrollo urbano sustentado en dotarlas de todos los servicios necesarios.

1. Vista aérea del Bulevar El Cafetal desde Caurimare con la urbanización San Luis a la derecha.

En aquella Caracas, en la que aumentaba de forma vertiginosa la cantidad de automóviles, los centros comerciales (muchos de ellos anodinos, conocidos como “strip center”), se convirtieron en una parte integral de la ciudad, fomentando la economía de escala. Obedecían a una tipología de locales dispuestos en fila con una acera al frente y áreas abiertas de estacionamiento, muy extendida en América del Norte a partir de 1930 y luego repetida en todo el mundo.

En el caso de El Cafetal, donde la movilidad urbana se sustentaba primordialmente en el transporte privado, asumir esta tendencia era una alternativa de desarrollo que acercaba al residente al comercio vecinal sin tener que salir de la urbanización la cual, sumada a la idea de simplemente conducir y estacionar al justo al frente del lugar donde se va a hacer la compra, se convirtió en modelo válido de acceder a bienes y servicios.

Bautizadas con nombres de santos católicos, las nuevas urbanizaciones del sureste se desarrollaron con características singulares. A su vez, en cada una de ellas se previó colocar los equipamientos necesarios para garantizar una mejor calidad de vida sin salir del vecindario: centros comerciales, colegios, iglesias, parques y áreas deportivas, hospitales y, en algunos casos, áreas de oficinas. Todo ello con base en una planificación que sectorizaba los equipamientos y ubicaba los edificios residenciales de densidad media en las partes bajas, y viviendas unifamiliares en las partes altas.

De esta forma surgieron Santa Marta, con un Centro Comercial y edificios en su parte baja, y un eje central arbolado que conduce a diversas calles donde predominan las casas; Santa Sofía cuya concepción se basa en un eje con edificios bajos que conduce a un parque céntrico, centro comercial, clínica, colegio, sectorizada en áreas Norte, Sur y Centro; San Luis, cuyos elementos urbanos más notables son su redoma, y sus áreas verdes; Santa Paula, caracterizada por la toponimia de sus calles con nombres de planetas y signos zodiacales; Santa Ana, concebida como un conjunto de casas ordenadas a partir de la Avenida Santa Ana que conecta con el Boulevard El Cafetal, cuyas calles poseen nombres de las ciudades de Venezuela, y, finalmente, Santa Clara, con un esquema similar.

2. Vista cenital de la urbanización San Luis.

Dentro de este universo de urbanizaciones rodeadas de una generosa geografía de montañas verdes, San Luis, es quizás una de las que cuenta con mayor cantidad de áreas verdes y tesoros urbanos. El conjunto, cuyo centro comercial recientemente ha cobrado auge gracias a una buena oferta gastronómica es, por su escala, seguridad y accesibilidad un oasis verde al interior de un pequeño valle montañoso, rodeado de frondosa vegetación, con un clima insuperable.

Su estructura se compone de dos zonas claramente diferenciadas: la zona baja de la avenida principal flanqueada de edificios multifamiliares de entre 8 y 10 pisos; y la zona de casas, en las partes más altas.

La imagen que acompaña nuestra postal del día de hoy reproduce el panfleto de venta de San Luis, cuyo desarrollo estuvo a cargo de la empresa Venezolana de Bienes S.A., bajo la dirección de Juan Gabaldón, como Gerente General, y cuyo diseño correspondió a José Antonio Ron Pedrique (1927-2001), miembro de la Sociedad Venezolana de Arquitectos (SVA).

3. José Antonio Ron Pedrique. Proyecto del Centro Cívico para la Avenida Bolívar de Caracas (1961).
4. José Antonio Ron Pedrique. Izquierda: Ciudad Balneario Higuerote. Plano de zonificación y parcelamiento (1956). Derecha: Edificios Camejo y Cruz Verde, avenida Bolívar (1966).

