Cómo podemos inventar (pero no predecir) el futuro de las ciudades.
No podemos predecir las ciudades futuras, pero sí podemos inventarlas. Las ciudades son en gran medida impredecibles porque son sistemas complejos que se parecen más a organismos que a máquinas. No se aplican ni las leyes de la economía ni las de la mecánica; las ciudades son el producto de innumerables decisiones individuales y colectivas que no se ajustan a ningún gran plan. Son el producto de nuestras invenciones; evolucionan. En Inventing Future Cities, Michael Batty explora lo que necesitamos entender sobre las ciudades para inventar su futuro.
Batty describe ciertos temas (principios) que se aplican a todas las ciudades. No investiga la invención de artefactos sino los procesos inventivos. Hoy en día, la forma se está divorciando cada vez más de la función; las redes de información ahora configuran las funciones tradicionales de las ciudades como lugares de intercambio e innovación. Para fines de este siglo, la mayor parte de la población mundial vivirá en ciudades, grandes o pequeñas, a veces contiguas y siempre conectadas; en un mundo urbanizado, será cada vez más difícil definir una ciudad por sus límites físicos.
Batty analiza la gran transición que se avecina de un mundo con pocas ciudades a un mundo de todas las ciudades; sostiene que las ciudades del futuro se definirán como grupos en una jerarquía; describe la futura ciudad de “alta frecuencia” y transmisión en tiempo real; considera la expansión urbana y la renovación urbana; y traza un mapa de las olas de cambio tecnológico, que se vuelven cada vez más intensas y conducen a una innovación continua, un proceso interminable de destrucción creativa del cual surgirán las ciudades del futuro.
En el marco del día mundial del urbanismo, la Comisión de Desarrollo Urbano y Territorial de la Academia Nacional de la Ingeniería y el Hábitat en alianza con el Instituto de Urbanismo de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad Central de Venezuela invita a participar en el conversatorio on line
ENFOQUES CRÍTICOS SOBRE EL DESARROLLO TERRITORIAL Y URBANO EN VENEZUELA
I. Dilemas y contradicciones del Ordenamiento Territorial Venezolano
Un trabajo venezolano fue seleccionado entre los ganadores en la XIII BIAU
Tal y como anunciáramos en nuestro Contacto FAC 392 del pasado 3 de noviembre, dos trabajos venezolanos habían resultado finalistas de la XIII edición de la Bienal Iberoamericana de Arquitectura y Urbanismo, organizada bajo el lema “CLIMAS: Acciones para el buen vivir”: “STA 184. Sistemas tecnológicos Alcaraván” y “RIO TURBIO / RIO CARIBE: Agua, paisaje y territorio” presentadas en las categorías “Obras” y Pedagogías”, respectivamente.
Pues bien, hoy nos complace anunciar que el 13 de noviembre uno de ellos, “RIO TURBIO / RIO CARIBE: Agua, paisaje y territorio”, fue seleccionado como uno de entre los diez proyectos premiados en su categoría donde llegaron a ser finalistas un total de 18.
La propuesta recoge una experiencia docente organizada por Dislocal & la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad Central de Venezuela y la Unidad Docente Extramuros de la EACRV, que contó con la participación de 10 integrantes de Dislocal, 15 profesores y 100 alumnos, con la cual se buscó darle cuerpo a “un programa pedagógico basado en una enseñanza inmersiva que explora desde el interior del territorio, combinando investigación, intervención y colaboración activa” para lo cual se propuso “una interacción entre arquitectura, paisaje, historia y cultura local por medio de un taller que examina dos escenarios donde estas relaciones se manifiestan de manera poderosa: el Valle del Río Turbio y Río Caribe”.
Profesorado: Dislocal: Ana Valenzuela, Alessandro Famiglietti, Cesar Figueroa, Gabriel García, Joao de Freitas, Khristian Ceballos , Marcos Coronel-Bravo, María-Beatríz Garcia Rincón, Ricardo Sanz, Rodrigo Marín. FAU UCV: Javier Caricatto, Alba Izaguirre, Francesca Rubertone, José A. Santana, Joel Gascón, Juan Carlos Castillo Lagrange, Melissa Parra, Teresa Birardi, Glenda Yépez, Ingrid Regalado, David Méndez, Luis Andrés Morillo, Rafael Suárez -Novoa, Teresa Birardi, Ramon Fermín.
