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NOVEDADES ARQUITECTÓNICAS DE AQUÍ Y DE ALLÁ

1. Modulus Matrix: 85 viviendas sociales en Cornellà. Peris+Toral Arquitectes, 2021. Fachada.

Modulus Matrix: 85 viviendas sociales en Cornellà

Barcelona

Peris+Toral Arquitectes

2021

La publicación el pasado 26 de noviembre de la notica del otorgamiento, por unanimidad, del Premio Internacional del RIBA (Royal Institute of British Architects) 2024 al edificio de viviendas sociales Modulus Matrix, ubicado en Cornellà, provincia de Barcelona, España, e inaugurado en 2021, ofrece una excelente excusa para comentar una obra altamente publicitada en su momento y premiada en numerosas ocasiones, cuya propuesta radical y calidad constructiva ameritan volver a repasarla ahora que, tras cuatro años de funcionamiento, el jurado de uno de los más prestigiosos premios mundiales en arquitectura le dio su reconocimiento.

2. Ubicación del edificio en Cornellà del Llobregat.

El inicio de esta nota, que hemos elaborado con material proveniente de diversos medios que le han dado cobertura tanto a la edificación cuando fue terminada como cuando le fue conferido el premio, lo fijaremos en 2017 cuando el Área Metropolitana de Barcelona a través de la entidad pública IMPSOL (Instituto Metropolitano de Promoción de Suelo y Gestión Patrimonial) dependiente de ella, licitó un concurso para desarrollar 85 viviendas sociales sobre el lote de 10.000 m2 que anteriormente ocupaba el antiguo Cine Pisa, en Cornellà, el municipio más poblado del Bajo Llobregat, provincia de Barcelona.

3. Modulus Matrix: 85 viviendas sociales en Cornellà. Peris+Toral Arquitectes, 2021. Vista aérea.

La capital catalana, que tiene una larga tradición en los concursos de arquitectura para desarrollar vivienda pública, muestra irregulares resultados y un porcentaje mínimo en la construcción de lo que se llama “vivienda de protección oficial” (VPO) comparativamente a la vivienda de libre mercado, pese a que desde diferentes ámbitos de la administración se ha intentado revertir este hecho. Ello le ha impedido a la vivienda protegida mostrar una capacidad transformadora importante al verse afectada, además, por restrictivas normativas que no le han permitido apostar por nuevas tipologías. Si a ello añadimos la resistencia que ofrece una mentalidad conservadora frente a los cambios presente en el modelo tradicional de familia y unos presupuestos de construcción bajísimos, se puede entender que la asunción de riesgos constructivos o propuestas innovadoras en el uso de materiales poco convencionales no ha sido para nada la constante.

4. Modulus Matrix: 85 viviendas sociales en Cornellà. Peris+Toral Arquitectes, 2021. Planta subsuelo (izquierda) y planta baja (derecha).
5. Modulus Matrix: 85 viviendas sociales en Cornellà. Peris+Toral Arquitectes, 2021. Planta tipo (izquierda) y planta 5º piso (derecha).

De allí que la selección como ganadora de la propuesta presentada a concurso por el estudio Peris+Toral Arquitectes, dadas sus características, se convirtió de inmediato en una demostración de que todos los antecedentes y prejuicios contra los que ha luchado la VPO podían empezar a revertirse permitiéndole a la entidad municipal enviar una señal que apuntaba a un claro cambio de paradigma.

6. Peris+Toral Arquitectes. Izquierda: 36 viviendas para jóvenes, Can Caralleu (2005-2008). Derecha: 33 viviendas sociales, Melilla (2010-2015).
7. Peris+Toral Arquitectes. Izquierda: 105 viviendas para gente mayor, Glòries (2008-2017). Derecha: 54 viviendas protegidas, Bon Pastor (2015-2021).
8. Peris+Toral Arquitectes. Izquierda: 55 viviendas protegidas, Borrassà (2010-2021). Derecha: 43 viviendas protegidas, Ibiza (2018-2022).

Peris+Toral Arquitectes, oficina fundada en 2005 por Marta Peris y José Manuel Toral, que combina su actividad profesional con la académica en la ETSAB (ella como profesora lectora y él como profesor asociado en el Departamento de Proyectos Arquitectónicos, especializándose en el estudio de espacio público y proyectos urbanos), enfocada desde su creación a la investigación de nuevas formas de habitar asociadas con nuevas maneras de construir a través de viviendas que a su vez brindan nuevas formas de vida, presentó para Cornellà un modelo que continuaba las preocupaciones mostradas a través de anteriores trabajos, de los cuales hasta nueve ya habían sido reconocidos entre 2005 y 2017 como ganadores de diferentes concursos convocados para el desarrollo de viviendas de protección oficial fundamentalmente en Cataluña. Como una derivación de los estudios doctorales realizados por Marta Peris (plasmados en la Tesis: La casa japonesa a través del cine de Yasujiro Ozu presentada en 2016 y publicada en 2019 bajo el nombre La casa de Ozu), la oficina se ha inspirado libremente dentro de su trabajo en su aproximación a las películas del director japonés, quien exploraba la vida familiar cotidiana.

9. Modulus Matrix: 85 viviendas sociales en Cornellà. Peris+Toral Arquitectes, 2021. Corte.
10. Modulus Matrix: 85 viviendas sociales en Cornellà. Peris+Toral Arquitectes, 2021. Axonometría.
11. Modulus Matrix: 85 viviendas sociales en Cornellà. Peris+Toral Arquitectes, 2021. Izquierda: Detalle de viviendas en esquina. Derecha: Vivienda tipo.

