
Archivos diarios: 15 de septiembre, 2024
VALE LA PENA VOLVER A LEER

Ludwig Mies van der Rohe (1886-1969), uno de los más importantes arquitectos del siglo XX, como se sabe, desarrolló su carrera en dos períodos: el que transcurre en Europa desde que comienza su etapa de aprendizaje e inicios del ejercicio de la profesión (en fecha tan temprana como 1907), y continúa con su crecimiento y madurez como parte de la Escuela de Berlín y como último director de la Bauhaus (1930-1933); y el segundo que se inicia tras emigrar a los Estados Unidos en 1937 donde arranca lo que se conoce como su etapa americana.

De su ciclo europeo, para muchos el más rico e interesante en lo que a nivel intelectual, experimental y propositivo se refiere, si algo destaca es la intensidad con que Mies vivió el período de entreguerras y las diversas facetas que entonces mostró. Una de ellas, poco resaltada, fue la que desplegó, una vez incorporado al Novembergruppe en 1922, como parte del consejo editorial de la revista G: Material zur elementaren Gestaltung, publicación de vanguardia editada e impresa en Berlín por Hans Richter de la que se produjeron cinco números en alemán entre 1923 y 26. Si El Lissitzky y Werner Graeff formaron parte del consejo editorial del primer número, Mies y Frederick Kiesler se unieron a Richter como editores a partir del segundo. Entre los colaboradores se encontraban Theo van Doesburg, Ludwig Hilberseimer, Raoul Hausmann, El Lissitzky, Hans Arp, Kurt Schwitters, Piet Mondriaan, Viking Eggeling, Naum Gabo, Antoine Pevsner, Ernst Schön, George Grosz, John Heartfield, Tristan Tzara y Man Ray.
Ubicados en este contexto es donde se puede reconocer, también, a un Mies vehemente que expresa a través de escritos breves y concisos, que algunos han clasificado dentro de la categoría de manifiestos, su visión de la arquitectura en un momento en el que era importante tomar partido ante una época de cambios donde la disciplina debía mirar hacia el futuro e identificarse a través de un lenguaje que fuera reflejo de una sociedad postindustrial y que reclamaba nuevas organizaciones urbanas, funciones, formas, materiales y técnicas, sumándose a lo que es considerado como el período heroico dentro de la evolución del Movimiento Moderno.

De los textos rescatados de manera integral por Fritz Neumeyer en Mies van der Rohe. La palabra sin artificio. Reflexiones sobre arquitectura. 1922-1968 (1986, traducido al español en 1995), de los cuales 5 de ellos ya habían formado parte de Programas y manifiestos de la arquitectura del siglo XX de Ulrich Conrads (1964, traducido al español en 1973), nos interesa resaltar los publicados en revistas entre 1922 y 1930, en los que se ve con claridad tanto las constantes como la evolución de su pensamiento en torno a la arquitectura.


Así, formando parte de esta saga, encontramos que Mies aparece primero en el nº 4 (1922) de Frühlicht (revista editada por Bruno Taut) firmando un artículo titulado “Rascacielos” (“Wolkenkratzer”); luego, ya como colaborador y editor de G, redacta los textos “Edificio de oficinas” (“Bürohaus”) en el nº 1 (julio 1923), “Construir” (“Bauen”) en el nº 2 (septiembre 1923) y “Construcción industrial” (“Industriebau”) en el nº 3 (junio 1924); más adelante “¡Arquitectura y voluntad de época!” (“Baukunst und Zeitwille!”) en Der Querschnitt (nº 1, 1924); y, por último, en Die Form se publicarán “Sobre la forma en arquitectura” (“Über die Form in der Architektur”), nº 2, 1927; y dos veces “Los nuevos tiempos” (“Die neue Zeit”) en el nº 15, agosto de 1930 y luego en el nº 10 octubre de 1932.
Dentro de ese grupo de escritos, con mayor énfasis en unos y otros, se evidencian temas como la importancia de lo constructivo junto a su claridad a la hora de manifestarse a través de la estructura portante, así como su interés por los materiales, sus orígenes y limitaciones técnicas. Suya es la cita “La arquitectura empieza en el momento en que dos ladrillos se ponen con esmero uno junto al otro”. También aparece la idea de flexibilidad espacial y la relevancia de diferenciar la piel (envolvente) de los huesos (sistema estructural) llevando la primera a su mínima expresión encontrando en el vidrio su mejor aliado y en la tipología del edificio en altura su cabal representación. Hormigón, acero y vidrio, los materiales más emblemáticos de la modernidad, son los que Mies utiliza colocando especial cuidado en la resolución de los detalles.
Resalta, además, su postura crítica con la deriva personalista en la que se encontraba gran parte de la arquitectura más representativa de su tiempo ya que consideraba que la arquitectura pertenecía a una época y no a un individuo.

