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PARA FINALIZAR EL AÑO

El Museo Nacional Zayed de Foster + Partners abrió sus puertas al público en Abu Dhabi

Escrito por Reyyan Dogan

Publicado el 4 de diciembre de 2025

Tomado de https://www.archdaily.com

El Museo Nacional Zayed, museo nacional de los Emiratos Árabes Unidos y un pilar fundamental del Distrito Cultural Saadiyat de Abu Dabi, ha abierto sus puertas al público el 3 de diciembre. El proyecto fue adjudicado a Foster + Partners tras un concurso de diseño en 2007, y la construcción comenzó al año siguiente. Su inauguración marca un momento significativo en el desarrollo cultural de los EAU, coincidiendo con la apertura de teamLab Phenomena Abu Dabi y del Museo de Historia Natural de Abu Dabi, así como la reapertura del Museo Al Ain, ampliando así el panorama institucional de la región.

Arquitectónicamente, el museo se define por cinco torres de acero inspiradas en las alas de un halcón, que funcionan como chimeneas térmicas que impulsan el aire fresco hacia el interior. Cada torre varía en altura y perfil, alcanzando hasta 123 metros, y está ubicada para minimizar las sombras, permitiendo al mismo tiempo la entrada de luz natural. Las torres forman una silueta distintiva en la isla de Saadiyat y buscan apoyar una estrategia ambiental pasiva adaptada al clima de la región.

El edificio en sí mismo es una expresión de sostenibilidad, con cinco alas aerodinámicas que forman parte integral del sistema ambiental, actuando como chimeneas térmicas y transportando aire fresco a través de los espacios públicos. También simbolizan la pasión del jeque Zayed por la cetrería, un deporte tradicional, y se han convertido en hitos en el horizonte de la ciudad. – Norman Foster, Fundador y Presidente Ejecutivo de Foster + Partners

Las seis galerías permanentes del museo incluyen cuatro volúmenes suspendidos en forma de cápsula sobre el atrio central. Cada uno proporciona condiciones controladas para objetos sensibles e iluminado mediante un acristalamiento triple laminado que modera la luz natural con una densa malla intercalada. Los tragaluces electrocrómicos ajustan aún más la transparencia en respuesta a los niveles de luz exterior. Cada módulo explora un tema distinto, conectado por espacios nodales que ofrecen una interpretación contextual, mientras que una escalera de caracol y ascensores facilitan la circulación. En la planta baja, galerías adicionales, un espacio para exposiciones temporales y comedores amplían el programa. En el exterior, el Jardín Al Masar conecta el museo con la costa, creando recorridos sombreados, espacios comunes y un mirador con vistas panorámicas de la isla de Saadiyat.

Para celebrar su inauguración, el museo activa sus espacios interiores y exteriores con un programa de un mes titulado «Raíces Profundas y Legado Eterno». Las instalaciones, talleres y visitas guiadas destacan cómo las galerías, patios y zonas ajardinadas del edificio están diseñados para albergar diversas actividades culturales y la participación del público. Estos eventos subrayan el papel del museo como espacio cívico dentro del Distrito Cultural de Saadiyat, reforzando su contribución arquitectónica a un creciente grupo de instituciones que incluye el Louvre Abu Dhabi y varios museos de próxima construcción.

Ficha

Arquitectos: Foster + Partners

Área: 88870 m²

Año: 2025

Fotografías: Nigel Young

Proveedores: Goppion

Descripción enviada por el equipo del proyecto.

Ubicado en el corazón del Distrito Cultural Saadiyat en Abu Dhabi, el nuevo museo nacional de los Emiratos Árabes Unidos (EAU) traza la historia de los Emiratos, desde las primeras evidencias de la ocupación humana hasta las civilizaciones que moldearon su cultura e identidad, arraigadas en los valores del Padre Fundador de los EAU, el difunto Jeque Zayed bin Sultan Al Nahyan. La forma del edificio aborda el reto de mantener la vida en un entorno desértico y las fuertes tradiciones culturales de los EAU.

Las cinco alas de acero ligero del museo forman parte del sistema de ventilación natural. Los respiraderos se abren en la parte superior de las torres, aprovechando la presión negativa en el lado de sotavento del perfil para extraer el aire caliente del atrio, gracias al efecto térmico de la acumulación de calor en las puntas de las alas. El aire, enfriado naturalmente a través de tuberías enterradas a gran profundidad bajo el suelo del desierto, fluye hacia el atrio a través de un sistema de ventilación de bajo nivel. Las alas están acristaladas para canalizar la luz natural hacia las galerías inferiores, y cada una se puede regular individualmente.