Entendido, pues, como otra vuelta de tuerca dentro de una tipología que Peris+Toral Arquitectes ha ido perfeccionando con gran solvencia, Modulus Matrix se trata de un volumen abstracto de 51×41 metros alrededor de un gran vacío de 15×25 metros que articula una estructura de madera de cinco niveles (seis plantas) la cual a su vez contiene 85 viviendas, sustentados sobre una planta baja de hormigón con equipamiento público y locales comerciales. Parte de dos estrategias: por un lado, el diseño de una matriz de espacios que prescinde de pasillos, tanto comunes como privados, y propone habitáculos comunicantes para aprovechar el máximo espacio en planta; y por el otro, el empleo de madera como principal material constructivo.

12. El edificio en plena construcción.

La descripción ofrecida por los autores, utilizada comúnmente por los medios de comunicación que han divulgado el proyecto, señala: “El diseño de una matriz de habitaciones comunicantes, que elimina pasillos para garantizar el máximo aprovechamiento en planta, y el uso de la madera en favor de las posibilidades de industrialización del edificio, la mejora de la calidad de la construcción y la notable reducción de los plazos de ejecución y las emisiones de C02, son los ejes de este nuevo edificio de viviendas”. En sus 12.815,55 m2 de superficie edificada se han utilizado un total de 8.300 metros cúbicos de madera KM0 procedente del País Vasco lo cual lo convierte en el mayor edificio residencial de madera realizado en España.

13. Vista del patio y detalle de los cerramientos. La obra cuenta con un revestimiento parcial de 1.600 m² de una malla para fachada textil que permite mantener la visión hacia el exterior, mejora el bienestar de sus ocupantes y permite reducir el calor en el interior del edificio.
14. Vistas desde el interior de la vivienda.

Con mayor precisión, Peris+Toral Arquitectes apuntan: “La edificación se organiza alrededor de un patio que articula una secuencia de espacios intermedios. En planta baja, un pórtico abierto a la ciudad anticipa la puerta del edificio y filtra la relación entre el espacio público y el patio comunitario que actúa como una pequeña plaza para la comunidad. En lugar de entrar directa e independientemente desde la fachada exterior a cada vestíbulo del edificio, los cuatro núcleos de comunicación vertical se sitúan en las cuatro esquinas del patio, de manera que todos los vecinos confluyen y se encuentran en el patio-plaza. En planta tipo, se accede a las viviendas a través de las terrazas privadas que conforman la corona de espacios exteriores que dan al patio. La planta general del edificio se organiza en una matriz de habitaciones comunicantes. Se trata de 114 espacios por planta, y 543 en el edificio, de dimensiones semejantes, que eliminan pasillos tanto privados como comunitarios para obtener el máximo aprovechamiento de la planta. Los espacios servidores se disponen en el anillo central mientras el resto de habitaciones de uso y tamaño indiferenciado, de unos 13 m2, discurren en fachada ofreciendo distintos modos de habitar. Otra terraza en la corona exterior completa la secuencia espacial, el enfilade de espacios interconectados por grandes aberturas, permeables al aire, la mirada y el paso.

15. Detalle de la fachada y vista del patio.
16. Las escaleras de madera maciza están situadas en las cuatro esquinas de la plaza central y conducen a los rellanos de cada nivel.

Las 85 viviendas se distribuyen en cuatro agrupaciones y un total de 18 viviendas por planta. Alrededor del núcleo se articulan cuatro o cinco viviendas, de manera que todas las tipologías tienen ventilación cruzada y doble orientación.

Las viviendas constan de cinco o seis módulos, según sean de dos o tres habitaciones. La cocina abierta e inclusiva se sitúa en la habitación central, actuando como pieza distribuidora que sustituye a los pasillos, a la vez que permite visibilizar el trabajo doméstico y evitar roles de género.

17. Los pisos se distribuyen en habitaciones iguales a partir de una cocina-comedor central.

La dimensión de las habitaciones, además de ofrecer una flexibilidad basada en la ambigüedad de uso y en la indeterminación funcional, permite una crujía estructural óptima para la estructura de madera. Al tratarse de vivienda social, para lograr la viabilidad económica se ha optimizado el volumen de madera necesario por m2 de construcción hasta llegar a 0,24 m3 por m2 de superficie construida”.

18. Una terraza interior a través de la cual se accede a la vivienda.

Teniendo como fechas claves mayo de 2017, cuando se le otorgó el Primer Premio del Concurso; julio de 2018, cuando se concluye la fase de proyecto; diciembre de 2018, momento en que se inician las obras; y diciembre de 2020 cuando se finalizan, desde su puesta en servicio en 2021 hasta el día de hoy Modulus Matrix ha obtenido un total de 28 reconocimientos nacionales e internacionales entre los que destacan el Premio Europeo di Architettura Matilda Baffa Ugo Rivolta (2021), el Premio de Arquitectura Española del Consejo Superior de los Colegios de Arquitectos de España (CSCAE) (2022), Finalista Premio Mies van der Rohe Award (2022), el Premio Fassa Bartolo Prize Sustainable Architecture (2023) y el recién adjudicado RIBA International Prize (2024).

19. Los dos finalistas del RIBA International Prize 2024. Izquierda: Transformación de un antiguo monasterio y hospital en sede de la compañía Jacoby Studios, Paderborn (Alemania). David Chipperfield. Derecha: Museo de Fotografía en Lianzhou (China). O-office.

