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¿SABÍA USTED…

…que en 1956 es cuando se le da el nombre a la avenida José Antonio Páez de El Paraíso?

1. La avenida Páez de El Paraíso en los años 50 del siglo XX.

Lo que hoy conocemos como la avenida José Antonio Páez, principal arteria vial de la parroquia El Paraíso, Caracas, que se despliega entre el sector Los Flores de Puente Hierro y la redoma de La India (cruce con la avenida O’Higgins), es un excelente ejemplo de ruta urbana que se fue conformando en la medida que el desarrollo de la zona por la que transcurre se fue dando.

El origen del primer tramo que se conoció como “Avenida del Paraíso” está estrechamente relacionado, por un lado, con la inauguración en 1875 por parte de Antonio Guzmán Blanco del “Puente de Hierro” (construido por Luciano Urdaneta) y, por el otro, con la decisión de comenzar a urbanizar las tierras que conformaban la antigua hacienda El Paraíso en 1891 (lo que se conoció como “Ciudad Nueva”), por parte de la empresa Tranvía de Caracas (en manos de Félix Rivas), para lo cual fue clave la construcción aquel año de otro puente (“El Paraíso”) que permitió cruzar de nuevo el Guaire para conectar la avenida principal de la que fuera la primera expansión residencial de Caracas hacia el sur del valle, con el casco central a través de la prolongación de la avenida Sur 12 de la parroquia San Juan.

2. Detalles de los Planos de Caracas de Ricardo Razetti de 1897 (izquierda) y 1906 (derecha) en los que se puede observar el nacimiento del primer tramo de lo que será la avenida José Antonio Páez.
3. Puente de Hierro (izquierda) y Puente El Paraíso (derecha) a comienzos del siglo XX.
4. Edificio para la Exposición Industrial y Agrícola de Venezuela (Juan Hurtado Manrique, 1895), entregado en 1902 a las Hermanas de San José de Tarbes.

Así, la “Avenida del Paraíso” permitía inicialmente el tránsito de carruajes tirados por caballos desde Puente Hierro hasta el sector sur del trazado inicial de la “Ciudad Nueva”, donde se ubicó un espacio urbano (bautizado en 1905 como Plaza República hoy Plaza Páez) y poco más allá en 1895 la edificación que albergaría la Exposición Industrial y Agrícola de Venezuela construida según proyecto de Juan Hurtado Manrique, obra ecléctica de corte neoclásico, entregada en 1902 a las Hermanas de San José de Tarbes.

Con la decisión tomada por Cipriano Castro de trasladarse en 1903 a Villa Zoila (construida a finales del año 1900 por el doctor Julio Torres Cárdenas), la “Avenida del Paraíso” pasaría a denominarse “Avenida Castro” pudiéndose acceder desde ella a la casa presidencial y a ella desde el centro (avenida Sur) por el Puente Restaurador, inaugurado el 11 de junio de 1905. De esta primera etapa de la avenida se tiene claro registro a través de los Planos de Caracas de Ricardo Razetti de 1897 y 1906.

5. Izquierda: detalle del Plano de Caracas de Ricardo Razetti de 1929. Derecha: detalle del Plano de Caracas y sus alrededores de Eduardo Rohl de 1934. En ambos aparece la huella del Hipódromo y se nota el crecimiento de la avenida hasta llegar a cruzarse con la avenida La Paz.
6. 1911. Monumento a la Batalla de Carabobo -La India de El Paraíso- (izquierda); y 1921. Estatua de George Washington (derecha) ubicadas ambas en el mismo emplazamiento: cruce de la avenida de La Vega y 19 de diciembre.
7. Plaza de la República (hoy Plaza Páez).

La inauguración en 1908 del Hipódromo de El Paraíso permitirá prolongar el trazado de la arteria que hoy nos ocupa desde la Plaza de la República hasta sus puertas. Luego, con motivo de la celebración en 1911 de los 90 años de la Batalla de Carabobo y 100 de la Independencia, se erigirá sobre el eje vial que se daba en llamar “Avenida de La Vega” (sector El Pinar), en el cruce con la 19 de diciembre (abierta en 1910, luego 9 de diciembre y hoy en día Washington) proveniente de la Carretera Occidental que conducía a Antímano (luego Av. San Martín), sector El Empedrado, el correspondiente monumento conmemorativo conocido como La India de El Paraíso, obra del escultor venezolano Eloy Palacios, develada el 21 de agosto.