Alumnado: Adrián Rodríguez Corro, Alexandra Araujo, Alexari Suárez, Alibeth Gil, Alison Sabrina Medina, Ana Paula Colmenarez, Andrea Reyes, Andreina Riera, Andrés Castillo, Angie Colmenarez Navas, Angie Gimenez, Anna Vanessa Piña, Antonietta Mangiafico, Ariel Pérez, Brian Acosta, Christian Da Silva, Cindy Colmenarez, Daniel Morales- Bello, Daniela Padrón, Diana Barrientos, Diana Carrero, Dianmar Olivar, Emilia Martín Colina, Emilia Santana, Fabiana Yajure, Fátima Lucana, Gabriela Hernández, Gabriela Martínez, Gabriela Sevillano, Hamilton Pérez, Harvic Madriz, Isabel Santoro, Jaymar Daboin, Jesús Oropeza, José Escalona, José Suárez, José Vidal, Juan Martínez, Juan Ortiz, Julen Sobrevila, Katerin Nieto, Leonela Sánchez, Luis Alfredo Mendoza , Luis José Marcano, Luisana Estefanía Ortega, Manuel Villalobos, María Alvarado, María Chávez, María Eloisa Daboin, María Ramos, María Segovia, Marianne Cordero, Marielys Rojas, Maryeli Suárez, Miguel Zorrilla, Naomi Cianci, Nelson Gil, Paola Reyes, Patricia Carmona, Patricia Muñoz, Patricia Rodríguez, Rommer Colmenares, Selena Suárez, Sofía Morales, Uriel Torres Pérez, Verónica Camacho, Victor Da Silva, Alanis Sánchez, Albany Atagua, Andres Gonzalez, Angelo Padilla, Anthony Villalobos Arreaza, Brigethe Sánchez, Carlos Garcia, Christian da Silva, Daniela Cadenas, Daniela Mata, Dariana Ramirez, Dayjuli Martínez, Diana Carrero, Eduardo Rivero, Erika Camposano, Fabiola Yajure Piña, Fiorella Mendez, Gabriela Hernández, Genesis Vivas, Ismael Mendoza, Jesus Emilio Salas Rojas, Jose Castillo, Judith Alvarez, Katerin Karina Nieto Moreno, Luis Berrios, Luis La Fratta, María Antonieta Ramos, Maria Belen Palomares Montes, Maria Elisa Daboin, María José Rangel Reina, Maria Alejandra Pernalete, Maria Veronica Bruzual, Melissa Mitchel Mendoza, Oriana Milano, Reinaldo Ibarra, Ricardo Arrieta, Rocco Rossi, Samuel Padron, Sebastian Loyo, Sophia Muñoz, Stephanie Maita Medina, Valentina Alvarado
Nota
Con un total de 47 proyectos premiados en 5 categorías entre un total de 879 propuestas recibidas que abarcaban 21 países iberoamericanos, la XIII Bienal Iberoamericana de Arquitectura y Urbanismo (BIAU) se celebrará en Lima (Perú) del 2 al 6 de diciembre.
El Cementerio General del Sur, inaugurado el 5 de julio de 1876, forma parte de las obras con que Antonio Guzmán Blanco llevó adelante la modernización de Caracas de las cuales han quedados importantes testimonios. Sin ser la más llamativa, obedeció a la necesidad que tenía la ciudad de contar con un camposanto que cumpliera con las condiciones de capacidad, decencia e higiene requeridas en virtud de su crecimiento.