Para obtener el RIBA International Prize Modulus Matrix se impuso a dos finalistas: David Chipperfield, que ha transformado un antiguo monasterio y hospital en sede de la compañía Jacoby Studios, en la ciudad medieval de Paderborn (Alemania), y el estudio chino O-office, que ha levantado un moderno Museo de Fotografía en Lianzhou.

20. Modulus Matrix. Corte-perspectiva por unidad.

Sin embargo, es el veredicto emitido por el jurado presidido por Lu Wenyu el que mejor resume la verdadera trascendencia de la obra: “Con un enfoque innovador de la vivienda social, Peris + Toral arquitectes ha respondido a las demandas cambiantes de los grupos sociales, elaborando un proyecto de vivienda adaptable, integrador y sostenible. Al no estar definida por estereotipos de lo que constituye una ‘familia’, la organización inteligente del espacio fomenta la interacción y la conexión dentro de la comunidad, garantizando que la arquitectura funcione a diferentes escalas, desde la vivienda particular hasta el espacio colectivo. Este edificio ha sentado un precedente para futuros desarrollos en Barcelona y más allá. Es un digno ganador del Premio Internacional del RIBA 2024”.

21. Grafton Architects. Edificio universitario UTEC (Universidad de Ingeniería y Tecnología) en Lima, Perú. Primera obra ganadora del RIBA International Prize en 2016.

Vale la pena recordar que, creado en 2015 y otorgado por primera vez en 2016 a Grafton Architects por su edificio universitario UTEC (Universidad de Ingeniería y Tecnología) en Lima, Perú, el RIBA Internacional, cuya periodicidad es bianual, el Premio Internacional del RIBA se otorga al «proyecto considerado más significativo e inspirador a nivel mundial», a «edificios que cambian el mundo».

22. Kashef Chowdhury-URBANA. Hospital Satkhira Friendship (Shyamnagar, Bangladesh), obra ganadora del RIBA International Prize en 2021.

El premio se fundó para premiar una estructura que demuestre «pensamiento visionario, originalidad, excelencia en la ejecución y que aporte una contribución distintiva a sus usuarios, el entorno y las comunidades». La anterior versión (2021) fue ganada por el Hospital Satkhira Friendship (Shyamnagar, Bangladesh) de Kashef Chowdhury-URBANA.

23. Marta Peris y José Manuel Toral fotografiados en una de las escaleras de Modulus Matrix en 2024.

Tras su nuevo logro Marta Peris y José Toral, grandes protagonistas en la dignificación de la vivienda social en España, afirmaron: «Ganar el Premio Internacional RIBA reconoce muchos años dedicados a la vivienda que ofrece nuevas formas de vida. Estamos muy orgullosos de la respuesta positiva de los residentes de Modulus Matrix. Algunos tenían dudas sobre características como la entrada a través de una terraza, la cocina abierta en el centro de la vivienda y las habitaciones de igual tamaño sin pasillos, pero sus perspectivas cambiaron tras vivir en el espacio. Ahora sienten que esta forma de vida se adapta mejor a sus necesidades. Sus experiencias de primera mano ofrecen valiosas perspectivas sobre cómo puede evolucionar la vivienda en todo el mundo».

Sea como sea, será el inexorable paso del tiempo el que dirá la última palabra con respecto a las expectativas planteadas por los arquitectos en cuanto a la flexibilidad y adaptabilidad de los espacios así como en cuanto al envejecimiento del edificio.

Ficha

Modulus Matrix

Vivienda social.

Arquitecto: Peris+Toral Arquitectes (Marta Peris y José Manuel Toral)

Equipo: Guillem Pascual, Ana Espinosa, Maria Megias, Izaskun González, Miguel Bernat, Cristina Porta

Promotor: IMPSOL (lnstituto Metropolitano de Promoción de Suelo)

Años: 2017 – 2021

Superficie: 12.815,55 m2 (construida)

Ubicación: Cornellá de Llobregat, Barcelona, España

Asesores: Bernúz Fernández (estructuras), L3J Técnics Associats (instalaciones), Joan March I Raurell (dirección de obra), Societat Orgànica (ambiente), Aurea Acústica (acústica), AB Pasatgistes (paisajismo)

Proveedores: Lamp Lighting, Tarkett, Bianchini Maccaferri Group, Bodelec, Durmi, ESCOFET, Egoin, Europerfil, Mobiliari Font Room, Orona Pecres, Performance Lighting, Persiana Barcelona, Serge Ferrari

Fotografía: José Hevia

ACA

Procedencia de las imágenes

1, 2, 4, 5, 9, 10 y 18. ArchDaily (https://www.archdaily.cl/cl/976931/85-viviendas-sociales-en-cornella-peris-plus-torarquitectes/620c053c0af305384df32fbf-85-viviendas-sociales-en-cornella-peris-plus-torarquitectes-foto?next_project=no)

3. Capturas de Google Earth.

6. DIVISARE (https://divisare.com/projects/193415-peris-toral-arquitectes-adria-goula-gabriel-lerma-jose-hevia-viviendas-sociales-para-jovenes-en-can-caralleu); y HIC (https://hicarquitectura.com/2017/01/peris-toral-33-viviendas-en-melilla/)

7. Ayuntamiento de Barcelona (https://ajuntament.barcelona.cat/glories/es/nous-habitatges-per-a-la-gent-gran-a-glories/); y METALOCUS (https://www.metalocus.es/es/noticias/dotando-de-nueva-identidad-al-barrio-54-viviendas-sociales-en-bon-pastor-por-peris-toral-arquitectes)