Será diez años más tarde, al cumplirse el centenario de la batalla que selló la independencia venezolana, cuando La India será trasladada, también sobre la vía, a un costado del Hipódromo presidiendo un espacio conformado por dos plazas gemelas. Es en ese momento (1921) que nos encontramos con que el trecho que va desde el monumento a la Plaza de la República se denominará como “Avenida Carabobo” y, además, con que el espacio dejado por la escultura de Palacios sería ocupado el 19 de abril por la de George Washington, proveniente de su primer emplazamiento desde 1883 en el centro de Caracas entre la Basílica de Santa Teresa y el Teatro Nacional.

Lo acontecido en 1921 permitió extender hasta el pueblo de La Vega la incipiente vía que ya así se denominaba, intersecándose en 1933 con la recientemente abierta avenida La Paz (hoy O’Higgins), que empalmaba gracias al Puente Bolívar (o de Los Leones) con la Carretera Occidental (hoy prolongación de la avenida San Martín), lo cual marcaría un nodo importante donde iría a parar en 1966 La India en su segundo traslado dentro de la zona.

8. Sociedad Venezolana de Ciencias Naturales (izquierda) y Liceo Caracas (derecha).
9. Quintas Aéreas vistas desde la avenida Páez.

Con frente hacia la vía la vía o muy próximos a ella se construirán paulatinamente: el Club Paraíso (1924, Ricardo Razetti), la Sociedad Venezolana de Ciencias Naturales (1931), el Estadio Nacional (1936), el Liceo Caracas (1937, Cipriano Domínguez, sede del Instituto Pedagógico Nacional desde 1938), el Zoológico El Pinar (1945), el Colegio de Abogados (1945, Camilo Arcaya) o las Quintas Aéreas (1958, Natalio Yunis).

10. Plano Shell de San Martín-El Paraíso (1954).
11. Avenida Páez a la altura del Hipódromo (c.1959). Al fondo se puede observar el Monumento a Carabobo (La India).

Sólo será en 1956 que la avenida pasará a denominarse José Antonio Páez conformada, en resumen, por la sumatoria de la original Avenida de El Paraíso (que ya era denominada como Páez), la Carabobo y la de La Vega, habiendo ya demostrado su capacidad para entrelazar a su paso las zonas de: Los Flores de Puente Hierro (donde se ubicó desde finales de la década de 1950 la Cárcel de La Planta), Los Laureles, Parque Naciones Unidas, La Montaña, Washington, El Pinar, Las Fuentes, Deyber, Loira y La Paz.

12. Fotos recientes de la avenida Páez. En la de abajo, al fondo se observa el Monumento a Carabobo (La India) en su emplazamiento actual.

Insertada entre las parroquias La Vega, San Juan y Santa Teresa, la avenida Páez tendrá la oportunidad de corroborar desde 1995 el hecho indiscutible de ser el corazón de la Parroquia El Paraíso, la cual sería creada ese año como parte del Municipio Libertador. Pese a contar con lugares de valor histórico, usos que tienen escala metropolitana y edificaciones de valor arquitectónico, el tránsito hoy en día por la arteria denota como pocas en la ciudad los nefastos efectos de la aplicación inadecuada de las ordenanzas municipales, un creciente deterioro y la imposibilidad de ser leída como un espacio urbano unitario, herencia, sin duda, de la manera como terminó conformándose a través del tiempo. La frondosa vegetación que la acompaña puede considerase, sin embargo, como uno de los valores que posee.

Apunte complementario

13. 1936. Detalle del Plano de Caracas Monumental de Ramón Sosa. A la izquierda, avenida 19 de diciembre con las estatuas del Gran Mariscal de Ayacucho (arriba) y George Washington (abajo). A la derecha Monumento a Carabobo (La India) a un lado del Hipódromo.

Como demostración de los avatares sufridos por la toponimia de la ciudad, de la cual hemos mostrado solo una parte en esta nota sobre la avenida José Antonio Páez, valdría la pena añadir que el 19 de diciembre (nombre de la avenida y el puente inaugurados en 1910 que unieron lo que en aquel entonces eran la Carretera Occidental y la Avenida de La Vega), fue el día en que Juan Vicente Gómez tomó el poder en 1908 en detrimento de su compadre Cipriano Castro, el cual sólo dejará al morir 27 años más tarde. Una vez fallecido Gómez en 1935, avenida y puente pasarán a denominarse 9 de diciembre en conmemoración a la fecha de la Batalla de Ayacucho (1824), que a su vez coincide con la del nacimiento de María de la Concepción Palacios y Blanco (1758), madre del Libertador.