“Rechazamos: toda especulación estética, toda doctrina y todo formalismo. La arquitectura es la voluntad de la época expresada espacialmente. Viva, cambiante, nueva. Ni al pasado, ni al futuro, sólo puede dársele forma al presente. Sólo esta arquitectura puede crear. Crear la forma con los medios de nuestro tiempo, a partir de la esencia de la tarea. Este es nuestro trabajo”, dirá Mies al iniciar el artículo “Edificio de oficinas” (“Bürohaus”).
Justamente en ocasión de comentar el texto mencionado, Juan Calduch Cervera (http://www.mindeguia.com/dibex/Mies_Calduch.htm) devela un interesante paralelismo entre los textos escritos por Mies y los proyectos vanguardistas que los acompañan los cuales “se representan ajustados a las convenciones gráficas vigentes en su entorno”, pero se realizan experimentalmente “sin voluntad de hacerse realidad”, abriéndose y cerrándose un ciclo en el que “el arquitecto nunca más volvería a hacer dibujos de arquitectura que no respondiesen a un encargo o a unas condiciones concretas”.
“En estos textos y dibujos Mies va aislando y analizando, casi como si se tratase de ensayos de laboratorio, distintos problemas disciplinares que le preocupaban. Es como si antes de poner en práctica sus ideas, quisiera concretarlas y aclararlas mediante dibujos y escritos. Hacia 1925 con obras como el monumento a Rosa Luxemburg y Karl Liebknecht (cementerio de Berlin-Friedrichsfelde, 1926) esa fase experimental y esa doble vía profesional tienden a fundirse abriendo la etapa más fructífera de su etapa europea”.
Es así como hemos tomado la decisión de ofrecerles, como muestra de la actitud y pensamiento de Mies en aquel rico período, donde un grupo textos programáticos nos lo muestran “agresivo, polémico, rabiosamente moderno y provocador”, el escrito “La nueva era” o “Los nuevos tiempos (“Die neue Zeit”) que como ya indicamos apareció en la revista Die Form (La forma) primero en el nº 15, agosto de 1930 y luego en el nº 10, octubre de 1932, en el que muestra si se quiere una faceta diferente, menos vehemente, y a la vez complementaria a la que caracterizó lo publicado entre 1922 y 1927.

Se trata de la transcripción de las palabras finales de la ponencia que Mies presentara en el congreso del Deutscher Werkbund celebrado en Viena en 1930. La traducción, proveniente del libro de Ulrich Conrads ya citado, está antecedida por un comentario que señala cómo el arquitecto alemán en “Die neue Zeit” “se erige en defensor decidido de lo ‘espiritual en la arquitectura’. Considera el camino hacia la arquitectura industrial, que había propuesto en 1924, bloqueado por malentendidos. El pregonador se ha convertido en amonestador. Con anticipación profética prevé que el progreso técnico acarreará una pérdida del significado de la arquitectura. (…) … habla del desarrollo de las cosas ‘ciegas a todo valor’, que conduce a la pérdida de significación y, con ello, a la pérdida de criterio y al caos de los valores”.
A continuación, el breve pero sustancioso texto que esperamos puedan disfrutar.