Los espacios del museo se ubican dentro de un montículo, con paneles texturizados y facetados que representan una abstracción de la topografía de los EAU. El montículo aísla los espacios interiores de la radiación solar, formando un escudo protector que impide la entrada de calor al edificio. Al entrar en el museo, los visitantes acceden al luminoso atrio, o Al Liwan, que sirve como espacio de encuentro y orientación, y alberga representaciones de danza tradicional y poesía.

De las seis galerías permanentes, cuatro galerías en forma de cápsula están suspendidas sobre Al Liwan y ofrecen entornos controlados para proteger los delicados objetos expuestos. El triple acristalamiento laminado de las torres modera la cantidad de luz natural que entra en el vestíbulo y las galerías. El acristalamiento incluye una densa malla intercalada, y cada cápsula cuenta con una claraboya de vidrio electrocrómico que cambia su transparencia en función de la luz exterior.

«El Museo Nacional Zayed narra la historia de la creación de los Emiratos por parte del jeque Zayed y las múltiples facetas de su legado, incluyendo su visión de reverdecer el desierto. El edificio en sí mismo es una expresión de sostenibilidad, con cinco alas aerodinámicas que forman parte integral del sistema ambiental, actuando como chimeneas térmicas y transportando aire fresco a través de los espacios públicos. También simbolizan la pasión del jeque Zayed por el deporte tradicional de la cetrería y se han convertido en hitos en el horizonte de la ciudad.»

Norman Foster, fundador y presidente ejecutivo de Foster + Partners

Cada una de las galerías en forma de cápsula está diseñada para reflejar un tema específico, mientras que los espacios nodales que las conectan proporcionan información contextual que las conecta. Los visitantes pueden elegir su propio recorrido por las diferentes galerías y acceder a la planta superior mediante una escultural escalera de caracol o ascensores. En la planta baja, también hay dos galerías permanentes más cerca de las entradas del museo, así como una sala de exposiciones temporales, un restaurante de alta cocina y una cafetería.

En el exterior del museo, el amor del jeque Zayed por la naturaleza se refleja en el Jardín Al Masar, que conecta el edificio con la costa. Integrando paisaje y patrimonio, el jardín se concibe como un nuevo activo comunitario, con espacios para socializar, jugar y reflexionar. Los visitantes también pueden recorrer un sendero sombreado desde la planta baja hasta un mirador en la cima del montículo, en la base de las torres de acero, que ofrece vistas panorámicas de los alrededores.

Los materiales se han seleccionado cuidadosamente para armonizar con el entorno local y reflejar los edificios históricos de los siete Emiratos, que reflejan el color cambiante de la arena en diferentes lugares. Siguiendo esta tradición, tanto el exterior como el interior del museo reflejan el distintivo tono blanco cálido de la arena de la isla Saadiyat. El proyecto se ha llevado a cabo en estrecha colaboración con el Departamento de Cultura y Turismo de Abu Dabi.

«El Museo Nacional Zayed ofrece un hogar permanente a la historia de nuestra nación. Nuestro museo nacional sirve para preservar y compartir nuestro pasado, conectando generaciones. Es donde nuestros hijos y nietos descubrirán los valores que forjaron este país: unidad, humildad, apertura y respeto por el patrimonio. Estos son principios que siguen guiándonos, y cuando visitantes de todo el mundo recorran estas galerías, comprenderán mejor los Emiratos Árabes Unidos: pasado, presente y futuro.»

Su Excelencia Mohamed Khalifa Al Mubarak | Presidente del Departamento de Cultura y Turismo de Abu Dabi

«Este proyecto nos ha permitido materializar, a gran escala, muchos de los temas relacionados con la arquitectura y el diseño sostenible que han sido fundamentales para el trabajo del estudio durante décadas. Ha sido un placer colaborar con actores tan visionarios, cuyo amplio conocimiento de la región ha sido la base de nuestro trabajo.»

Gerard Evenden | Director del Estudio, Foster + Partners

ACA

ALGO MÁS SOBRE LA POSTAL Nº 426

El Museo de Arte Contemporáneo Jesús Soto, ubicado en la avenida Germania, Ciudad Bolívar, estado Bolívar, fue inaugurado por el presidente de la República, doctor Rafael Caldera, el 27 de agosto de 1973. Es la última obra realizada por Carlos Raúl Villanueva (nacido en 1900 y fallecido en 1975) como homenaje a su entrañable amigo Jesús Rafael Soto (1923-2005).