14. 19 de abril de 1921. Reubicación de la estatua de George Washington (procedente del centro de Caracas) en el cruce de la avenida 19 de diciembre y la Avenida de La Vega. La escultura de Washington ocupó el espacio dejado ese mismo año por el Monumento a la Batalla de Carabobo (La India), cuando fue trasladado a las inmediaciones del Hipódromo. Años más tarde la obra del prócer estadounidense pasaría a presidir la plaza que se construiría en su honor a escasos metros sobre la avenida Páez, donde aún permanece.
15. 1924. Estatua ecuestre del Gran Mariscal de Ayacucho ubicada en la intersección de las avenidas 19 de diciembre y San Martín. La fotografía está tomada hacia el oeste justamente desde esta última avenida.

Gómez, sin embargo, en 1924 ya había ubicado con motivo del centenario de la gesta, en la intersección de las avenidas 19 de diciembre y San Martín (que continuaba desde ese punto hacia el oeste como Carretera Occidental, según se desprende del Plano de Caracas de Ricardo Razetti de 1929), una imponente estatua ecuestre del Gran Mariscal de Ayacucho encargada al escultor venezolano Lorenzo González en 1922 (hoy colocada en la Plaza Sucre de Catia), lo cual simplificaría el cambio de nombre de la primera.

Más adelante (desconocemos cuándo, pero presumimos que después de 1958), la avenida 9 de diciembre pasó a llamarse Washington, quedando con ese apelativo únicamente el puente reconstruido que permite salvar el río Guaire y la autopista.

ACA

Procedencia de las imágenes

  1. https://www.pinterest.com/pin/310889180524984358/

2. http://guiaccs.com/en/planos/razettis-city/ y http://guiaccs.com/en/planos/search-paradise-el-paraiso/

3. http://mariafsigillo.blogspot.com/2020/05/puente-hierro-es-imborrable-en-la.html y https://www.pinterest.com/pin/453667362449827251/

4, 8 y 9. Colección Crono Arquitectura Venezuela.

5. https://guiaccs.com/planos/ultimo-plano-de-razetti/ y http://guiaccs.com/planos/la-ciudad-del-caballo/

6. El Cojo Ilustrado, N° 474, 15 septiembre de 1911 y Colección Crono Arquitectura Venezuela.

7. https://www.pinterest.com/pin/453667362446218446/

10. Colección Fundación Arquitectura y Ciudad.

11. https://www.pinterest.com/pin/453667362449573672/

12. https://www.pinterest.com/pin/290200769722649325/, https://www.flickr.com/photos/erol70/10830109045/ y https://www.pinterest.com/pin/309129961903631773/

13. http://guiaccs.com/planos/de-pueblo-ciudad-caracas-monumental/ (elaboración Fundación Arquitectura y Ciudad)

14. https://twitter.com/elarchivove/status/1358422766559592455

15. https://www.facebook.com/caracasretro/photos/a.433176767210/476012972210/?type=3

¿SABÍA USTED…

…que en 1908 es fundado el Club Paraíso?

1. Vista norte del Club Paraíso en los años 30 del siglo XX.

La aparición y evolución de los clubes sociales en la ciudad de Caracas, reseñadas de forma amena por Alberto Veloz en “El club social: un alto en la cotidianidad donde se fraguan historias”, artículo aparecido en El Estímulo el 21 de julio de 2020 (https://elestimulo.com/gastronomia/cronicas-de-alberto-veloz/2020-07-21/el-club-social-un-alto-en-la-cotidianidad-donde-se-fraguan-historias/), están estrechamente ligadas a la primera expansión de la ciudad hacia el suroeste iniciada a finales del siglo XIX que dará origen a la urbanización El Paraíso. Allí, durante la primera década del siglo pasado se sentarán las bases del primer gran centro de reunión de la burguesía caraqueña que llevará su nombre.

2. El Club Venezuela, ubicado en la esquina de Mijares.

Heredero de una saga de lugares de esparcimiento que empezaron a nacer de la necesidad de compartir intereses comunes, intercambiar ideas, tener nuevos afectos y cordializar amigablemente, cuya primera manifestación Veloz ubica en 1841 cuando en el diario El Venezolano apareció un curioso aviso convocando a participar en los salones de “La Tertulia”, y que será continuada por el Club “Unión” (luego redenominado como Club “Concordia”) y más tarde por el Club “Venezuela”, todos situados en el casco central de la capital, el Club Paraíso se gesta por iniciativa del general Alejandro Ibarra Rivas, “hombre culto, refinado, amigable y dado a la vida social estaba casado con Elena Russell, hija de Thomas Russell, jefe de la Misión Diplomática de los Estados Unidos”.