La nueva era
La nueva época es un hecho; existe independientemente de que la aceptemos o la rechacemos. Pero no es mejor ni peor que cualquier otra época. Es un puro dato y como tal indiferente a toda valoración. Por ello, no me entretendré mucho intentando explicar la nueva época, señalando sus relaciones y poniendo al descubierto la estructura que la sostiene.
No sobrevaloraremos tampoco el tema de la mecanización, de la estandarización y la normalización.
Y aceptemos como un hecho el cambio de las relaciones económicas y sociales.
Todas estas cosas siguen su evolución predeterminada y ciega de valores.
Lo único decisivo será cómo nos revalorizamos bajo estas circunstancias dadas. Ahí es donde comienzan los problemas espirituales.
No de trata de “qué” sino de “cómo”.
El hecho de que produzcamos bienes y los medios que empleamos para fabricarlos, no significa nada en el plano espiritual.
El hecho de que construyamos vertical u horizontalmente, con acero y vidrio, no dice nada sobre el valor de esa arquitectura.
El hecho de que en urbanismos se busque una centralización o una descentralización es un problema práctico, no valorativo.
Pero precisamente el problema del valor es decisivo.
Debemos establecer nuevos valores, señalar los objetivos últimos, para recuperar el criterio.
El sentido y la razón de ser de toda época, y por tanto también de la nueva, radica única y exclusivamente en el hecho de que proporcione al espíritu las condiciones previas, la posibilidad de existir”.
ACA
Procedencia de las imágenes
1. 20 cosas que no sabías de Mies van der Rohe (https://www.archdaily.co/co/784292/20-cosas-que-no-sabias-de-mies-van-der-rohe?ad_medium=gallery)
2 y 5. VEREDES. Arquitectura y divulgación. Colección completa de la revista G: Material zur elementaren Gestaltung (https://veredes.es/blog/coleccion-completa-de-la-revista-g-material-zur-elementaren-gestaltung/)
3. Colección Fundación Arquitectura y Ciudad.
4. BIBLIO (https://biblio.es/libro/fruhlicht-taut-bruno-ed/1385112084)
6. VEREDES. Arquitectura y divulgación. Colección completa de la revista G: Material zur elementaren Gestaltung (https://veredes.es/blog/coleccion-completa-de-la-revista-g-material-zur-elementaren-gestaltung/); y Dibujos ejemplares de arquitectura (http://www.mindeguia.com/dibex/Mies_Calduch.htm)
7. VEREDES. Colección completa de la Revista Die Form (La Forma) (https://veredes.es/blog/coleccion-completa-de-revista-die-form-la-forma/); y booklooker (https://www.booklooker.de/B%C3%BCcher/Die-Form-1930-Heft-15/id/A01YupzL01ZZ1)
8. plakatkontor.de (https://www.plakatkontor.de/plakatkatalog-15/nr-1—6/index.html
ES NOTICIA
Walter Hood recibe el premio Vincent Scully 2024 a la excelencia en el diseño paisajístico