1. Inauguración del Museo de Arte Contemporáneo Jesús Soto por parte del presidente Rafael Caldera, Jesús Soto y el gobernador del estado Bolívar, Manuel Garrido Mendoza.

También sirvió para albergar la excelente colección particular de piezas reunidas por el artista guayanés en los años 1950 y 1960 durante su estadía en Europa, algunas de ellas de creadores de renombre mundial, con quienes trabajó y compartió en el transcurso de su larga vida artística, a las que se sumó una importante selección de obras suyas representativas de toda su trayectoria. Dentro de lo coleccionado por Soto se encontraban realizaciones representativas del arte abstracto, cinético, geométrico, óptico y contemporáneo en general de autores tan importantes como: Víctor Vasarely, Kasimir Malevich, Robert Jacobsen, Alberto Magbelli, Kenneth Snelson, Jean Arp, Carlo Battaglia, Gianni Colombo, Sonia Delaunay, Jean Dewasne, Amadeo Gabino, Francois Morellet, Jean Kubicek, Julio Le Parc, Paternostro, Paolo Patelli, Eusebio Semper, Francisco Sobrino y Gunter Uecker, entre otros.

2. Carlos Raúl Villanueva junto a Jesús Soto, Caracas, Venezuela, (c.1973). Foto de Paolo Gasparini.

La idea de proyectar una sede, nace a partir de la creación de la Fundación Museo de Arte Moderno Jesús Soto el 27 de octubre de 1969 presidida por Jesús Soto e integrada por Miguel Arroyo, Alfredo Boulton, Hans Neumann, Guillermo Meneses, Miguel Otero Silva y Simón Alberto Consalvi, quienes nombraron como su primer director a Armando Gil Linares. Villanueva llevó adelante el diseño de la edificación entre 1970 y 1972 construyéndose en dos etapas, de las cuales sólo la primera (compuesta por seis edificios y terminada en 1973), sería dirigida y supervisada plenamente por su autor, quedando las instrucciones formuladas para una segunda fase que entre 1978 y 1987 se ejecutaría bajo la responsabilidad de los arquitectos José Carlos Villanueva y Edgar Parra y se inauguraría el 22 de noviembre de aquel año 87.

3. Museo de Arte Contemporáneo Jesús Soto. Primera etapa. Planta baja del conjunto (izquierda). Perspectiva aérea del conjunto (derecha).
4. Museo de Arte Contemporáneo Jesús Soto. Primera etapa. Sección transversal a través de las salas de exposición, fachada principal en proyección.

Por lo general es a la primera etapa a la que se han dedicado las más importantes reseñas arquitectónicas publicadas sobre el Museo. En ellas se resalta su parquedad, su austeridad y su condición de contrapunto y contenedor neutro adecuado a la variada colección que debía alojar. Para resumir la más esencial aspiración de Villanueva con respecto al edificio viene como anillo al dedo la siguiente cita de su propia cosecha: “Construir sin necesidad de utilizar materiales sería lo ideal. El edificio tiene importancia sólo por el contenido viviente que abriga. Uno quisiera construir una forma ideal, sin nada de inútil, tan lógica y tan pura que ya existiera apreciable diferencia entre cubiertas, muros y espacios naturales”.

5. Museo de Arte Contemporáneo Jesús Soto. Primera etapa. Dos vistas del patio central. Fotografías de Paolo Gasparini que formaron parte de la muestra “Villanueva y el Museo Soto” (1993).
6. Museo de Arte Contemporáneo Jesús Soto. Primera etapa. Detalle del cubo central desde el patio. Fotografía de Paolo Gasparini que formó parte de la muestra “Villanueva y el Museo Soto” (1993).
7. Museo de Arte Contemporáneo Jesús Soto. Primera etapa. Vista nocturna del conjunto. Fotografía de Paolo Gasparini que formó parte de la muestra “Villanueva y el Museo Soto” (1993).

El conjunto inicial, de 5.600 m2 de construcción y 11.400 de áreas verdes y estacionamiento, está formado por 6 edificios: “el del acceso, dirección y administración, de dos plantas, el cubo de hormigón para albergar la obra de Soto, y cuatro salas de exhibición, una de ellas más importante con dos plantas y las otras tres más pequeñas y de una planta, con loggias exteriores en uno de sus extremos y algunos planos tratados con celosías verticales movibles, concebidas como auténticas cajas vacías y cerradas, están sólo cortadas por una larga línea de luz cenital entre las paredes y las cubiertas”, señalarán, Paulina Villanueva y Maciá Pinto en Carlos Raúl Villanueva (Alfadil Ediciones, 2000).