La familia Ibarra Russell, que vivía en una casa de dos pisos de Conde a Piñango, se mudará posteriormente a una casona situada en la colina de Los Laureles, al final de la avenida El Paraíso (hoy avenida Páez) frente a la Plaza de la República (actual Plaza Madariaga), que una vez adquirida Ibarra pondrá por nombre “Monte Elena” en honor a su esposa.

3. Ubicación de la quinta «Monte Elena» en un detalle del Plano de Caracas de 1906 de
Ricardo Razetti.

“Monte Elena”, que ya aparece registrada en Plano de Caracas de Ricardo Razetti de 1906 como una de las primeras casas construidas en la urbanización, será refaccionada por Ibarra tanto en su interior como en sus áreas abiertas. “Sembró árboles y dispuso de bellos jardines. Aprovechó que por el medio pasaba una acequia y con piedras mandó hacer una pequeña cascada. Igualmente construyó unos bancos para sentarse con el fin de disfrutar los atardeceres y el benigno clima de la zona”, lo cual la convirtió en un lugar que empezó a ser frecuentado por los paseantes dominicales que visitaban la zona.

“Una tarde del año 1908, en medio de la concurrencia espontánea, al general Ibarra se le ocurrió que era el momento de formar un club social. Cedió parte de su terreno entre Monte Elena y Los Laureles, para que se reunieran los primeros amigos que se manifestasen a favor de conformar el nuevo centro. Así nació lo que de ahora en adelante se llamará Club Paraíso”, apuntará Veloz. En dicho terreno se construiría una pequeña casa que se puede considerar como su primera sede.

Una vez constituido, la primera presidencia del club “lógicamente recayó en el general Alejandro Ibarra y entre los socios se encontraban Miguel Antonio Castillo Plaza, Oscar y Nicomedes Zuloaga, Antonio José Castillo, Gustavo Machado Morales, Eduardo Travieso Paúl, Mercedes Pietri, Sofía Valentiner, Gustavo Sanabria, Bernardino Ruiz Miranda”.

4. Izquierda: Parque Los Samanes, terreno donde se construirá la sede del Club Paraíso, señalado en un detalle del Plano de Caracas de Ricardo Razetti de 1929. Derecha: El Club Paraíso ya construido, registrado en el Plano de Caracas Monumental de Ramón Sosa de 1936.

Ante el aumento del número de afiliados y la necesidad de hacer crecer sus instalaciones recreativas, la directiva decide adquirir a la familia Zuloaga el parque Los Samanes, un lote de terreno de 28 mil metros cuadrados al este de la avenida Santander (próximo al Hipódromo), ocupado antiguamente por un pequeño lago, donde se construirá la nueva sede del club. El centro social abriría sus puertas en 1924 una vez concluida la construcción de la que cronológicamente puede llamarse su segunda casa-club, diseñada junto a las áreas exteriores en 1923 por el ingeniero Ricardo Razetti (1868-1932), proyecto que había sido seleccionado entre varias propuestas presentadas a concurso por adaptarse a la frondosa vegetación del lugar y por su razonable costo de construcción. La planta, una perspectiva y una descripción de la edificación, de rasgos decididamente neohispanos, fueron publicados en la Revista del Colegio de Ingenieros de Venezuela (Año I, Nº 6, junio 1923) con el título “Nuevo Edificio para el Club Paraíso, Caracas”.

5. Planta del proyecto del Nuevo edificio para el «Club Paraíso», Caracas, Ricardo Razetti, 1923.
6. Logo del Club Paraíso (izquierda). Removedor y pincho (derecha).

Del texto descriptivo que acompaña la reseña se concluye que el proyecto de Razetti incluía: “Una terraza abierta, bajo los árboles, dedicada a salón de baile, con kioskos laterales, uno de ellos para música, y el otro reservado a la escalera. En el centro se ha dejado un gran espacio engranzonado, en figura elíptica, para el servicio de mesas de té, etc. El propio edificio contiene locales, que más tarde pueden fácilmente ensancharse, para botiquín, toilette de damas y de caballeros, sala de billar, baños, departamentos sanitarios, cocina, departamento para el servicio, etc. Los vehículos tendrán su entrada y su salida especiales por avenidas que conducen hasta el propio edificio. Fuera del lugar de las construcciones descritas, se establecerán departamentos destinados a canchas de tennis, piscinas para natación y otros sports modernos”.