Cabe destacar que Ron Pedrique fue un prolífico arquitecto y urbanista venezolano, egresado de la primera promoción de la Escuela de Arquitectura de la UCV (1948), que junto a Jorge Romero Gutiérrez colaboró en el diseño de las urbanizaciones Prados del Este, Terrazas del Club Hípico y muy activamente en la Ciudad Balneario Higuerote. También desarrolló en 1961 el Proyecto de Centro Cívico para la Avenida Bolívar de Caracas, con formas puras, absolutamente modernas, y vanguardistas. Un plan que, como muchos otros sobre la emblemática avenida de la capital, nunca se llegó a concretar. Asimismo, Ron Pedrique fue el autor de los edificios bajos que se colocaron delante del Centro Simón Bolívar sobre el eje de la avenida Bolívar denominados Camejo y Cruz Verde (1966), transformados luego por Carlos Gómez de Llarena en el inconcluso Palacio de Justicia.

De vuelta a la postal, en la publicidad del parcelamiento se puede leer la oferta de lotes para quintas desde 400 m2, y para edificios de 2.000 m2. Dentro de sus amenidades, la urbanización contaría con una parcela para un centro comercial, un kindergarten, una clínica (afortunadamente no construida), y un club social de 26.000 m2. A su vez, ofrecía extensas áreas peatonales y recreacionales con más de 1.000.000 de m2. El aviso promocional también hace referencia a los permisos aprobados para el urbanismo por parte de la Dirección de Malariología y Saneamiento Ambiental, la Dirección de los Recursos Naturales Renovables, la Dirección General de Ingeniería y Obras Publicas del Distrito Sucre, sumados a los documentos del parcelamiento previamente protocolizados.

5. Urbanización San Luis. Parque La Fila.

Su área recreacional más importante es el Parque La Fila, un bosque nativo protegido por la Ley de bosques y gestión forestal, limitado a actividades conservacionistas, educativas, científicas, recreativas y ecoturísticas que, junto a otras áreas, completa, como ya se adelantó, alrededor de 1.000.000 de m2. La zona ocupa una colina que forma parte de la orografía de la zona y se desarrolla paralela a la avenida principal. El parque, cuyo nombre proviene del hecho de que se puede recorrer la colina por toda su cumbre, presenta características de bosque deciduo, o bosque seco, con vegetación xerófila y árboles caducifolios, con una importante presencia de aves como guacharacas, azulejos, guacamayas, zamuros, gavilanes y hasta búhos, así como perezas, rabipelados y serpientes. Por esta razón el parque se denominó “Refugio Ecológico Parque La Fila”, o “Refugio de Aves Billy y Kathy Phelps” (como constaba en una placa al final del parque que fue removida), en honor a la conservacionista y ornitóloga de origen australiano, que dedicó su vida en Venezuela a estudiar las aves del país, recolectando más de 80.000 ejemplares que hoy formar parte la Colección Phelps, la colección privada más grande de América Latina.

Originalmente el parque La Fila tenía un hermoso y adecuado paisajismo. La actual caminería al borde del cerro que conecta la parte central con la parte alta de la urbanización miraba sobre un área donde predominaba el césped, y sus bancas estaban sombreadas por frondosas trinitarias que, enredadas en pérgolas de metal y madera, por falta de cuidado fueron desapareciendo. Los bancos colocados espaciadamente marcando pausas en un camino aún subsisten en mal estado, y carecen de mantenimiento, y la vegetación se ha desvirtuado con la siembra sin criterio alguno de especies de plantas, arbustos y arboles no aptas para este tipo de espacios por parte de los vecinos y campañas de siembra mal implementadas. Por otro lado, este circuito de senderos y pequeñas plazas con bancos que se extiende sobre la fila del cerro permitiendo vistas al valle de San Luis y de Caracas, hoy está en muy mal estado debido al tránsito constante y sin control de bicicletas montañeras que han removido la capa vegetal.