8. Algunos de los croquis elaborados por Villanueva de las primeras ideas para el Museo Jesús Soto correspondientes al año 1970, que formaron parte de la muestra “Villanueva y el Museo Soto” (1993).
9. Algunos de los croquis elaborados por Villanueva de las primeras ideas para el Museo Jesús Soto correspondientes al año 1971, que formaron parte de la muestra “Villanueva y el Museo Soto” (1993).

El proceso de diseño seguido por Villanueva para esta ocasión fue registrado a través de numerosos croquis que denotan la evolución alcanzada desde la idea inicial hasta la propuesta final. En ellos se percibe desde un principio la voluntad de componer un conjunto de “varios edificios, con los bloques de las salas inicialmente sumados en un cuerpo compacto y un volumen cilíndrico para la cafetería, que luego desaparece. Al final, las salas terminan por desplegarse de manera relativamente aleatoria, circunscribiendo un patio de forma irregular, al conectarse y comunicarse entre sí por medio de galerías bajas en las que se alternan los bloques calados de concreto y las aberturas que dan paso al recinto interior”, apuntarán Paulina Villanueva y Maciá Pinto.

10. Museo de Arte Contemporáneo Jesús Soto. Primera etapa. Vista interior de uno de los pasillos de conexión entre salas (izquierda) y vista de una de las salas de exposiciones (derecha). Fotografías de Paolo Gasparini que formaron parte de la muestra “Villanueva y el Museo Soto” (1993).

Otro dato de importancia lo ofrece la integración en la obra de la experiencia constructiva de la prefabricación, lo cual remite a la segunda ampliación del Nuevo Museo de Bellas Artes (1966-1976). Ello se evidencia en las losas de entrepiso, en las cubiertas de las salas y particularmente en el cubo que funge de elemento jerárquicamente más importante del conjunto. En este último, “las vigas prefabricadas de hormigón son utilizadas en posición vertical, con los nervios al exterior, lo que junto con las sombras acusadas, repite el tema de las líneas paralelas contra las que se recortan las figuras de las obras cinéticas de Soto”.

11. Localización del Museo Soto en Ciudad Bolívar y vista aérea actual donde pueden apreciarse las dos etapas que lo conforman.

La ampliación o segunda etapa, de 7.000 m2, se levantaría sobre un terreno adquirido por la Gobernación del Estado Bolívar concedido en préstamo gratuito por noventa y nueve años a la Fundación, para lo cual se firmó el comodato correspondiente el 5 de mayo de 1977. La Corporación Venezolana de Guayana asumió su ejecución, y la obra se concluyó en 1987 incluyendo las siguientes áreas:  vestíbulo, biblioteca, sala de usos múltiples, oficinas, depósitos, taller de restauración, cafetín, estacionamiento y áreas verdes.

12. Visita del Maestro Carlos Raúl Villanueva al museo en fechas cercanas a su inauguración. Fotografías de Paolo Gasparini.
13. Museo de Arte Contemporáneo Jesús Soto. Primera etapa. Vista interior de una de las salas de exposición. Fotografía de Paolo Gasparini que formó parte de la muestra “Villanueva y el Museo Soto” (1993).

Pasados veinte años desde la inauguración del museo, como parte de las celebraciones de ese aniversario caracterizado por una amplia programación, el día 26 de agosto de 1993 se inauguró en el espacio correspondiente a la Sala Múltiple la muestra “Villanueva y el Museo Soto”, con curaduría y montaje de Ana María Marín, William Niño Araque y José Luis Sánchez. La exposición que estaría abierta hasta el 31 de octubre, estuvo compuesta de bocetos originales del Maestro Villanueva, fotografías de Paolo Gasparini y modelos tridimensionales. Fue posible gracias a los auspicios de la Galería de Arte Nacional, la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la UCV, la Fundación Museo de Arquitectura y la Familia Villanueva. La portada del catálogo preparado para la exposición, cuya imagen ilustra nuestra postal del día de hoy, ya anuncia parte de lo que allí se mostró.

Aquel mismo año también sería publicado por la Fundación Museo de Arte Moderno Jesús Soto el libro La construcción de la mirada. XX años del Museo de Arte Moderno Jesús Soto (Monte Ávila Editores).

