… 20 de noviembre del año 1993 aparece el número 40 de Arquitectura HOY, dedicado por entero a cubrir el Concurso Nacional para el Edificio Sede de “El Mundo de los Niños”, San Félix, Ciudad Guayana, promovido por la Alcaldía del Municipio Autónomo Caroní (ALMACARONI).

Este importante número monográfico de Arquitectura HOY (encartado que desde 1992 hasta el 2000 circuló un total de 358 veces en la edición sabatina del diario Economía HOY), que para el momento era un suplemento de cuatro páginas, es encabezado con un artículo de Juan Pedro Posani titulado “Recomienzan los concursos”. En él, Posani, quien fuera uno de los miembros del jurado (junto a Fruto Vivas, Joel Sanz, Oscar Tenreiro, Raúl Pastrona, César Portela, Francisco Sesto y el psicólogo Richard Nejul), resume y comenta los resultados, resaltando la solidez y unanimidad con que fue emitido el veredicto. También valora el alto grado de participación y nivel de lo entregado (“89 proposiciones, muchas de las cuales –tal vez la mayoría- con una muy alta calidad profesional”) y por sobre todo detecta “…un gran deseo de participar. Un verdadero interés nacional, represado durante demasiado tiempo…”. Sin dejar de mencionar importantes antecedentes que pueden servir de referencia, Posani rescata fundamentalmente el valor que tiene la reactivación del concurso como medio idóneo para seleccionar los proyectos con los que deben ser construidas las obras públicas tanto a nivel local como nacional. Polémico tema, que jalona la historia de nuestra arquitectura, particularmente desde mediados del siglo XX hasta nuestros días.

Las páginas centrales del encartado se dedican a desplegar, junto al texto que contiene la decisión del jurado, las imágenes de la propuesta ganadora presentada por la firma OSLD (Edwing Otero, Alfredo Sanabria, Juan Lushinger y Hugo D’Enjoy), el segundo y tercer premio, así como de las cuatro menciones otorgadas.

La cuarta página, bajo el título “Los triunfadores hablan…” se destina a incorporar la opinión de los arquitectos y equipos que obtuvieron reconocimiento sumándose a ellos la voz de uno de los jurados del concurso (César Portela quien fungió de invitado internacional).

Sin lugar a dudas, transcurridos 23 años, recordar este episodio que se incluye dentro de una secuela de hasta 30 convocatorias entre 1993 y 2000 (la más intensa de nuestra andadura gremial), permite colocar ante nuestros ojos, una vez más, la poca efectividad y consecuencias tangibles que se han derivado de este mecanismo, verdadera asignatura pendiente en muchos sentidos que al menos convendría registrar y documentar con esmero para dejar testimonio de los importantes esfuerzos realizados por todos los que se han involucrado con fervor y posterior frustración en el apasionante hecho de concursar.

ACA

Procedencia de las imágenes

1. Arquitectura HOY, nº 40, 20 de noviembre de 1993