8. METALOCUS (https://www.metalocus.es/es/noticias/sontenibilidad-pasiva-e-inteligente-54-viviendas-sociales-en-borrassa-por-peris-toral); y METALOCUS (https://www.metalocus.es/es/noticias/todo-es-casa-raw-rooms-casas-de-tierra-43-viviendas-sociales-por-peristoral-arquitectes)

11. METALOCUS (https://www.metalocus.es/es/noticias/repensar-la-sostenibilidad-85-viviendas-sociales-por-peristoral-arquitectes)

12, 13, 14, 15, 16 y 17. arquitecturayempresa (https://arquitecturayempresa.es/noticia/el-mayor-edificio-residencial-de-madera-de-espana)

19. Wallpaper (https://www.wallpaper.com/architecture/riba-international-prize-2024-winner?utm_source=Selligent&utm_medium=email&utm_campaign=20241127_XWP-X_NWL_EO_DAILY_DIGEST&utm_content=20241127_XWP-X_NWL_EO_DAILY_DIGEST&utm_term=20231900&m_i=04q0AUQfzkD9YRVvB3HLKig2L_UYRgoS7Md_CTc_wrq0xt_vbZrh3ifl084_ebjc1y7yP9B40xXdm1xzoG3lRLg6f2WuO2000o&lrh=956d279c1df78402b126289f6a29f9dad88aecc52158d5abeed6c30dbdc6669c&M_BT=204668014645746)

20. PLOT (https://revistaplot.com/85-viviendas-sociales-en-cornella/)

21. UTEC (https://www1.utec.edu.pe/campus-y-laboratorios)

22. ArchDaily (https://www.archdaily.com/926305/friendship-hospital-satkhira-kashef-chowdhury-urbana)

23. El País (https://elpais.com/cultura/2024-12-14/madera-sostenibilidad-y-un-patio-para-la-vida-vecinal-asi-son-las-viviendas-sociales-de-cornella-que-ganan-premios-de-arquitectura.html)

EL TEMA DE LOS BALCONES

El balcón y su reivindicación como espacio en tiempos de cuarentena sigue sirviéndonos de vínculo con quienes leen lo que semanalmente publicamos. En este caso ha sido el arquitecto Lesmes Castañeda quien nos ha enviado otra nota que sigue la cadena empezada en el Contacto FAC nº 174 (10/05/2020) y continuada en los números 177 (31/05/2020) y 179 (14/06/2020). Al igual que el texto que nos hiciera llegar Víctor Artís el 14 de mayo, hemos decidido transcribir hoy el que Castañeda nos enviara con fecha 25 de junio bajo el título que lleva el encabezado.

ACA

José Miguel Galia. Residencias Isla de Margarita, 1965. Planta tipo

La necesidad de los balcones ahora y siempre no vendría solamente de la situación sanitaria que en estos momentos de pandemia se hace evidente. El propósito central de los mismos es crear en el hábitat un espacio de transición entre el ámbito techado interior de un apartamento y el ámbito del cielo abierto del exterior del mismo y a la vez  ser un espacio de permanencia donde se desarrollen actividades de expansión propias de una vivienda. Con los balcones en los apartamentos  se busca en cierta medida sustituir las condiciones ambientales  que en las casas es más fácil satisfacer, con los patios centrales traseros o delanteros, con la ventaja sobre estas de lograr con la altura mayores posibilidades visuales sobre el ámbito exterior.

Existen básicamente dos tipos de balcones en los apartamentos: el que forma parte del volumen general del edificio y por lo tanto no sobresale del mismo y el que origina un volumen adicional al volumen general antes referido y por lo tanto sobresale volumétricamente.

Ambos tipos tienen sus ventajas y desventajas. En el primero se evita los registros visuales directos entre los balcones restringiendo las visuales a las frontales y en ellos la ventilación también es solo frontal, mientras que en el segundo permite las visuales francas hasta 180ª con registros visuales entre los balcones vecinos pero la ventilación es cruzada. 

Con estos pros y contras, el arquitecto José Miguel Galia resolvió el conflicto en un apartamento de Cumbres de Curumo que tuve el privilegio de habitar; dejó la mitad de la profundidad del balcón perteneciente al volumen del edificio y la otra sobresaliente del mismo. Así al sentarse uno hacia la primera parte del balcón mantiene la privacidad necesaria, lográndose al mismo  una ventilación cruzada y solo se producen registros visuales entre vecinos cuando se está incorporado en los bordes del sector sobresalido.

Ahora bien el usuario común considera que el balcón es innecesario o prescindible ante las restricciones dimensionales de espacio que casi siempre tienen los apartamentos, sobre todo los construidos para los  sectores de medianos y bajos ingresos y terminan cerrándose con cristalería anulando el propósito de estos espacios.

La ordenanza de zonificación caraqueña referida por el comentario en Contacto Fac 177, por una parte favoreció la construcción de los balcones al no imputarse su superficie al área de construcción permitida, pero al restringir el área no imputable, determinó que la mayoría de los constructores limitaran estrictamente el tamaño de los mismos a esa área y el usuario considerara que por su pequeño tamaño no valdría la pena mantener la integridad de esos espacios.

En fin, vale la pena reivindicar la vigencia de los balcones y mantener su integridad, sobre todo en nuestro benigno clima, que nos permiten relacionarnos francamente  con el exterior  no solo visualmente sino disfrutando a la sombra de las virtudes del aire libre.