De esta última publicación hemos extraído la siguiente cita del texto “Arquitectura: Oportunidad y Desafío” escrito por William Níño Araque relacionada con la obra que hoy nos ha ocupado: “Desde la escena internacional, y fundamentalmente en su esencia, el Museo Jesús Soto pertenece a esa generación de instituciones museísticas concebidas durante los años setenta: la complejidad del programa espacial y funcional; la superación de la idea del espacio flexible por la idea tradicional de recintos fraccionados en galerías; la evolución de las condiciones para la conservación, exposición e iluminación de los objetos y sobre todo el papel urbano representado como un ‘monumento ‘ y como ‘contenedor’ de arte, representan algunos de los rasgos iniciales que hacen del Museo una empresa constante, inacabada y en plena evolución”.

14. Fotos recientes del interior del museo.

Aquella institución que hace más de 30 años representaba para Niño Araque “…una insólita aventura continental. Una odisea capaz de promover en el tiempo un Centro de Investigación sobre el arte estructural, geométrico y cinético. Una experiencia única en el mundo debido a que su concepción (esencialmente consagrada a la poética del constructivismo)” se presentaba “como un desafío al futuro: estableciendo los temas por estudiar y promover para una mejor comprensión y desarrollo de las artes”, fue intervenida el año 2011 por la gobernación del estado Bolívar argumentando una “revisión integral” administrativa y de funcionamiento, así como de su inventario físico, documental y valoración de obras.

15. Acceso actual al museo.

Como era de esperarse, ello derivó en un proceso creciente de deterioro de los edificios, de espacios museísticos y de muchas de sus obras a lo cual se suma la incertidumbre con respecto a la suerte que podría correr la valiosa colección que posee, de lo cual no ha podido recuperarse hasta el día de hoy.

ACA

Procedencia de las imágenes

Postal. Colección Crono Arquitectura Venezuela.

1. Museo de Arte Moderno Jesús Soto. Wikipedia (https://es.wikipedia.org/wiki/Museo_de_Arte_Moderno_Jes%C3%BAs_Soto)

2. Museo Soto (https://jesus-soto.com/es/museo-soto/)

3. Paulina Villanueva y Maciá Pinto. Carlos Raúl Villanueva (Alfadil Ediciones, 2000); y Catálogo de arquitectura (https://catalogosdearquitectura.wordpress.com/2018/03/12/villanueva-carlos-raul-1971-museo-de-arte-moderno-jesus-soto/)

4, 5 y 13. Paulina Villanueva y Maciá Pinto. Carlos Raúl Villanueva (Alfadil Ediciones, 2000)

6 y 7. Fundación Galería de Arte Nacional. Carlos Raúl Villanueva. Un moderno en Sudamérica. 1999.

8 y 9. Colección Espacio y Forma, nº 16, 1972.

10. Paulina Villanueva y Maciá Pinto. Carlos Raúl Villanueva (Alfadil Ediciones, 2000); y Fundación Galería de Arte Nacional. Carlos Raúl Villanueva. Un moderno en Sudamérica. 1999.

11. Capturas de Google Earth.

12. Colección Crono Arquitectura Venezuela; y Fundación Galería de Arte Nacional. Carlos Raúl Villanueva. Un moderno en Sudamérica. 1999.

13, 14 y 15. IAM Venezuela. Museo de Arte Moderno Jesús Soto (https://iamvenezuela.com/2017/10/museo-de-arte-moderno-jesus-soto/)

NOVEDADES EDITORIALES DE AQUÍ Y DE ALLÁ

A Way of Life

Notes on Ballenberg

Rolf Fehlbaum (ed.)

Lars Müller Publishers

2023

Idioma: inglés

Nota de los editores

Fundado en 1978, Ballenberg es un legendario museo de arquitectura al aire libre suizo que reúne a más de 100 edificios residenciales y agrícolas del siglo XIV al XIX, desde casi todos los cantones de Suiza, que han sido transportados al museo desde su sitio original. Juntos, estos edificios muestran cómo la arquitectura, el mobiliario y las herramientas expresaron las necesidades de la vida cotidiana en su diseño y ejecución. Las artesanías tradicionales, como el tejido de canasta, la forja, el trenzado, el giro, el tejido y la talla, también se mantienen vivas en los talleres in situ de Ballenberg.