Estos senderos forman parte, junto a muchos otros, de los tesoros ocultos de San Luis, pues la urbanización se encuentra inmersa en un intricando sistema de caminos y áreas verdes, con escaleras, rutas pavimentadas y plazas en distintos puntos, que permanecen cubiertas por la densa vegetación, que permiten llegar a cotas altas y urbanizaciones vecinas. Es un complejo sistema de sendas único en el sureste, también apreciable en Santa Paula o Santa Sofía (ambas diseñadas por Ron Pedrique), que permite hacer trekking entre urbanizaciones. En el fondo, podemos afirmar que las urbanizaciones están inmersas en una red peatonal, de distinta escala, forma y tipo, que pocos conocen y que han permanecido en el olvido. Un sistema de áreas verdes que aún esperan por ser recuperados, cuidados y mantenidos bajo una adecuada política que administre los parques vecinales para el disfrute de sus habitantes.

La actividad deportiva también tiene cabida en San Luis, donde se ubica el Polideportivo Jesús “Chucho” Ramos (1918-1977), sede de la liga con el mismo nombre, perteneciente a los Criollitos de Venezuela, en homenaje al célebre pelotero venezolano que se desempeñó como outfielder y primera base con los Rojos de Cincinnati, siendo uno de los primeros jugadores venezolanos en la historia en llegar a las grandes ligas norteamericanas.

6. El escultor italiano Aldo D’Adamo (1928-1990) y dos de sus obras ubicadas en la urbanización San Luis. Izquierda: «El amor verde» (1967). Derecha: «San Luis Rey de Francia» (1968).

Sin embargo, lo más representativo de San Luis es la valiosa escultura ecuestre donde se aprecia a un caballero vestido de armadura blandiendo una lanza ubicada en la redoma de acceso a la urbanización: el Monumento a Luis IX, “San Luis Rey de Francia” (1968).

Su autor es el escultor italiano Aldo D’Adamo (Ortona, 1928 – Ortona, 1990). D’Adamo, caracterizado por crear obras monumentales en bronce, se acerca al arte a mediados de la década de 1940, asistiendo a la escuela de Giuseppe Massari. Luego va a Turín y luego a Roma, donde abre un estudio en Plaza Barberini. En Roma asistió a los estudios de Emilio Greco, Pericle Fazzini y Renato Brozzi y expuso en varias «muestras colectivas», junto con Vespignoni, Guttuso, Mazzacurati, Monachesi y De Chirico. Sus obras en via Margutta, Piazza di Spagna y Vigna Clara despertaron inmediatamente un gran interés entre los conocedores y los críticos más atentos. Después de su rica experiencia en Roma, D’Adamo viene a Venezuela, donde, en Caracas, se le abrieron las puertas del Museo de Bellas Artes, bajo el patrocinio del Ministerio de Educación. En la capital venezolana es posible apreciar muchas de sus obras inmersas en espacios públicos: “El amor verde” (1967), ubicada en la redoma de la parte alta de San Luis que representa dos almas que se fusionan; “Don Bosco” (1969) en la Plaza San Juan Bosco de Altamira, y “La familia” en Santa Paula (1970), entre otras. El Monumento a “San Luis Rey de Francia” recientemente restaurado en 2022, fue declarado por el Instituto del Patrimonio Cultural como Bien de Interés Cultural de la Nación, en julio de 2005. El solo hecho de haber incorporado una escultura de esta envergadura al ornato de la urbanización, habla de una conciencia de los promotores y arquitectos en el desarrollo de la ciudad que va más allá de una simple operación inmobiliaria.

7. El artista venezolano Carlos González Bogen (1920-1992) y dos de sus obras incorpordas a la arquitectura del Centro Comercial San Luis.