Con su creación, además, se buscó ofrecer un servicio público y eliminar los numerosos cotos particulares existentes entre los que se encontraban, entre otros, el de “Los Hijos de Dios”, “Las Mercedes”, “San Simón”, “Los Canónigos”, el de “Los Ingleses” y el de “Los Alemanes”, más los ubicados anexos a templos, conventos y hospitales presentes en las primeras parroquias caraqueñas, dispersos en un modesto desarrollo urbano contenido entre el Ávila al norte, el río Guaire al sur, la quebrada Anauco al este y El Calvario al oeste, rodeado de haciendas como San Bernardino, La Guía, y El Conde y de numerosos sembradíos hacia el norte y el oeste del mismo, según el plano topográfico de la ciudad de Caracas para el año de 1874. Cabe acotar que tal proliferación de necrópolis obedeció a diferentes causas: la edificación de un templo, de un hospital, las diferencias de culto o la aparición de una epidemia.
1. Plano topográfico de la ciudad de Caracas, 1874.
Tomada la decisión por parte del “Ilustre Americano” en 1875, éste “comisionó al señor Gobernador del Distrito Federal, General Lino Duarte, para solicitar el terreno que serviría para este fin. Duarte, acompañado de su Secretario el señor Doctor Miguel Caballero, recorrieron los alrededores de Caracas y se fijaron en el Rincón de El Valle, en un terreno que llamaban Tierra de Jugo (según por el apellido de uno de sus antiguos dueños), terreno que forma una planicie inclinada suavemente y rodeada de colinas”, de acuerdo a lo señalado por Manuel Landaeta Rosales en Los cementerios de Caracas desde 1567 hasta 1906, libro publicado en 1906. Y continúa: “EI General Guzmán Blanco, acompañado del mismo Duarte, del doctor Jesús Muñoz Tébar, Ministro de Obras Públicas, y de otras personas más, vio el terreno y lo creyó apropiado a su objeto. EI 13 de julio de aquel mismo año, se dictó una Resolución por el Ministerio de Obras Públicas, mandando a construir el Cementerio en el lugar referido. Los planos y presupuesto para la obra los levantó el ingeniero Jesús Muñoz Tebar quién dirigió los trabajos”.
2. Plano topográfico de la ciudad de Caracas, levantado en 1889 bajo la dirección del general Vicente Mestre. En la leyenda se hace mención a la localización del Cementerio General del Sur en la Tierra de Jugo en las afueras de la ciudad y se registra aún la presencia de otros tres camposantos urbanos.
La iniciativa de realizar el cementerio en las afueras de Caracas vino acompañada de la inauguración de obras como el Puente Regeneración (o Puente de Hierro, abierto el 4 de julio de 1875) y la posterior presencia del ferrocarril hacia El Valle (Ferrocarril del Sur), que atravesaría el Portachuelo, evidencias de la búsqueda por parte del gobierno guzmancista de ampliar los espacios de la ciudad más allá del río Guaire, límite natural de la capital desde su fundación. Sería el 1 de agosto de 1887 que Guzmán dictaría un decreto “mandando abrir una cortada en las colinas del Portachuelo de El Valle, para prolongar la calle Sur 5 y acortar la distancia al Cementerio General del Sur”, aportará Landaeta Rosales. También informa que “el 15 de noviembre de 1889 se compró el segundo lote de terreno para ensanchar el cementerio” ubicado al sur de los adquiridos en 1876 con una extensión de 51.154 m2 (alrededor de 5 há) que sumadas a las originales alcanzaría las 246 hectáreas; que “las primeras aceras del interior del cementerio se hicieron… en 1890 por cuenta del Ministerio de Obras Públicas”; que “el boulevard que conduce de El Rincón de El Valle al cementerio, se hizo entre 1893 y 1896, durante en gobierno de Joaquín Crespo”, al igual que las aceras y camellón junto a la plantación de los árboles; y que “el tranvía que parte de la línea férrea de Caracas a El Valle, se inauguró a mediados de noviembre de 1895”.
3. Detalle del Plano de Caracas de Ricardo Razetti de 1897 en el que se señalan las parroquias foráneas. En rojo se resalta la ubicación del Rincón del Valle y el Cementerio General del Sur (Tierra de Jugo).