Editado por Rolf Fehlbaum, empresario y fuerza impulsora desde hace mucho tiempo detrás de Vitra, esta hermosa publicación es una invitación para descubrir y explorar el mundo de las cosas con nuevos ojos. Una forma de vida compila fotografías, observaciones y descubrimientos hechos en Ballenberg por los aclamados diseñadores Jasper Morrison y David Saik y el arquitecto Tsuyoshi Tane, quienes comparten una fascinación con lo simple, lo práctico y lo funcionalmente hermoso. En escritura concisa, elegante, Morrison, Saik y Tane comentan los ingenios de diseño en varias características de los edificios. La excelente fotografía del libro celebra los rastros de desgaste en los tiradores de las puertas, bancos, columnas, pisos de azulejos y otros detalles arquitectónicos que dan testimonio de un espíritu pasado de utilidad duradera y sentido común económico. Una forma de vida sirve como un estímulo tanto para los diseñadores como para los consumidores para resistir las tendencias y las modas, y para evaluar críticamente los objetos del uso diario en términos de utilidad y estética.

ACA

ALGO MÁS SOBRE LA POSTAL Nº 389

Cuando se empiece a organizar una cronología de lo que han sido los concursos de arquitectura en Venezuela, primer paso de una tarea pendiente además de necesaria conducente a la elaboración de una rigurosa historia sobre el tema, la figura de Alejandro Chataing (1873-1928) emergerá, sin duda, como referencial en lo atinente a las primeras contiendas que se llevaron a cabo a finales del siglo XIX y comienzos del XX. También, corresponderá ahondar en las características y condiciones en las que se realizaron aquellos llamados dada la limitada cantidad de profesionales que se encontraban en ejercicio y al influyente peso que desde el poder, muy probablemente, fue ejercido en decisiones que giraban alrededor de los certámenes por los dos dictadores de turno: Cipriano Castro (1901-1908) y Juan Vicente Gómez (1908-1935).

1. Fotografía tomada en el patio de la Academia Militar de La Planicie durante su construcción. Alejandro Chataing aparece sentado (segundo a la izquierda) junto al Ministro de Obras Públicas R. Castillo Chapellín (sentado en el centro), otros ingenieros y maestros de obras.

El hecho es que, de acuerdo a las escuetas y muy limitadas crónicas de la época, se sabe hasta ahora que, dentro de su prolífica carrera, fueron proyectos de Chataing los declarados ganadores por la vía del concurso para el diseño de: las fachadas del Mercado Principal de San Jacinto, Caracas (1894) en colaboración con Juan Hurtado Manrique; la sede de la Academia Militar en La Planicie, Caracas (1906) en colaboración con Jesús María Rosales; la remodelación integral del Panteón Nacional, Caracas (1910); y el hotel Miramar en Macuto (1928). Todos, además, tuvieron el excepcional privilegio de haber sido construidos, siendo al segundo de ellos, cuya fotografía tomada poco después de su inauguración engalana nuestra postal del día de hoy, al que dedicaremos a continuación la nota complementaria correspondiente.

2. Dibujo de la fachada este del proyecto de Chataing y Rosales para la Academia Militar publicado en El Cojo Ilustrado del 15 de enero de 1904.

La convocatoria al concurso para el edificio que nos ocupa fue hecha el 4 de julio de 1903 (un día antes del decreto de creación de la Escuela Militar de Venezuela), su construcción concluye el 4 de abril de 1906 y se inaugura el 23 de mayo de 1908, poniéndose en marcha su funcionamiento al abrirse el primer curso de formación el 5 de julio de 1910. Concebido, por tanto, para un uso que por primera vez tenía presencia firme en el país, la programación arquitectónica es el resultado del impulso dado a la profesionalización de la milicia nacional por Cipriano Castro y Juan Vicente Gómez, requisito esencial que buscaba garantizar la permanencia en el poder y la eliminación del caudillismo. La obra se inicia y finaliza durante el mandato del primero y la pone en funcionamiento el segundo egresando las primeras promociones a partir de 1911.

Cabe recordar que la Academia Militar de Venezuela se funda el 3 de septiembre de 1810 sufriendo a lo largo de todo el siglo XIX los avatares de la guerra de independencia primero y de la federal después, así como diversas adscripciones y numerosos sobresaltos que impidieron su continuidad y asentamiento hasta que Castro crea, como ya dijimos, la Escuela Militar de Venezuela en 1903. Para conocer la accidentada historia de esta institución vale la pena consultar la reseña del 3 de septiembre de 2020 aparecida en http://www.cavim.com.ve.

3. Dibujo de la planta del proyecto de Chataing y Rosales para la Academia Militar publicado en El Cojo Ilustrado del 15 de enero de 1904 .