Arq. Lesmes Castañeda

25/06/20

LA IMPORTANCIA DEL BALCÓN (y 2)

1. Reurbanización de El Silencio. Carlos Raúl Villanueva (1945)

Desde la primera nota que publicáramos en estas páginas el pasado 10 de mayo en el Contacto FAC nº 174 resaltando su importancia, el balcón, ese elemento que se constituye en un espacio intermedio entre el exterior y el interior, a veces techado y otras no, de dimensiones si se quiere reducidas que lo diferencian de la terraza, ha seguido siendo objeto de elogio y reivindicación en tiempos de cuarentena en la medida que ha asumido el rol de desahogo, contacto con el aire libre y lugar de comunicación aunque sea distante con personas que a veces ni siquiera reparábamos que eran nuestros vecinos.

También se ha convertido en tema para el análisis desde diferentes frentes que van desde el histórico al ambiental, del urbano al arquitectónico, del antropológico al sociológico, o del económico al normativo, lo cual ha conducido a indagar el por qué de su paulatina desaparición para llegar a la conclusión de su necesaria recuperación como espacio de relevancia para el habitar.

Justamente, ahondando en ello, Víctor Artís nos ha hecho ver en la comunicación que nos enviara y publicáramos el 31 de mayo (Contacto FAC nº 177) el papel que como funcionario le tocó desempeñar desde 1958, cuando fue promulgada la primera ordenanza de zonificación caraqueña “redactada por Luis Lander y Antonio Cruz Fernández” (siendo el joven Artís quien editó el plano), hasta la aprobación en 1962 de la que, a proposición suya, abrió la posibilidad de contar con el balcón como un área que no sólo pasó a descontarse del porcentaje de construcción como parte de las “medidas de estímulo”, sino que le aportó además de respiro, diversidad al tratamiento de las fachadas de la vivienda multifamiliar caraqueña.

2. Izquierda: Edificio Progreso, Avenida Victoria. José Miguel Galia (1963). Derecha: Residencias Dálmata, Los Palos Grandes. Federico Beckhoff (1962)

Sumadas a la anterior promulgación en 1958 de la Ley de Propiedad Horizontal, los efectos que aquellas “medidas” produjeron tal vez están aún por estudiarse a fondo pero, sin duda, dieron pie a la generación de toda una serie de respuestas de parte de arquitectos y constructores buscando la mejor manera de aprovecharse de ellas que bien podrían dar pie a análisis de orden tipológico. Allí están para corroborarlo los cerca de setenta edificios realizados por José Miguel Galia, con pericia interpretativa y apego a las ordenanzas, desde 1960 hasta 1976 prestos a ser abordados en cuanto al manejo dado a los 6 m2 del balcón como parte de un diseño que adecuándose a las exigencias del mercado sumaba confort espacial y climático. O la más de una decena que, diseñados por Federico Beckhoff, los aprovecharon para pasar del balcón a la terraza como elemento distintivo de su arquitectura que dirigía su mirada hacia un segmento socio-económico muy distinto a la clase media a la que Galia ofrecía sus racionales y a veces sutiles variaciones.

3. Izquierda: Un tramo de la Avenida Victoria (años 1945-1955). Derecha: Hotel Residencias Montserrat, Altamira Sur. Guinand, Benacerraf y Vestuti (1951)
4. Izquierda: Residencias Capri, Los Palos Grandes. H. Ferrato (1957). Derecha: Edificio Élite, Los Palos Grandes. Athos Albertoni (1958)

Sin embargo, el balcón no aparece en los edificios multifamiliares caraqueños sólo a partir de 1962. Ya mucho antes, cuando esa tipología se destinaba en su gran mayoría como vivienda de alquiler, sectores como Bello Monte, Las Acacias, Los Chaguaramos, Los Rosales, El Bosque, La Carlota, Bello Campo o Chacao se poblaron de edificaciones que por lo general no excedían los cuatro pisos, no necesariamente diseñadas por arquitectos, que fueron ofreciendo, quizás a modo de reminiscencia nostálgica del lugar de procedencia de sus constructores, una vasta diversidad de balcones que llaman a buscar antecedentes particularmente mediterráneos. Lo interesante, también, sería corroborar dentro de avenidas como la Victoria, la principal de La Carlota o la Miguel Ángel de Colinas de Bello Monte qué ocurrió cuando primero se pasa al régimen de propiedad horizontal y posteriormente entran el vigencia las “medidas de estímulo a la construcción” en el 62. Para un trabajo de este tipo, sin duda, no incursionar en Los Palos Grandes, Chuao, el bulevar de El Cafetal o en los alrededores de la Plaza Altamira sería imperdonable, así como el pasar de la apología del asomarse que se da en los bloques de El Silencio a la manera como es tratado el asunto en los conjuntos carentes de balcones diseñados por el TABO.

5. Izquierda: Edificio Amazonas, Chuao. Fruto Vivas (1962). Derecha: Edificio Venezia, Chacao. Antonio Montini (1956)

Dicho todo lo anterior, quizás valga la pena detenerse como verdadera pieza excepcional, proyectada en el límite temporal que establecía la diferencia entre la nueva ordenanza y la anterior, en un edificio como el Amazonas proyectado por Fruto Vivas, realizado en Chuao, que sin duda apuntaba a mostrar otro tipo intereses alejados de la escrupulosidad por cumplir la norma y más próximos a la riqueza espacial y la experimentación estructural. También el Amazonas abre la oportunidad de acercarse a otro asunto que bien podríamos calificar como “el irrespeto por el balcón” que se ha producido bien sea por su incorporación al interior al cerrarse con todo tipo de dispositivos y su correspondiente desnaturalización como elemento de transición, uno de los reclamos más importantes que en tiempos de cuarentena se han podido recoger en medio de las elogiosas voces que claman por su recuperación. Mirar a Caracas a través de la manera cómo se presentan los balcones en toda su amplísima variedad pero a la vez con el lente de quien quiere averiguar si ha sido usado como originalmente se previó o, por el contrario, para develar las maneras como ha sido cerrado o maltratado convirtiéndolo en depósito sería, por obvio, digno del mayor interés.