Sin embargo, a pesar de la importante decisión tomada en 1876, la aceptación del nuevo cementerio como único espacio de esas características en la ciudad debió enfrentar una férrea resistencia de parte de la población, entre otras cosas por las dificultades que ofrecía su acceso, hasta el punto en que, a la salida de Guzmán Blanco de su primer gobierno (conocido como “el septenio”, 1870-1877) y asumir la presidencia Francisco Linares Alcántara, “el Concejo Municipal facultó el 12 de julio de 1977 al gobernador del Distrito Federal, para que hiciera abrir al público los cementerios clausurados desde el 10 de julio del año anterior…quedando el Cementerio General del Sur clausurado por entonces”, como señala Landaeta Rosales.
Tal situación permanecería hasta que en 1879, al regresar Guzmán al poder y dar inicio así al “quinquenio” (1879-1884), acometió como uno de sus primeros actos “poner en actividad nuevamente el Cementerio General del Sur y clausurar los otros…”, pasando a ser definitivamente el único camposanto autorizado de la ciudad y acentuándose su carácter laico.
4. Vista panorámica del Cementerio General del Sur a finales del siglo XIX. A la izquierda el edifico de la capilla ubicado en la entrada y en el extremo derecho el panteón de Joaquín Crespo y familia.
Aquel sereno valle de ligera pendiente, originalmente destinado al cultivo de la caña de azúcar y otros rubros agrícolas, daría pie a la concepción por parte de Muñoz Tébar de un camposanto-jardín heredero de una tradición europea que lo entendía, no sólo como última morada de los difuntos, sino como un lugar de esparcimiento, organizado en este caso a partir de un eje central que sería prolongación de la avenida que le daba acceso desde su conexión con la carretera de El Valle, hoy avenida principal del Cementerio (antigua Calle Real).
5. Izquierda: Trazado del Cementerio General del Sur. Derecha: Edificio de la capilla a la entrada del camposanto.6. Una de las calzadas del cementerio.
De acuerdo a lo expuesto por Iván González Viso en Caracas del valle al mar. Guía de arquitectura y paisaje (2015), “el trazado urbano del camposanto se estructura a partir de un corto eje central, que remata en el edificio de la capilla, y luego se divide en tres calles que se introducen dentro del valle, intersectándose con vías transversales sucesivas, en donde se construyen grandes lotes rectangulares orientados norte-sur. En su entrada se encuentran dos figuras votivas de bronce creadas por el escultor de origen italiano Giuglio Roversi (1841-1920). Al interior, el área se encuentra dividida por grupos étnicos o credos. El blanco edificio de la capilla, orientado al este, destinado a actividades religiosas y administrativas, marca el inicio del camposanto. Esta se complementa con un corredor externo delimitado por una alta columnata de la misma altura de la edificación. Las columnas de basamento liso corrido poseen fuste estriado y capitel de orden dórico, y sobre ellas se levanta una fachada con molduras horizontales que lo separan de la cornisa”.
7. Dos mausoleos. El de la izquierda es el de Joaquín Crespo y familia.
Si bien con el cementerio se buscó ofrecer un espacio único en la capital, donde en principio todos serían iguales, la diferenciación social se hizo evidente al momento de enterrar y adornar la última morada de cada difunto. La presencia de obras de escultura funeraria en las tumbas de las familias más pudientes de la capital se hizo cada vez más evidente dentro del camposanto. No es casual que el principal monumento existente y uno de los primeros construidos sea el que levantara la familia del general Joaquín Crespo, (presidente de la República en dos ocasiones 1884-1886, y 1892-1898), ocupando el remate de una de las tres calles que surgen como prolongación del eje de la entrada al lugar.