7. Dos imágenes del Club Paraíso ampliado en 1933 según proyecto de Alfredo Jahn
López. Fachada oeste (arriba) y vista panorámica (abajo)

El club, apremiado nuevamente por la necesidad de ampliar sus instalaciones, concluye en 1933, en conmemoración de sus veinticinco años, la tercera y última sede proyectada por el arquitecto Alfredo Jahn López (1895-1940).

La ampliación de Jahn, adaptada a las condiciones de crecimiento previstas por Razetti, se mantuvo apegada a un estilo neohispánico y mudéjar con reminiscencias de la arquitectura ecléctica de finales del siglo XIX e inicios del siglo XX. Es de dos plantas y está flanqueada por dos torres de tres pisos. Como señala Iván González Viso en Caracas del valle al mar. Guía de arquitectura y paisaje (2015): “El acceso está enmarcado por un volumen sobresaliente con una cubierta a dos aguas, que protege la entrada de los vehículos que se realiza por una rotonda. Sobre su fachada se evidencian elementos arquitectónicos del eclecticismo caraqueño (arcos de estilo mudéjar de medio punto con falsos almohadillados, balaustradas y molduras, con diseños inspirados en la naturaleza, que se reflejan tanto en las cornisas como en los vanos de puertas y ventanas). El programa cuenta con una biblioteca, un ‘Salón de los espejos’, restaurante, salón y el patio central, definido por un corredor perimetral cubierto, soportado por columnas de pequeñas proporciones realizadas en concreto martillado de fuste liso, sobre las cuales se apoyan arcos extendidos desde su base en sentido vertical”.

Desde 1928 en adelante, el Club Paraíso se convirtió, junto a su contemporáneo Caracas Country Club, en uno de los dos centros sociales más importantes de la ciudad. Su gran patio central rodeado de una bien proporcionada arcada y corredores que conducían al bar, el comedor y al gran salón de baile lo convirtieron en el lugar de las fiestas más suntuosas y alegres que se dieron en la Caracas de aquel momento. “Decir Club Paraíso era pensar en diversión, deportes, encuentro con los amigos, días de piscina y juegos. Los caballeros en el dominó y las señoras en tardes de romy, panguingue, continental, canasta uruguaya en compañía de té y bebidas varias”, complementará Alberto Veloz.

8. Vista aérea del Hogar Canario Venezolano (izquierda) y aspecto actual del
acceso a la casa-club (derecha).
9. Vista de la piscina del Hogar Canario Venezolano.

“Con el cambio urbanístico y el desplazamiento de la mayoría de sus socios hacia zonas más valoradas en el este de la ciudad, aunado a que El Paraíso perdió su encanto de urbanización elegante y señorial, comenzó la decadencia de uno de los mejores clubes de la capital. La última junta directiva decidió poner en venta sus instalaciones, cerrándose un ciclo de esplendor de la sociedad caraqueña. (…) El 23 de julio de 1970, la señorial casona del Club Paraíso pasó a ser la sede del Hogar Canario Venezolano, lo que significa que está en buenas manos. Los canarios, pueblo honrado y trabajador han sabido conservarla y respetar su estructura con muy leves cambios para su mejor confort y funcionamiento”. La piscina, conserva aún el logo del antiguo centro social, el cual es repetido en los suelos en el interior.

10. Ricardo Razetti (izquierda). Cuartel de Infantería Sucre, Maracay, 1921 (derecha).

Nota
Ricardo Razetti, ingeniero, arquitecto y cartógrafo caraqueño, de acuerdo a la nota biográfica elaborada por Irma De-Sola Ricardo para el Diccionario de Historia de Venezuela (https://bibliofep.fundacionempresaspolar.org/dhv/entradas/r/razetti-martinez-ricardo/), “realizó más de 10 planos de Caracas entre 1897 y 1929. Son una minuciosa muestra de la historia y registro del progreso de la ciudad. Preocupado por el mejoramiento del aspecto físico y el armonioso desenvolvimiento de las edificaciones públicas y privadas, en una época en la cual no se hablaba de planificación, presentó al Colegio de Ingenieros de Venezuela sus Notas para el código de construcciones en lo relativo al alineamiento de las construcciones en la vía pública (7.2.1898), donde recomendaba que cada población debía tener «un Plano General de Alineamiento». Editor y administrador del diario La Restauración Liberal (1903), presentó ante el Concejo Municipal del Distrito Federal un proyecto de modificación de los linderos de las parroquias (18.8. 1910), señalando estos por el centro de las calles o avenidas, en vez de por los accidentes geográficos del terreno, como se hacía anteriormente, lo cual propiciaba conflictos, pues se daba el caso de que una edificación estuviera construida entre 2 parroquias. La proposición fue aceptada el 20 de diciembre de 1910 y se le autorizó para incluir esas modificaciones en el nuevo plano de Caracas que estaba por publicar. Como ingeniero, proyectó y realizó, entre otros, el cuartel de Maracay y la clínica Luis Razetti, situada en la avenida Este 2 de Caracas. En 1916, dibujó el Mapa físico y político de Venezuela”. También participó junto a Alejandro Chataing en la construcción del Arco del Triunfo del Campo de Carabobo e hizo el proyecto del Ateneo de Maracay, por citar sólo otras dos de las numerosas obras en las que intervino.