Por otra parte, El Cojo Ilustrado publicó el 15 de enero de 1904 el proyecto elaborado por Chataing y Rosales, luego de ser declarados ganadores del concurso, con el que se daría inicio a su construcción, documento que permite apreciar en detalle la magnitud de la obra. Con las limitaciones del caso, dada la naturaleza militar del edificio, las reproducciones aparecidas en la revista junto a la descripción pormenorizada de cómo programa y proyecto se conjugan, permiten apreciar a cabalidad el funcionamiento de la academia dentro del contenedor para ella concebido. También en la publicación se da cuenta del reglamento que regirá a la institución a partir del 19 de abril de 1904 cuyo objeto era “la formación de Oficiales para infantería, artillería, caballería, ingenieros y Estado Mayor del Ejército”. Además, se enumeran todas las asignaturas que serán dictadas y deben ser aprobadas por quienes aspiran a obtener los diferentes grados.

4. Izquierda: La Academia Militar en plena construcción (c. 1905). Derecha: Dos vistas lejanas del edificio en fechas próximas a su terminación.

La edificación, como ya adelantamos, fue levantada sobre la meseta de La Planicie cercana al barrio de Montepiedad (dentro de la actual parroquia 23 de enero), lugar de carácter estratégico, con vista sobre el sector suroeste de la ciudad a 981,28 metros sobre el nivel del mar y en su momento llegó a ser considerada como el centro de formación militar más grande de Latinoamérica.

Como parte de un grupo de edificios en los que según Juan Pedro Posani (Caracas a través de su arquitectura, 1969) se halla “el mejor retrato de la época”, donde “todas las modalidades del eclecticismo o del historicismo del fin de siglo se encuentran reflejadas”, la Academia Militar fue realizada en “estilo militar florentino” siguiendo la pauta de dotar a cada obra arquitectónica del estilo más apropiado de acuerdo a su uso y a la tipología a la que responde. A título complementario Iván González Viso en Caracas del valle al mar. Guía de arquitectura y paisaje (2015) señalará: “…su imagen es expresión ecléctica de diversos estilos arquitectónicos… y su forma, resultado de una serie de volúmenes adosados entre sí, está concebida según las categorías estéticas de la proporción, el orden y la simetría. Su planta rectangular con un gran patio central para desfiles y formaciones es característica de las edificaciones amuralladas de defensa militar”.

5. Izquierda y derecha arriba: vistas próximas de la fachada del edificio. Derecha abajo: planta

Resumidamente se puede decir que la propuesta de organización espacial parte de un doble patio alrededor del que se ubican las áreas para las actividades de instrucción militar y el cuartel propiamente dicho; mientras que las fachadas fueron resueltas siguiendo las pautas académicas para este tipo de edificación: paredes con friso almohadillado y el pórtico con cargada ornamentación inspirada en la simbología militar, remarcado por torres laterales.

Posani añadirá con relación al edificio y su arquitecto: “…en la Academia Militar de La Planicie (…), ciertos episodios internos (el patio de honor particularmente) así como la integridad de forma de las fachadas, demuestran que Alejandro Chataing (salvando todas las diferencias de situaciones) no estaba muy apartado del camino que otros arquitectos, en el mismo momento, recorrían en América Latina. En todo caso, hay que apreciar en su justo valor el esfuerzo material, intelectual y organizativo que significó el proceso de adecuación a los modelos internacionales a que fue sometida la construcción criolla, por iniciativa de Chataing”.

6. Variadas imágenes tomadas entre 1911 y 1928 del patio de la Academia Militar funcionando para diversas actividades relacionadas a su uso.

El blog Caracas en retrospectiva de María F. Sigilo en “Notas del Museo Histórico Militar” nos aporta que el “primer jefe del Cuerpo de Cadetes (de la academia) fue el coronel Samuel Mc Gill … el capitán Isaías Medina Angarita, fue comandante de este cuerpo. Había sido tradición en Caracas durante muchos años esperar las salvas del cañón que desde La Planicie anunciaba la llegada del nuevo año, así como la apertura y clausura de las sesiones del Congreso Nacional (hoy Asamblea Nacional) y conmemoración de fechas magnas de la historia patria”. Valga agregar que Mc Hill (chileno de nacimiento) quien había llegado a Venezuela en 1904, en 1910 es nombrado por Gómez instructor general del Ejército y posteriormente, jefe del Gran Estado Mayor y ese mismo año “participa en la elaboración del plan de estudios de la Escuela Militar y su reglamento interno, organiza y dirige el cuerpo de caballería denominado Escuadrón de Húsares del Centenario”, de acuerdo a la nota biográfica preparada por Marina Miliani de Mazzei publicada en el Diccionario de Historia de Venezuela (DHV) de Empresas Polar.