Escrito por Nour Fakharany
Publicado el 10 de septiembre de 2024
Tomado de www.archdaily.com
El National Building Museum de Washington, D.C. acaba de anunciar que Walter Hood es el 26º ganador del prestigioso premio Vincent Scully. Walter Hood es un célebre diseñador paisajista que trabaja en espacios públicos y entornos urbanos. Establecido en 1999, este premio reconoce contribuciones destacadas en arquitectura, preservación histórica y diseño urbano a través de la práctica, la erudición o la crítica. Hood se suma ahora a las filas de ganadores notables del pasado como Theaster Gates, Dolores Hayden y Mabel O. Wilson.
Reconocido por su impactante trabajo en el diseño de paisajes sostenibles que mejoran las comunidades urbanas y empoderan a los grupos marginados, Hood fundó Hood Design Studio en Oakland, California, en 1992. Sus prácticas se centran en la integración del arte, el diseño paisajístico y la investigación urbana para responder al contexto de cada proyecto. Entre sus principales proyectos se incluyen el Museo Internacional Afroamericano en Charleston, Carolina del Sur, el Museo Oakland de California y el recientemente inaugurado Lift Every Voice and Sing Park en Jacksonville, Florida.
Además de su práctica profesional, Hood se desempeña como presidente del Departamento de Arquitectura Paisajista y Planificación Ambiental en la UC Berkeley, donde influye en la próxima generación de diseñadores y planificadores. Su distinguida carrera le ha valido varios premios importantes, entre ellos la Beca MacArthur 2019, el Premio Dorothy y Lillian Gish 2019 y la Medalla del Presidente de la Architectural League en 2021.
Hood se centra especialmente en el espacio público urbano y, a diferencia de muchos de sus pares en el diseño paisajístico, se esfuerza por trabajar tanto a escala de grandes proyectos públicos como el Museo De Young en San Francisco y el Museo Broad en Los Ángeles, como a escala íntima de proyectos comunitarios de barrio. Su trabajo reciente en el Museo Internacional Afroamericano en Charleston, Carolina del Sur, ha sido especialmente admirado. Tuvimos presente la propia historia de Vincent Scully como académico que se enorgullecía de ser un activista en cuestiones sociales y políticas. –El jurado del premio
Los premios de arquitectura reconocen la excelencia en el diseño, la innovación y las contribuciones al entorno construido, y a menudo honran a individuos y proyectos que tienen un impacto significativo en la sociedad, la cultura y el desarrollo urbano. En otras noticias similares, Kazuyo Sejima y Ryue Nishizawa, fundadores de la reconocida firma de arquitectura SANAA, han sido anunciados como los ganadores del Le Prix Charlotte Perriand 2025 de los Créateurs Design Awards. Además, el Museo Británico ha seleccionado a cinco equipos liderados por arquitectos para la etapa final de su Concurso Internacional de Arquitectura, incluidos 6a Architects, David Chipperfield Architects, Eric Parry Architects y Jamie Fobert Architects, Lina Ghotmeh — Architecture y OMA.
ACA
ES NOTICIA
Los fundadores de SANAA, Kazuyo Sejima y Ryue Nishizawa, recibieron el premio Le Prix Charlotte Perriand 2025

Escrito por Maria-Cristina Florian
Publicado el 9 de septiembre de 2024
Tomado de www.archdaily.com
Kazuyo Sejima y Ryue Nishizawa, fundadores de la reconocida firma de arquitectura SANAA, han sido anunciados como los ganadores de Le Prix Charlotte Perriand 2025 de los Créateurs Design Awards. El premio, anunciado en París, Francia, reconoce las contribuciones excepcionales a la arquitectura y el diseño modernos. Sejima y Nishizawa, conocidos por sus diseños minimalistas que integran forma, función y medio ambiente, siguen siendo reconocidos como innovadores en el campo, habiendo sido previamente favorecidos con el prestigioso Premio Pritzker de Arquitectura en 2010. Sejima y Nishizawa recibirán Le Prix Charlotte Perriand en la ceremonia de los Créateurs Design Awards en París el 18 de enero de 2025.

Lanzados en 2021, los Créateurs Design Awards se encuentran ahora en su cuarta edición, continuando su misión de celebrar a los innovadores en arquitectura y diseño al tiempo que honran el legado de la modernista francesa Charlotte Perriand. La edición de este año marca la primera vez que el premio se otorga a dos personas.

Kazuyo Sejima y Ryue Nishizawa nacieron en Japón en 1956 y 1966, respectivamente. Sejima obtuvo su maestría en arquitectura de la Universidad de Mujeres de Japón en 1981 antes de colaborar con Toyo Ito y establecer su propia firma. Nishizawa se incorporó a su estudio durante sus estudios en la Universidad Nacional de Yokohama, lo que llevó a la fundación de su aclamado estudio de arquitectura, SANAA, en Tokio en 1995. SANAA ha ganado reconocimiento internacional por proyectos como el New Museum en la ciudad de Nueva York y el Museo Louvre-Lens en Francia. Entre sus proyectos más recientes se incluyen el Museo Moderno de Sídney en Australia, el Nuevo Campus Urbano de la Universidad Bocconi en Milán, Italia, o la ampliación del famoso centro comercial parisino La Samaritaine. Los diseños innovadores del dúo les han valido numerosos galardones, incluido el Premio del Instituto de Arquitectura de Japón y el Premio Praemium Imperiale de arquitectura. El año pasado, Sejima recibió el Premio Jane Drew por su impacto en la promoción de la mujer en la arquitectura.