ACA

Procedencia de las imágenes

1 y 7. http://mariafsigillo.blogspot.com/2013/02/bodas-de-plata-del-club-paraiso-1908.html

2 y 6. https://elestimulo.com/gastronomia/cronicas-de-alberto-veloz/2020-07-21/el-club-social-un-alto-en-la-cotidianidad-donde-se-fraguan-historias/

3. http://guiaccs.com/planos/la-busqueda-de-el-paraiso/

4. https://guiaccs.com/planos/ultimo-plano-de-razetti/ y https://guiaccs.com/planos/de-pueblo-ciudad-caracas-monumental/

5. “Nuevo Edificio para el Club Paraíso, Caracas”, Revista del Colegio de Ingenieros de Venezuela (Año I, Nº 6, junio 1923)

8. Google Earth y http://guiaccs.com/obras/club-paraiso/

9. https://www.flickr.com/photos/erick-rebaya17/11473833104

10. Colección Crono Arquitectura Venezuela

ALGO MÁS SOBRE LA POSTAL Nº 332

Al producirse la primera expansión urbana con fines residenciales hacia El Paraíso entre finales del siglo XIX y comienzos del XX, se dieron dos situaciones dignas de ser mencionadas. La primera es que a la hora de realizar las viviendas unifamiliares que empezaron a poblar la zona, se abandonó la tipología propia del damero fundacional de la casa con patio entre medianeras, por lo general de un piso, para adoptar la correspondiente a la edificación aislada con jardín, de más de un nivel, con cuatro fachadas que permitían a los espacios interiores el disfrute de las visuales exteriores y ampliaba las posibilidades de iluminar y ventilar todos los ambientes.

Asociada a la primera situación, el que en 1900 se haya producido un importante terremoto que afectó significativamente en casco central de la capital, llevó al caraqueño pudiente a migrar hacia un sector relativamente cercano y bien comunicado con aquel, en el que se podía prever la construcción de moradas en las que los riesgos sísmicos disminuyeran.

1. Dos detalles del Plano de Caracas eleborado por Ricardo Razetti en 1906. A la izquierda, el sector de El Paraíso y su relación con el casco central de ciudad. A la derecha la leyenda que permite ver los nombres de las quintas o el de sus propietarios.

El hecho es que el desarrollo temprano de El Paraíso le dio la posibilidad a la alta burguesía caraqueña de contar con la posibilidad de emular a través de la construcción de “quintas” cuyos modelos y estilos copiaron los de las villas que ya hacía tiempo se realizaban tanto en Europa como en los Estados Unidos, incorporando las comodidades y el confort que empezaba a proveer el siglo que se iniciaba.

2. Quinta «Las Acacias». Vista general.

La quinta (o residencia) “Las Acacias”, cumpliendo con todas las características señaladas, fue encargada al arquitecto e ingeniero Alejando Chataing (1873-1928) para ser su residencia familiar por el empresario John Lord Boulton Rojas (1870-1940), miembro prominente de una de los grupos más poderosos e influyentes en la Venezuela de entonces, asumiendo el ingeniero Francisco Uzcátegui en 1905 la conducción de las obras. Ya a inicios de 1901 el magnate había dirigido una carta al Presidente Cipriano Castro con el fin de obtener exoneración de impuestos de importación de los materiales de construcción requeridos, tales como las estructuras de hierro para techos, tejas o barandas, lo que da a entender de que para entonces se contaba con el proyecto y se tenía previsto el tipo de elementos que debería incorporar el edificio. La solicitud fue concedida el 25 de enero de 1901, por decreto ejecutivo publicado en Gaceta Oficial de ese mismo año Nro. 81.141. «Las Acacias» se ubicó sobre una ligera loma que permitía ampliar las visuales hacia el valle, frente al amplio espacio ocupado por la plaza Madariaga convirtiéndose desde entonces en importante elemento dentro del paisaje urbano caraqueño.