Para concluir, sin aventurarnos a decir categóricamente que el balcón haya sido en Caracas el espacio más elegido durante la cuarentena o la válvula de escape para sobrevivir al confinamiento, la verdad es que su consideración ha abierto la puerta a toda la serie de asuntos que someramente hemos repasado dignos algunos de profundización. Los 6 m2 de “regalía” que establece la ordenanza con relación a este espacio mucho tendrían que ver en la corroboración de lo anterior bajo la premisa de que es muy distinto contar con uno de 6 mts. x 1 mt. que con otro de 3 x 2 o de 2.45 x 2.45. También por detrás se encuentra el hecho de cuán fácil o difícil se lo hemos puesto los arquitectos a los usuarios para preservarlos en su condición original.

6. Un libro y dos películas de referencia. Mario Vargas Llosa El loco de los balcones (1993). El hombre de al lado (2009), dirigida por Mariano Cohn y Gastón Duprat y Otra recomendación sería ver la película argentina El hombre de al lado (2009), dirigida por Mariano Cohn y Gastón Duprat y La ventana indiscreta (1954) de Alfred Hitchcock,

Así como cerramos el anterior artículo con una recomendación a revisar dos trabajos académicos, invitaríamos ahora a disfrutar en primer término la obra teatral de Mario Vargas Llosa El loco de los balcones (1993), cuyo quijotesco protagonista, un profesor italiano de historia del arte italiano (viudo por demás), va recogiendo junto a su hija todos los balcones coloniales de las casas viejas que serán demolidas en Lima, y los va depositando en su modesta vivienda, lo que hace de ello una empresa insostenible y condenada al fracaso, como demostración, a través del tratamiento tragicómico del tema que nos ocupa y su asunción como punto de honor, de la pugna entre materialismo e idealismo; arte y utilitarismo; pasado y presente; antiguo y moderno; arte y tecnología; y derrota y éxito.

Otra recomendación sería ver la película argentina El hombre de al lado (2009), dirigida por Mariano Cohn y Gastón Duprat, cuyo drama y tensión entre dos mundos totalmente opuestos empieza al momento de tratar de integrar interior y exterior en una vivienda carente de ventanas de parte de alguien que, sin reparar en consecuencias, termina haciéndolo hacia el patio interior de la casa Curutchet proyectada por Le Corbusier en La Plata, capital de la provincia de Buenos Aires. Y, finalmente, sería interesante ver con ojos de cuarentena, un clásico del suspenso, La ventana indiscreta (1954), de Alfred Hitchcock, que se desarrolla en el patio interior de un pequeño edificio de grandes ventanas y suficiente amplitud de balcones donde prácticamente todos pueden verse unos a otros si lo desean.

ACA

Procedencia de las imágenes

1, 2, 3 y 5 izquierda. Colección Crono Arquitectura Venezuela

4 y 5 derecha. https://www.picuki.com/tag/italianosenchacao

LA IMPORTANCIA DEL BALCÓN

1. Fachada continua típica del centro de cualquier ciudad italiana
2. Calle del centro de Barcelona durante los primeros días de la pandemia

En estos días de cuarentena hay dos espacios que han mostrado una contrafaz bastante alejada del interés que tradicionalmente ha suscitado para arquitectos y urbanistas: la calle y el balcón. La primera, al verse desprovista de todo aquello que la anima ha lucido desolada, carente de vida, alejada de su rol integrador, del protagonismo que suele asumir como lugar de encuentro. El segundo ha sufrido una suerte de reivindicación potenciada por los medios de comunicación, convirtiéndose en lugar privilegiado para recuperar el contacto perdido con el exterior y con el resto de los que nos rodean. Los videos que revelan tomas de personas que se asoman para conversar con el vecino, para aplaudir a una hora determinada a los trabajadores de la salud, para compartir su música o sus dotes como artistas, o que los aprovechan para tomar el sol, leer o hacer ejercicio, han permitido redescubrir recintos que han demostrado su condición liberadora a modo de válvula de escape, su versatilidad, su importancia como vínculos entre el interior y el exterior, entre lo privado y lo público, y también su degradación asociada a su falta de cuidado y sus precarias dimensiones cuando no su desaparición paulatina del paisaje de las ciudades. Se podría decir que el balcón, al menos en Europa y en medio de esta pandemia, ha dejado aparcado momentáneamente su condición de lugar lleno de tiestos, trastos, bicicletas o donde salir a fumar un cigarrillo para convertirse en nave salvadora, en lugar para socializar, y para, mediante la comunicación, no cortar de tajo la convivencia urbana.