Pese al esfuerzo realizado y la inversión hecha el 19 de abril de 1928, el ministro de Guerra y Marina, Carlos Jiménez Rebolledo, por disposición del general Juan Vicente Gómez y en atención a la situación política del país, clausura la Escuela Militar. A partir de ese momento se registran, de nuevo, diversos cambios de sede y de denominación hasta que en 1945 el centro de formación regresó a La Planicie Cajigal en Caracas donde funcionó hasta 1949, cuando pasó a ocupar su actual sede en el Fuerte Tiuna.

7. El edificio como sede del Museo Histórico Militar.

El edificio desde el 26 de marzo de 1950 hasta el 15 de mayo de 1981, fue la sede del Ministerio de la Defensa y en 1981 se transformó en Museo Histórico Militar albergando objetos, armas, uniformes y artículos militares de los siglos XIX y XX.

Desde allí, Hugo Chávez dirigió la fallida intentona golpista del 4 de febrero de 1992. Este hecho propició que a partir de 1999, con la llegada de Chávez al poder, empezase a ser denominado el edificio como “el cuartel de la montaña” cobrando connotaciones simbólicas para el movimiento político que desde entonces gobierna el país. Definitivamente, en 2002 la antigua sede de la Academia Militar es bautizada como “Cuartel 4 de Febrero” y convertido en el Museo de la Revolución Bolivariana. Dada su excelente ubicación se trata de un inmejorable mirador desde donde se pueden observar: el parque El Calvario, el Arco de la Federación, el Palacio de Miraflores, las Torres del Silencio, el 23 de Enero, y el Observatorio Cajigal así como todo el casco central y a la distancia el desarrollo de la ciudad hacia el este.

8. «La Flor de los Cuatro Elementos»

Desde el 15 de marzo de 2013, en un improvisado escenario diseñado en el patio menor por Fruto Vivas, denominado “La Flor de los Cuatro Elementos”, se ubicó el sarcófago donde se presume se encuentran los restos de Hugo Chávez.

9. El edificio y su entorno en la actualidad.

El edificio fue declarado Monumento Histórico Nacional por la Junta Nacional Protectora y Conservadora del Patrimonio Histórico y Artístico de la Nación, en Gaceta Oficial nº 31.641, del 26 de diciembre de 1978.

Actualmente, además, ha sido convertido en la Comandancia General de la Reserva Nacional. Se encuentra en el área conformada por el Núcleo de Desarrollo Endógeno Eje Turístico El Calvario, zona declarada Sitio de Patrimonio Histórico Cultural, según Gaceta Oficial nº 38.383 del 20 de febrero de 2006.

ACA

Procedencia de las imágenes

Postal. Colección Crono Arquitectura Venezuela

1, 2 y 3. Gasparini G. y Posani J.P. Caracas a través de su arquitectura. Fundación Fina Gómez, 1969.

4. Gasparini G. y Posani J.P. Caracas a través de su arquitectura. Fundación Fina Gómez, 1969; y Venezuela Inmortal (https://www.facebook.com/lavenezuelainmortal/photos/a.192793934152881/493161280782810/?type=3)

5 y 7. ARQUITECTURARCHITECTURE. Arquitectura venezolana (http://arquitecturarchitecture.blogspot.com/2015/05/museo-historico-militar-cuartel-de-la.html); y González Viso I., Peña M.I. y Vegas F. Caracas del valle al mar. Guía de arquitectura y paisaje, 2015 (https://guiaccs.com/obras/museo-historico-militar/)

6. Colección Fundación Arquitectura y Ciudad; y González Viso I., Peña M.I. y Vegas F. Caracas del valle al mar. Guía de arquitectura y paisaje, 2015 (https://guiaccs.com/obras/museo-historico-militar/)

8. ARQUITECTURARCHITECTURE. Arquitectura venezolana (http://arquitecturarchitecture.blogspot.com/2015/05/museo-historico-militar-cuartel-de-la.html)

9. Captura de Google Earth; González Viso I., Peña M.I. y Vegas F. Caracas del valle al mar. Guía de arquitectura y paisaje, 2015 (https://guiaccs.com/obras/museo-historico-militar/); y Colección Fundación Arquitectura y Ciudad.