3. Vista de la fachada principal (sur) de la quinta «Las Acacias» que se ofrece hacia la plaza Madariaga.
4. Dos detalles que muestran algunos de los elementos de los que está compuesta la edificación.

La imponente quinta de los Boulton fue terminada por Chataing en 1912 (quien tomó el testigo dejado por Uzcátegui en 1911) y habitada a partir del 26 de mayo de 1913, lo cual habla a las claras de las dificultades que hubo para poder ser levantada con continuidad, originadas en buena parte por los acontecimientos políticos que caracterizaron la época y el claro involucramiento de la familia en ellos. En tal sentido, se conoce que los influyentes Boulton se encontraban enemistados con el Presidente Cipriano Castro hasta el punto de que fueron parte de los financistas (junto a otros empresarios como los Matos y los Velutini) que apoyaron a la facción rebelde que impulsó la fracasada Revolución Libertadora, prolongado levantamiento que transcurrió entre 1901 y 1903, en la que una coalición de caudillos regionales encabezados por el banquero Manuel Antonio Matos intentaron derrocar al gobierno de Castro. Por tanto, la construcción de la quinta no se reanudará sino en 1908 al ser derrocado «El Cabito» y se demorará 4 años más. Su costo se elevó a la suma de 393.300,00 bolívares.

5. Vista de la esquina sureste de la quinta «Las Acacias».

Tal y como apunta Gregory Vertullo en la nota dedicada a la mansión en Caracas del valle al mar. Guía de arquitectura y paisaje (2015), “la quinta… con apariencia de palacete francés, está compuesto de dos plantas más un nivel adicional que corresponde a la mansarda habitable, con buhardillas…. consta de un cuerpo central, del cual sobresale el amplio balcón que protege el acceso principal, y que se encuentra apoyado por dos pares de columnas a sus lados, compuestos de fuste liso con capiteles eclécticos. La terraza funge como marquesina de protección del acceso vehicular, incluyendo al vehículo como parte del programa, como aporte moderno dentro de la urbanización. Al cuerpo central se articulan dos volúmenes laterales de forma asimétrica: una torre vertical cilíndrica a la derecha, rematada con una cubierta cónica, y una veleta de los vientos, cuya base está conformada volumétricamente por un anillo que contiene un corredor cubierto en la planta baja y una amplia terraza descubierta a nivel de la planta alta; y un volumen horizontal a la izquierda que destaca por las tres buhardillas de la mansarda, y su remate lateral con los falsos almohadillados. Su fachada posee un ritmo resultante de columnas pareadas y los falsos almohadillados y sillares dibujados. La casa está rodeada de amplios jardines con grandes árboles, donde se encuentran dos estatuas pedestres de figuras femeninas apoyadas sobre pedestales”.

6. Tres de los integrantes de la saga de los Boulton. Izquierda arriba: el iniciador John Boulton Townley (1805-1874). Izquierda abajo: Henry Lord Boulton Schimmel (1829-1891). Derecha: John Lord Boulton Rojas (1870-1940), propietario de la quinta «Las Acacias».

En cuanto a John Lord Boulton Rojas, el propietario, se trata del menor de los hijos del matrimonio entre Henry Lord Boulton Schimmel con María Rojas Espaillat, hermana de José María Rojas Espaillat, antiguo agente de la Casa Boulton en Caracas, y hermana también del sabio Arístides Rojas. Boulton Schimmel, a su vez, era el hijo mayor y parte de la segunda generación de empresarios que tiene origen desde el momento en que John Boulton Townley llega a Venezuela procedente de Lancaster, Inglaterra, en 1924 para establecerse en La Guaira, donde se dedica al comercio, logrando ya para 1826 ser uno de los primeros ingleses beneficiados a raíz del Tratado de Amistad, Comercio y Navegación, ratificado en 1825 entre la Gran Colombia y el gobierno británico. En las décadas de 1840 y 1850 Boulton Townley abre una agencia en Caracas (que después en 1870 pasó a ser la casa central) y una en Puerto Cabello. También iniciaron actividades de tipo bancario y de corretaje. Boulton Townley contrae matrimonio con Anna Gertrude Schimmel en 1829.