Es un gran honor recibir un premio que lleva un nombre tan importante. Charlotte Perriand es una de las maestras de la arquitectura moderna y admiramos sus delicados diseños de interiores y muebles. – Kazuyo Sejima y Ryue Nishizawa

Entre los ganadores anteriores del premio se encuentran la arquitecta mexicana Frida Escobedo en 2024, elogiada por su dedicación a la creación e implementación de diseños ejemplares; y la fundadora de Studio Gang, Jeanne Gang, un año antes, por su dedicación a la creación e implementación de mejores prácticas en reutilización sustentable, biodiversidad ecológica y equidad social.
ACA
ES NOTICIA
Shigeru Ban recibe el premio Praemium Imperiale de arquitectura 2024

Escrito por Maria-Cristina Florian
Publicado el 11 de septiembre de 2024
Tomado de www.archdaily.com
El arquitecto y filántropo japonés Shigeru Ban ha sido nombrado el 35º galardonado con el Praemium Imperiale de arquitectura. Establecido en 1988 por la Asociación de Arte de Japón, el premio anual busca reconocer logros excepcionales en pintura, escultura, arquitectura, música y teatro/cine. Las contribuciones de Shigeru Ban a la arquitectura han sido significativas, no solo por la estética distintiva del diseño, sino también por el uso innovador de los materiales, particularmente en el contexto de intervenciones de emergencia y trabajo humanitario.

Nacido en Tokio en 1957, los primeros intereses de Shigeru Ban no apuntaron a la arquitectura, sino a la carpintería, debido a su creencia infantil de que los carpinteros eran los responsables de construir todas las estructuras. Esto sentó las bases de su apreciación duradera de la madera, que continúa influyendo en su trabajo. El interés de Ban se dirigió pronto al diseño arquitectónico y estudió en el Instituto de Arquitectura del Sur de California y más tarde en la Escuela de Arquitectura de Cooper Union en Nueva York, donde recibió la influencia de arquitectos destacados como John Hejduk.

El trabajo de Ban se caracteriza por el uso creativo de materiales no convencionales, en particular el papel y tubos de cartón. Estos materiales no solo son rentables sino también sostenibles, en consonancia con la creciente conciencia ambiental en el campo de la arquitectura. Uno de sus primeros y más famosos proyectos es la Iglesia de Papel (1995) en Kobe, Japón, creada como reemplazo temporal de una iglesia destruida por el gran terremoto de Hanshin. Este proyecto ejemplificó su filosofía de crear una arquitectura que satisfaga las necesidades inmediatas y al mismo tiempo sea flexible y sostenible.
El compromiso de Ban con la arquitectura humanitaria se demuestra aún más a través de sus proyectos de ayuda en caso de desastres en todo el mundo. Desarrolló soluciones innovadoras como la Casa de Troncos de Papel, que proporciona viviendas temporales y dignas para las poblaciones afectadas por desastres. Estas estructuras se han utilizado en áreas afectadas por terremotos como los de Haití y Nepal, lo que demuestra su dedicación a abordar las necesidades humanas urgentes a través de un diseño reflexivo.

Diseño casas y edificios públicos, pero la ayuda humanitaria es el trabajo de mi vida. – Shigeru Ban

Además de su labor humanitaria, los proyectos de Ban suelen emplear materiales locales de manera prioritaria, lo que da lugar a obras distintivas como el Centro Pompidou-Metz en Francia o el Campus Swatch y Omega en Suiza. Por todas sus contribuciones, Shigeru Ban recibió el prestigioso Premio Pritzker de Arquitectura en 2014, en reconocimiento a su enfoque innovador y su compromiso con la sostenibilidad y el humanitarismo.