San Luis también posee otras dos importantes piezas de arte moderno cuyo autor es el pintor, escultor y muralista venezolano, nacido en Upata, Carlos González Bogen (1920-1992). Sobre la fachada sur del Centro Comercial podemos admirar un mural en relieve integrado a la arquitectura elaborado en mosaico blanco y piezas de concreto, que aborda la abstracción geométrica, mientras que una estructura tridimensional de planos plegados en hierro, desarrollada en la etapa de la abstracción constructivista, se puede apreciar como un elemento plástico útil para ocultar las maquinas del sistema de aire acondicionado del edificio. Ambas obras, a pesar de su importancia, están desatendidas y suelen pasar desapercibidas, incluso dentro de la propia comunidad de vecinos que allí hacen sus compras.

La importancia de estas obras radica en cierta medida, en que son representativas de dos vertientes de trabajo del mismo artista: el mural en relieve, y el trabajo escultórico abstracto de elementos arquitectónicos en hierro como rejas, puertas, portones y muros. Estas dos vertientes hicieron que Bogen se convirtiera entre los años 70 y 80 en el artista y colaborador predilecto de muchos arquitectos para darle una nueva dimensión estética a las áreas de servicio, las instalaciones mecánicas, accesos y halls de entrada de edificios públicos y privados. Una forma de intervención artística, que, por demás, todavía está muy presente en la arquitectura contemporánea de Caracas.

8. Tres obras de González Bogen en Caracas. Izquierda arriba: Puerta del edificio del Banco Central de Venezuela. Derecha arriba: Puerta del edificio Seguros Orinoco. Abajo: Planta baja del edificio BOD (antes Banco Consolidado), La Castellana.

Los mejores ejemplos de la obra de González Bogen son las Puertas del Banco Central de Venezuela, del Centro Profesional del Este, y del edificio de Seguros Orinoco, en Caracas. Por otro lado los murales de González Bogen forman parte de la modernidad caraqueña, y pueden ser apreciadas en el Congreso de la República; Edificio Industrial Laboratorios Ponce y Benzo en Santa Eduvigis; antiguo Banco Ítalo-Venezolano; antiguo Banco de los Trabajadores de Venezuela; Centro Profesional del Este; Ciudad Vacacional Los Caracas; Edificio Angloven; Edificio Centinela; Laguna Beach Club; Teatro del Este; Palacio de Justicia; y Edificio El Universal, entre otros.

9. Vista del Ávila desde la parte alta de la urbanización San Luis. Parque La Fila.

Con todos los atributos que hemos señalado, San Luis es una urbanización con un entorno natural privilegiado, que está a la espera de acciones de cariño, cuido, sentido común y valoración por parte de sus propios habitantes, usuarios, comerciantes y autoridades locales. Un recinto que como otros que forman parte de El Cafetal, está urgido de planes de mejoras y renovación bajo la mirada atenta de arquitectos y expertos, así como de campañas que fomenten su identidad y sentido de pertenencia.

ACA

Procedencia de las imágenes

Postal. Colección Iván González Viso

  1. http://guiaccs.com/zona-8/

2. Google Earth

3. https://oscartenreiro.com/2013/12/28/una-pequena-historia-necesaria-ii/

4. Revista Integral, nº2, 1956 y Colección Crono Arquitectura Venezuela

5. Colección Iván González Viso y https://www.lavidadenos.com/volver-a-surtsey-a-ser-parte-de-su-fauna/

6. https://noivastesi.blogspot.com/2019/09/la-bagnante-1979-2019-lintensa-attivita.html y Colección Iván González Viso

7. https://patrimoniocuc.wordpress.com/tag/carlos-gonzalez-bogen/ y Colección Iván González Viso

8. http://vereda.ula.ve/wiki_artevenezolano/index.php/Gonz%C3%A1lez_Bogen,_Carlos y https://centroculturalconsolidado.org/arquitectura-y-arte/

9. https://www.lavidadenos.com/volver-a-surtsey-a-ser-parte-de-su-fauna/

1950• Instituto Nacional de Tuberculosis, El Algodonal, Antímano

Instituto Nacional de Tuberculosis.jpg

1950•  El Ministerios de Obras Públicas (MOP) concluye la construcción y pone en servicio el Instituto Nacional de Tuberculosis, en El Algodonal, Antímano, Caracas, proyectado por el arquitecto de origen español Miguel Salvador y Díaz, egresado de la UCV en 1948  (1ª Promoción de la Escuela de Arquitectura de la Facultad de Ingeniería). El edificio tiene en su fachada un mural de Carlos González Bogen (1920-1992).