8. Imágenes de la estatuaria presente en el cementerio. Arriba a la izquierda: Monumento funerario del Dr. Raimundo Ignacio Andueza Palacio, presidente de Venezuela entre 1890 y 1892,
Según Yuleima Rodríguez en “Cementerio General del Sur: Aproximación Histórica y Costumbres de los Caraqueños vistas a través de la Necrópolis” (2011) (http://servicio.bc.uc.edu.ve/postgrado/manongo36/art07.pdf): “La elaboración de esculturas y rostros de los difuntos favoreció el comercio de las marmolerías presentes en las adyacencias del cementerio, lo que contribuyó en conjunto con otras actividades vinculadas a la necrópolis al crecimiento poblacional del Rincón del Valle. Escultores famosos de la talla de Pietro Ceccarelli, Chellini, Francisco Pigna, Ventura, Morini, Julio Roversi y Emilio Gariboldi, que tenía, según una marmolería artística en el en el centro de la ciudad, entre Mercaderes y Municipal”, se hicieron presentes. De tal manera, “el camposanto llegará a ser pues, un lugar en donde se presentan obras de arte que a pesar de ser privadas pueden ser disfrutadas por el colectivo. Necrópolis, jardín o museo, la morada final de los difuntos caraqueños exaltaría a través de la belleza de los panteones el lugar de descanso de las familias más pudientes, quienes comprarán lotes de terreno para asegurar la colocación de obras de arte en los lugares de descanso de sus familiares”.
9. Detalle del Plano de Caracas y sus alrededores de Eduardo Rohl (1934) (arriba) y del Plano de Caracas Monumental de Ramón Sosa (1936) (abajo) en los que se aprecia el camposanto y el incipiente desarrollo del Rincón del Valle (Prado de María). 10. Toma aérea reciente del Cementerio General del Sur y sus alrededores.
El poblamiento del Rincón del Valle (denominado posteriormente como Prado de María y en el que hoy se ubica el sector de El Cementerio), se dará a partir de las primeras décadas del siglo XX y se acelerará a partir de los años 40, asentándose allí grupos familiares de clase media o media baja en un desarrollo desigual conformado básicamente por viviendas unifamiliares dentro de una trama regular de calles y avenidas. Con el tiempo y con dramatismo a partir de los años 60, las laderas de la pequeña cuenca se verán ocupadas por una importante cantidad de viviendas informales que a su vez comprometerán el área ocupada por el camposanto. Otro tanto acaecerá cuando en 1968 se inaugure el distribuidor “La Araña” y poco tiempo después se ejecute el ramal que lo conecta con la parroquia El Valle, el cual afectó de manera visible el sector El Cementerio y dio pie para la localización bajo el viaducto de un mercado informal que tiene alcance metropolitano.
11. Nº 123 del semanario Arquitectura Hoy del sábado 9 de septiembre de 1995, donde fue publicada la convocatoria al Concurso Nacional de Ideas Áreas de Acceso al Cementerio General del Sur.12. Izquierda: Vista aérea del sector El Cementerio indicando el área objeto del concurso, ampliada a la derecha.
Es a finales del siglo XX durante la gestión que llevó adelante La Causa R en el Municipio Libertador, cuando el área ya había sido declarada como monumento histórico en 1982 y se encontraba en un estado de claro deterioro, que se buscará atender una ingente necesidad que aquejaba al Cementerio General del Sur desde hacía mucho tiempo. Es así como desde la Dirección Ejecutiva de Planes y Proyectos del mencionado municipio se produjo la convocatoria en 1995 a un concurso que tuvo las siguientes particularidades, de acuerdo al aviso publicado el 9 de septiembre de 1995 en el semanario Arquitectura HOY:
Se convocaba, en principio, “a todas aquellas personas que pudieran aportar ideas en relación a las Áreas de Acceso al Cementerio General del Sur”.
Fue abierto a nivel nacional, de manera libre y estaba dirigido a “todo tipo de personas afín a las artes”, es decir “pintores, escultores, arquitectos, artistas plásticos, etc. pudiendo concursar solos o en equipo”.
El objetivo era “buscar una acción decidida en la puerta de entrada al cementerio, así como también, todo aquello que involucre las áreas de acceso y sus adyacencias”.
Se subrayaba que para el planteamiento que se haga, la presentación alcanzará el “nivel de IDEAS, bajo libertad de pensamiento, juicio y criterio”.