Además de Shigeru Ban, la edición 2024 del Praemium Imperiale reconoce a la artista Doris Salcedo en la sección de Escultura, a Maria João Pires como laureada de Música, al director de cine taiwanés Ang Lee como laureado de Teatro/Cine y a la artista conceptual francesa Sophie Calle como laureada de Pintura. El año pasado, Diébédo Francis Kéré fue laureado con el Praemium Imperiale 2023 de Arquitectura.
ACA
ALGO MÁS SOBRE LA POSTAL Nº 420

De entre los ejemplos que Juan Pedro Posani destaca a la hora de desarrollar el capitulo titulado “El eclecticismo como sistema” en Caracas a través de su arquitectura (1969), basado en un trabajo anterior que lleva por nombre “El eclecticismo criollo”, publicado en el Boletín del CIHE, nº 6 (septiembre 1966), especie de corriente que florece entre las primeras generaciones de arquitectos formados en Venezuela durante los años 50 y 60 del siglo XX que se funda “1) En el uso de las formas del pasado reciente y 2) En el concepto de estilo en tanto creación esencialmente personal”, donde los referentes temporales a los que los jóvenes profesionales remiten no son otros que los grandes maestros del Movimiento Moderno, aparecen dos casas diseñadas por Gorka Dorronsoro (1939-2017) en Caracas: una ubicada en Cumbres de Curumo de 1965 y otra que Posani localiza en Los Guayabitos, cuando en realidad se encontraba en la urbanización El Placer, de 1968.
Al referirse a las dos obras, Posani establece una sutil e interesante comparación entre ellas, que creemos vale la pena reproducir como preámbulo a la nota que tiene como protagonista a la segunda de ellas: la Quinta Consuelo o Casa Garmendia, cuya fotografía tomada desde el noreste engalana nuestra postal del día de hoy.

Sobre la vivienda de Cumbres de Curumo Posani señala, siempre en el marco de lo que considera una operación de eclecticismo instrumental por parte de Dorronsoro, lo siguiente: “Esta es una obra en la cual se muestra evidentísimo el deseo de ceñirse con la mayor fidelidad al espíritu y al lenguaje formal de Le Corbusier. Pero un Le Corbusier muy particular, en el que se mezclan aspectos y sugerencias formales de los años veinte con elementos del Le Corbusier de la Maison Jaöul y del Convento de La Tuorette”. Por otro lado, sobre la Casa Garmendia expresa: “En esta otra obra refleja una notable evolución con relación a la anterior. Sin desligarse del ámbito de la cultura ecléctica (Mies, esta vez) la búsqueda se aproxima a una suerte de ‘realismo’ arquitectónico, basado sobre la identificación de las cualidades constructivas de los materiales”.

Más allá de las diferencias que se puedan tener en cuanto a los referentes a los que apunta Posani con relación a la vivienda unifamiliar que hoy nos ocupa, lo cierto es que el proyecto, realizado en 1964, año en el Dorronsoro egresa de la FAU UCV, y se incorpora como asistente de Carlos Raúl Villanueva en la Oficina de Planificación de Construcciones de la UCV, permite apreciar que se trata de una muestra de sapiencia en cuanto a la adaptación al accidentado terreno donde debió implantarse y de reconocimiento del paisaje circundante propio de las afueras de la ciudad.


Para lograr la exitosa respuesta, el arquitecto propuso insertar en el terreno de 776,83 m2 un prisma de base rectangular como volumen principal con sus lados mayores en sentido norte-sur, colocado paralelamente a las curvas de nivel de la parcela, que contiene la totalidad de los componentes del programa. Además, apela al juego de una serie de planos horizontales y verticales: los primeros enfatizados mediante una amplia terraza desarrollada longitudinalmente que se abre hacia las vistas lejanas a modo de extensión de las áreas sociales (fachada norte), reforzados con la presencia de otra terraza menor que aprovechan las habitaciones en la planta alta; y los segundos utilizados en la composición de la fachada sur donde se ubica el acceso, cuyo protagonista es un cilindro que contiene la escalera en caracol que permite subir a la planta alta.