HVH

1962• Edificio Sede del Banco Nacional de Descuento

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1962•  Se concluye la construcción en ocho meses del Edificio Sede del Banco Nacional de Descuento, ubicado entre las esquinas de Carmelitas y Conde, en un terreno contiguo al Correo de Carmelitas en el Centro de Caracas, diseñado por Francisco Pimentel y Klaus Heufer, con diseño estructural de la Oficina Técnica Johanson.
En un terreno de 5.000 m2 se levantó el edificio de 4.300 m2 en cuatro niveles, uno de los cuales por el desnivel de la calle se planteó como semisótano, separando la planta baja de la vía con un patio inglés. En la planta baja se concentraron todas aquellas actividades bancarias que tienen relación directa con el público. En el semisótano están Contabilidad, Tránsito y Cuentas Corrientes. En el primer piso los departamentos de créditos, personal y auditoría y en el segundo y más alto, Presidencia, Sala de Directores, Ejecutivos y el Departamento Legal.
El sistema estructural se basó en losas nervadas con módulos de 7 x 7 metros. Se distingue la escalera central de forma helicoidal y planta circular. Un volumen cúbico, de concreto en obra limpia, encierra la bóveda del Banco, la cual es visible al público desde el sótano y la planta baja. Su superficie fue tratada con un diseño positivo-negativo, en partes con acabado martillado y otras cubiertas con hojilla de plata, obra realizada por el artista plástico venezolano Carlos González Bogen.

HVH

1957• Quinta Selenia

Quinta Selenia.jpg

1957•  Se termina la construcción de la Qta. Selenia, ubicada en la Av. Principal de la urbanización La Floresta, cruce con la Av. José Félix Sosa, diseñada por el arquitecto Carlos Celis Cepero y los ingenieros Federico G. Cortés y Armando Fernández Esté. Entre los atributos de la casa está un vitral obra de Carlos González Bogen, ejecutado con cristales de catedral por Eugenio Robreño. La quinta fue adquirida al año siguiente por el Consejo de Desarrollo Científico y Humanístico (CDCH) de la Universidad Central de Venezuela (UCV) como sede. Lamentablemente ha sido modificada sucesivamente durante años sin respeto alguno por el proyecto original.

HVH

1956• Edificio Anglovén

 

Edificio Angloven.png

1956•  Se concluye la construcción del Edificio Angloven, ubicado en una parcela de 1.800 m2, en la Av. Leonardo Da Vinci y Calle Bompland, Colinas de Bello Monte, proyecto de Martín Vegas y José Miguel Galia y estructura diseñada por los ingenieros Juan Otaola Paván y Oscar Benedetti. El edificio, destinado a la exhibición y venta de automóviles ingleses, tiene planta circular con una estructura de apoyo central y columnas perimetrales inclinadas, liberándose con ello notablemente el espacio de exhibición. La cúpula que cubre el edificio tiene 30 mts. de diámetro y tan solo 7 cms. de espesor, reforzada en sus bordes con anillos de tracción precomprimidos. Además de la mezzanina y un depósito, cuenta con un sótano para un taller mecánico. El prisma de ladrillo contiene el montacarga a la vez que se convierte en elemento publicitario al contener la identificación de la empresa. Hay un mural de artista venezolano Carlos González Bogen (1920-1992), integrado al edificio.

HVH