3. Detalle de la fachada del centro de una ciudad europea los primeros días de la pandemia

Balcón, del italiano balcone, es definido por el Diccionario de la Real Academia Española, como “ventana abierta hasta el suelo de la habitación, generalmente con prolongación voladiza, con barandilla”. Dejando de lado que para nosotros el término también está asociado al segundo piso de un teatro o cine, su enunciado lo ubica con toda claridad en un rango que lo aleja de la ventana (aunque podamos decir que se trata de una ventana sin paredes o como señala Lluís Clotet “una puerta abierta al exterior, con una barandilla para no caerse”), y lo aproxima a otro espacio con el cual presenta similitudes y con el que a veces se le confunde: la terraza, “sitio abierto de una casa desde el cual se puede explayar la vista”. En todo caso se trata el balcón, en principio, de una superficie destechada (o no) pensada para asomarse y tener contacto con el aire libre. Esa condición de ser espacio de desahogo pensado para contemplar el entorno, para mirar al otro y ser visto, también permite discurrir acerca de si está entre sus condiciones esenciales la de permanecer o su uso apunta más bien a lo efímero ya que por lo general, a diferencia de la terraza, no alberga actividades. Salir, romper con la condición que impone el vivir entre cuatro paredes, estar en la calle pero a distancia, sentirse afuera pero a la vez adentro, disponer de la oportunidad de flotar en el aire y ampliar el horizonte visual a ciento ochenta grados, son condiciones intrínsecas de todo buen balcón.

Santiago De Molina en “El balcón saturado”, texto de 2018 publicado en https://www.santiagodemolina.com/2018/05/el-balcon-saturado.html permite complementar algunas de las ideas que hemos expresado cuando nos revela: “En teoría los balcones, o son extensiones de las habitaciones o prolongación de las ventanas, (a veces de la calle misma). Pero está claro que son espacios incompletos, porque no se sabe si crecen de dentro a fuera, o al revés, y necesitan entenderse como prolongación de algo. A veces son como hernias que les salen a las casas y otras como escenarios donde la calle se mete por ellos. (…) El balcón es el lugar del pregón, de la recogida de los trofeos deportivos y del lucimiento de banderas en los edificios públicos, pero los de las casas son tan distintos que puede decirse que no pertenecen a la misma categoría de objetos. Porque los balcones en las casas no son símbolos de casi nada.”

4. Izquierda: Detalle Balcón, Edificio 1501, avenida Baralt, Caracas. Derecha: Interpretaciones del balcón. Villa Stein, Le Cobusier, 1927

Considerada la fachada como esa delgada piel que separa el interior del exterior, ventanas y balcones tradicionalmente han sido sus principales protagonistas siendo estos últimos relegados a un segundo plano cuando las paredes de carga dejaron de ser las que garantizaban el sostén de la edificación. El balcón, entendido como apertura puntual en el plano vertical, asociado a la arquitectura que ocupó durante siglos el centro de las ciudades, fue el principal perjudicado tras la irrupción del Movimiento Moderno y sus propuestas de liberar la fachada de responsabilidad estructural y así abrirle paso a su pariente rica: la terraza que, dotada de una condición lineal, se asienta más bien en el plano horizontal acentuando dicha propiedad. También el balcón ha sufrido el acoso de las normativas urbanas que los han dejado fuera de sus prebendas, el cuestionamiento proveniente de su utilidad ante los rigores del clima o su insignificante tamaño y su fragilidad frente la hostilidad creciente en todo entorno urbano, a lo que se suma su condición de foco captador de polución e insalubridad por el estrecho contacto que establece con un medio contaminado, lo cual conlleva en la mayoría de los casos a su cierre con rejas u otro tipo de dispositivo buscando convertirlo en ocasiones en otro espacio interior.

En un reciente artículo titulado “El día en que Barcelona renegó de los balcones”, firmado por Clara Blanchar, aparecido en El País el pasado 3 de mayo en el marco de la crisis del coronavirus, se hace un repaso de las diversas circunstancias que han llevado a los arquitectos a ir eliminando este importante espacio intermedio preguntándose “¿por qué hay edificios de Barcelona que tienen balcones (o terrazas) y otros no?”.

5. El Edificio Meridiana o Casa Meridiana (Barcelona), edificio de viviendas de la década de los 60 obra de Oriol Bohigas
6. Portada del libro Balcons de Barcelona. Un espai privat obert al públic de
Anton M. Espadaler (Texto), Ramon Manent (Fotografía), 2008

Consultados diversos profesionales, se apunta a una serie de razones: “Es más barato construir sin balcones. Para algunos es una cuestión estética. En la ciudad moderna, con los vecinos todo el día fuera de casa y un espacio público cada día más hostil, perdieron valor. Muchas familias los convirtieron en trasteros y los taparon. Y perdieron valor comercial: los promotores dejaron de hacerlos, los arquitectos quizás no supieron hacerlos valer, ni los clientes los exigieron”. Blanchar cita el libro Balcons de Barcelona (2007) como referencia sobre el tema, donde se hace un repaso de la proliferación de balcones “a caballo de los siglos XVI y XVII cuando ‘las casas más distinguidas’ comenzaron a ampliar ventanales góticos. Recuerda cómo Joan Amades relató la polémica por el intento de los consejeros de la ciudad de implantar un ‘tributo al sol’; explica que en el Eixample se buscó un tono regular y armónico; subraya el despliegue ornamental del Modernismo… y cita la desaparición de los balcones durante el racionalismo”.

Por otra parte, al interrogar a la decana del COAC, Assumpció Puig, ésta apunta “que ‘la presencia 24 horas en nuestros hogares’ durante el confinamiento ‘ha revelado carencias de algunas viviendas, como la falta de sol, una salida como un balcón, ventilación cruzada o azoteas accesibles’. Pero también mira al pasado y apunta que ‘al ser las viviendas un activo económico y no de bienestar, el máximo de espacio se dio a la vivienda interior, de manera que balcones y terrazas perdieron valor’ ”.