La casa, apreciable como un todo plenamente incorporado al paisaje desde la curva en pendiente de la calle que la bordea y le da acceso, combina estructuras mayormente metálicas y de concreto con el ladrillo macizo usado como cerramiento tanto de la pieza arquitectónica como del terreno que la contiene. De metal también son la ventanería y los antepechos de la terraza hacia la que se abren las habitaciones.
Proyectada, como ya se insinuó, en dos plantas, en la primera se ubica el acceso vehicular y peatonal junto a las áreas sociales (sala y comedor de miran al paisaje) y de servicio (cocina, cuarto de servicio y cuarto de lavado) más próximas a la entrada. Por medio de la ya mencionada escalera de caracol se accede a la segunda planta, con independencia del tránsito de la planta baja, donde se ubican cuatro habitaciones y dos baños, así como un estar. El balcón que une todas las habitaciones en el frente norte funciona a su vez como elemento de protección solar.

Publicada por primera vez por Posani, la Casa Garmendia apareció ampliamente documentada (sin comentarios que la acompañaran) en la revista Punto nº 47 (noviembre-diciembre 1972) voluminoso ejemplar de referencia que también incorporó, entre otros: el Edificio del INCE de Tomás José y Eduardo Sanabria; el Edificio de Seguros Orinoco de José Miguel Galia; la Torre Phelps de José Puig; el Edificio Nuevo Centro de Julio Coll Rojas; el Almacén Central de Repuestos Volkswagen de Dirk Bornhorst; y una vivienda unifamiliar en Porlamar de Pablo Lasala.

Dorronsoro, incorporado como ya se dijo entre 1964 y 1972 al equipo liderado por Carlos Raúl Villanueva en la Oficina de Planificación de Construcciones de la UCV, proyectó el edificio de Ingeniería Sanitaria (1970-1975), el de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales (1967-1977) y, de manera independiente, el de Ingeniería Metalúrgica (1976-1988) con la colaboración de Julio Riquezes. Además, entre 1993 y 1999, junto a Juan Pedro Posani y Frank Marcano retomará la idea de actualizar el Plan Rector de la CUC buscando darle continuidad a lo dejado por Villanueva en los años 70. Talentoso arquitecto y estupendo fotógrafo reconocido con premios en Bienales Venezolanas de Arquitectura y exposiciones de fotografía, profesor de diseño arquitectónico y conferencista en Venezuela, Puerto Rico, Colombia y Costa Rica, Dorronsoro obtuvo el Premio Nacional de Arquitectura el año 2008.

Recientemente, la Casa Garmendia ha sido objeto de atención en las páginas de Instagram de Arquitectura Venezuela (@arquitecturavzl) y Franco Micucci (@francomicucci) quien ha aportado una serie de fotografías recientes que dan cuenta del estado de buena conservación de la obra.


También fue incorporada al curso conducido para alumnos de 3° semestre por el profesor de diseño Joao de Freitas en la Unidad Docente 9 FAU UCV durante primer de este año 2024, dedicado al Registro de arquitectura construida en Venezuela, donde los estudiantes Roiner Oropeza y Onebis Castellanos llevaron a cabo un estupendo trabajo de levantamiento y representación que incluyó la elaboración de una maqueta, y que se encuentra montado en la página de Instagram @jddefreitasjoao.
Desde el año 2005 la Casa Garmendia o Quinta Consuelo forma parte del catálogo de Bienes de Interés Cultural de la Nación, publicado en Gaceta Oficial N° 38.234, de igual forma la alcaldía del Municipio Baruta la declaró como Bien de Interés Municipal según Decreto N° 181.
ACA
Procedencia de las imágenes
Postal. Colección Crono Arquitectura Venezuela (https://fundaayc.com/2014/07/25/1967-casa-garmendia/)
1 y 2. Graziano Gasparini y Juan Pedro Posani. Caracas a través de su arquitectura (1969)
3 y 4. Revista Punto nº 47 (noviembre-diciembre 1972)
5. Caracas Moderna (http://fundamemoria.blogspot.com/2008/07/municipio-baruta-parroquia-nuestra.html)
6. Colección Fundación Arquitectura y Ciudad
7. Franco Micucci (https://www.instagram.com/p/C_F03q7u4kS/?img_index=7)
8. Joao de Freitas (https://www.instagram.com/p/C79L7zGOap7/?img_index=6)