Se estableció un mes de trabajo para la realización de la idea: del 18 de septiembre de 1995 al 18 de octubre de 1995, aunque luego se dio una prórroga hasta el 22 de ese mismo mes.
Se señalaba que “en la presentación de los trabajos no se exigirá el anonimato”.
No se establecía escala alguna para la presentación. La misma debía entregarse sobre material rígido y podría consistir en un mínimo de una y un máximo de tres láminas en formato de 60 x 90 cms.
Se otorgaría un primer premio y un máximo de tres menciones honoríficas a juicio del jurado.
Una vez cumplidos los lapsos establecidos, el jurado conformado por Francisco Sesto (Director de Gestión Urbana), Lucas Pou Ruan (Director Ejecutivo de Planes y Proyectos), Rosa Stredel (Presidenta de Fundapatrimonio) y Tulio Hernández (Presidente de Fundarte), adjudicó el Primer Premio al arquitecto Doménico Silvestro (Universitá degli Studi, Nápoles, Italia. Reválida UCV, 1969).
13. Nº 128 del semanario Arquitectura Hoy del sábado 11 de noviembre de 1995, donde fue publicado el veredicto del jurado y dos imágenes de la propuesta ganadora del concurso.
El acta, publicada en la edición del sábado 11 de noviembre de Arquitectura HOY, acompañada de la imagen que ilustra nuestra postal del día de hoy y una planta de la idea presentada (únicos documentos que nos ha sido posible ubicar), apunta que “el trabajo destaca a juicio del jurado por su comprensión de la globalidad del problema y configura una idea que expresa claridad y fuerza al tiempo que sintetiza la escala monumental y la doméstica en una solución muy atractiva estrechamente ligada al lugar”.
14. Planta de la idea ganadora del concurso.
El jurado otorgó, además, tres Menciones Honoríficas que recayeron una en el planteamiento hecho por Roberto Castillo, la segunda sobre el equipo conformado por María José Sedales, Juan Luchsinger y Hugo D’Enjoy y la tercera en la pareja constituida por Alessandro Famiglietti y Ángela Rodríguez.
En camino a cumplirse 30 años desde la realización de aquel certamen, la propuesta ganadora, concebida y tratada como una “puerta urbana” que le otorgaba identidad al sitio, destacando “los hitos” de mayor significación, en este caso, las capillas del cementerio, utilizando los volúmenes arquitectónicos y la arquitectura misma, como vínculo articulador de lo urbano, cayó, como tantos concursos que en su momento generaron grandes expectativas, en saco roto.
15. Dos tomas del Bulevar César Rengifo o Bulevar El Cementerio.
El año 2009 se aprobó e inició un plan para recuperar la antigua Calle Real de El Cementerio que, de acuerdo a Wikipedia, “fue transformada en 2011 en un nuevo Bulevar de 1,8 kilómetros con rampas, caminerias y espacios para realizar ejercicios a lo largo de 11 cuadras” que cuenta con 2500 metros cuadrados de superficie. La inauguración del hoy conocido como Bulevar Cesar Rengifo o Bulevar El Cementerio por parte de las autoridades municipales se llevó a cabo el 19 de abril de 2011, “convirtiéndose en el segundo Bulevar más grande de la ciudad capital venezolana”. Hasta ahora no hemos encontrado mención alguna con respecto a si las áreas de acceso al cementerio fueron incluidas en los trabajos o si se tuvo en cuenta la propuesta presentada por Silvestro quien, dicho sea de paso, fue reconocido en 2010 por el CONAC con el Premio Nacional de Arquitectura. Tampoco en los anuncios de recuperación del camposanto anunciados en 2021.
ACA
Procedencia de las imágenes
Postal, 11, 13 y 14. Colección Fundación Arquitectura y Ciudad.
1, 2, 3, 5 y 9. Iván González Viso, María Isabel Peña y Federico Vegas. Caracas del valle al mar. Guía de arquitectura y paisaje. 2015.
15. Colección Crono Arquitectura Venezuela; y Iván González Viso, María Isabel Peña y Federico Vegas. Caracas del valle al mar. Guía de arquitectura y paisaje. 2015.