Cierra el artículo de Blanchar con la apreciación de Lluís Clotet para quien entre los culpables de la pérdida de protagonismo de los balcones y las terrazas en Barcelona se encuentra “la aparición del aire acondicionado” en las casas. “Ha hecho perder, por inútil, la capacidad de saber ver el levante, el poniente, las corrientes de aires… para saber abrir y cerrar ventanas, balcones, persianas, contraventanas, cortinas, para saber entender la vivienda como un velero que es preciso conocer para convertir la travesía en lo más agradable posible (…) Seguramente [el aire acondicionado] también ha hecho perder las ganas de disfrutar de una buena cena al fresco, aunque llegará un día que tanta energía no la podremos pagar”.

El hecho es que para la gente confinada y aburrida por la emergencia tener un balcón se ha convertido en una gran ventaja. Con sus bondades y sus miserias los balcones, tal y como comenta el urbanista Thierry Paquot en un reciente artículo aparecido en Le Figaro, a raíz de su renacimiento durante la cuarentena actual, “son un brazo extendido hacia los demás sin peligro ni riesgo; permiten salir del aislamiento y el enclaustramiento; son manifestación de una comunión física y un respaldo moral, un medio de pertenecer a una cadena colectiva: podemos oírnos y vernos, hay participación directa, se piensa en los demás…”.

7. Fachada continua típica del centro de Madrid. Foto tomada en los primeros días de confinamiento por motivo de la pandemia
8. Izquierda: Detalle de un balcón del edificio de la Compañia Guipozcoana en La Guaira. Derecha: Balcones de un edificio de propiedad horizontal en Caracas

No sabemos si al salir de este confinamiento obligado la reivindicación de que ha sido objeto el balcón hará que autoridades y arquitectos europeos y de todo el mundo recapaciten en torno a su importancia y valor como dispositivo de control ambiental y calidad espacial. Tampoco sabemos si comparativamente con la terraza sus ventajas se equipararán entre sí y los balcones dejen de ser “… un lugar convertido mayoritariamente en un armario sin trasera, y en un desecho hacia la calle”, como afirma Santiago De Molina, para, por el contrario, dar cabida a lo que afirma Ángel Pérez Mora en “Elogio del balcón”, quien el 29 de enero en https://www.diariosur.es/opinion/elogio-balcon-20200129002022-ntvo.html expresaba: “Sólo el que ha sido obligado habitante de un interior sabe lo extraordinario que puede llegar a ser ese mínimo espacio. Esa repisa en la fachada es un máximo que permite salir fuera un instante al que se siente enjaulado en un piso. Veo desde una serie de televisión, como en el centro de París, un balcón significa oro para el fumador. Solo por esos momentos de ensoñación o complicidad merece la pena que se construyan balcones en los nuevos edificios. (…) Mientras nuevas fachadas rompen su monotonía de ventanas con terrazas que, al poco de abrirse, serán cerradas, yo vuelvo la mirada con gusto a los balcones que resisten su cierre. En ellos está más cerca el cielo de sus habitantes. Desde ellos han entrado en diálogo moradores y paseantes y se han contado historias solo con la mirada. Construyen parte de ese lugar que nos permite sobrevivir en medio del mundo de todos, como una cápsula en el cosmos de la polis, como espacio frontera que hace único al ser urbano, por un instante”.

9. Carlos Raúl Villanueva. Elementos plásticos utilizados en defensa contra los elementos (sol y lluvia)
10. Calle Bolívar de Puerto Cabello, estado Carabobo
11. Detalle de balcones de un edificio de propiedad horizontal en Caracas en tiempos de pandemia

Venezuela en general y Caracas en particular, cuyas condiciones climáticas permiten el disfrute del balcón como espacio de desahogo, perfectamente podría convertirse en objeto de estudio del destino que con el tiempo han sufrido dentro de sus edificaciones residenciales. De hacerlo, seguramente encontraremos buena parte de las razones que han hecho perder sentido a los balcones barceloneses. Para ello quizás el Trabajo de Grado entregado en septiembre de 2012 con el cual la profesora María Elena Hernández obtuvo el Magister Scientiarum en Diseño Arquitectónico, titulado “La ventana en la arquitectura residencial caraqueña: Aproximación a la comprensión de la relación interior exterior en edificaciones residenciales multifamiliares” podría, desde el punto de vista metodológico, ser de gran ayuda. Y como complemento, no estaría de más consultar otro trabajo entregado dentro del mismo curso de postgrado en 2014 por Marjorie Suárez, titulado “Los espacios intermedios como tema y estrategia de proyecto en la arquitectura moderna”.

ACA

Procedencia de las imágenes

  1. https://www.latercera.com/mundo/noticia/gobierno-italiano-descarta-nuevo-confinamiento-por-el-covid-19-mientras-el-pais-registra-mas-de-mil-nuevos-contagios/L2Q52V5DZBFKJM676OWLOJTAPQ/

2, 3, 8, 10 y 11. Colección Fundación Arquitectura y Ciudad

4. Izquierda: https://www.pinterest.es/pin/701013498220348698/. Derecha: https://www.pinterest.cl/pin/379357968591992559/

5. https://elpais.com/espana/catalunya/2020-05-03/el-dia-en-que-barcelona-renego-de-los-balcones.html

6. https://ajuntament.barcelona.cat/barcelonallibres/es/publicacions/balcons-de-barcelona

7. http://ideaspanal.org/el-fenomeno-de-los-balcones/

9. Carlos Raúl Villanueva, Caracas en tres tiempos, 1966