Así, Henry Lord Boulton Schimmel continuará junto a su hermano William George la saga comenzada por su padre (quien fallecería en 1874), fundando en 1853 Boulton Sons & Co., asumiendo la presidencia (dejada al retirarse su progenitor) de la Casa Boulton (fundada en 1839), y fusionando sus negocios de la Boulton Sons & Co. con las compañías de su padre (un grupo de empresas navieras, comerciales y financieras) creando así la firma H.L.Boulton & Co, la cual a pesar de todo, mantiene el nombre de Casa Boulton. La firma, afincada desde su creación en La Guaira, trasladará su sede principal definitivamente a Caracas en 1871 para lo cual adquiere la casa ubicada en la céntrica esquina El Chorro.

Henry Lord Boulton Schimmel logró ampliar el emporio dejado por su padre participando en el financiamiento del Ferrocarril Inglés Caracas-La Guaira (1883), promoviendo la primera fábrica de gas de Caracas (1883), y participando como fundador del Banco de Venezuela y del Banco Caracas en 1890. Fallece en 1891 quedando al frente del grupo sus dos hijos mayores, Henry Lord y Alfred William Boulton Rojas e incorporándose aquel mismo año John Lord (el menor) quien, como se ve, seguirá con la tradición empresarial familiar. John Lord se casaría en 1896 con María Corina Olavarría Matos de quien enviudó en 1899 habiendo tenido con ella tres hijos. Luego volvería a casarse con Catalina Pietri Paúl en 1903 con la que tuvo otros cinco descendientes. Con ella y los niños compartiría su estancia en la quinta «Las Acacias».

7. El Hipódromo de Sabana Grande pintado por Arturo Michelena, uno de los fundadores, junto a John L. Boulton, del Jockey Club de Venezuela.
8. Fachada de la sede de la Fundación John Boulton en la Plaza Panteón.
9. Dos tomas del interior de la sede de la Fundación John Boulton.

En particular, John L. Boulton estuvo, por un lado, asociado, junto a otros destacados ciudadanos, al hipismo deporte que se convertiría en una de las empresas de mayor significación en Venezuela a finales del siglo XIX que, gracias a la rectoría del Jockey Club de Venezuela (entidad fundada el 10 de agosto de 1895) y al decidido apoyo del General Joaquín Crespo, pone en funcionamiento el Hipódromo de Sabana Grande. Por otro lado, en virtud de su inclinación y pasión hacia la colección de obras de arte heredada de su tío Arístides Rojas, John L. Boulton se encargó de incrementar sustancialmente el acervo histórico-artístico reunido por su pariente. De allí se desprendió de una parte la donación de sus libros a la Biblioteca Nacional, pero por la otra se conservó la Colección Bolivariana dándose así origen a la creación en 1940 de la Fundación John Boulton dedicada a preservar una parte del patrimonio cultural de Venezuela, cuya labor continuará su hijo, el conocido hombre de cultura Alfredo Boulton Pietri, cuando asuma las riendas de la institución en 1950.

10. Dos fotografías recientes de la quinta «Las Acacias» convetida en la sede de la Comandancia General de la Guardia Nacional Bolivariana.

“Las Acacias” se trata, dentro de la amplia y ecléctica producción edilicia de Alejandro Chataing, conformada por más de treinta obras (en su gran mayoría edificios públicos impulsados por el gobierno de Cipriano Castro primero y en menor medida de Juan Vicente Gómez después), tan sólo de su segunda vivienda unifamiliar. La anterior, ubicada también El Paraíso fue Villa Zoila (1904) que sirvió de morada a la entonces pareja presidencial. Con el transcurrir del tiempo ambas tienen la particularidad de haber pasado finalmente a manos de la Guardia Nacional una como sede de su Comandancia General (Las Acacias) y la otra como su museo histórico (Villa Zoila).

Brevemente conviene recordar que “Las Acacias”, luego de ser adquirida por el General Juan Vicente Gómez el 30 de septiembre de 1935, tras su fallecimiento a escasos tres meses de su compra, es expropiada como parte de los bienes del antiguo dictador en agosto de 1936. En 1938, el inmueble fue adscrito al Ministerio de Agricultura y Cría, permaneciendo sin ningún uso hasta 1954, período en el que la antigua mansión fue objeto de algunas modificaciones que alteraron ligeramente su estructura. El 23 de enero de 1955 la edificación fue designada como sede de la Comandancia General de las Fuerzas Armadas de Cooperación. Para ese momento, el edificio seguía adscrito a Agricultura y Cría, siendo finalmente reasignado al Ministerio de Defensa en 1974 pasando a ser la Comandancia General de la Guardia Nacional, ente creado en 1937, uso que permanece hasta nuestros días.

La quinta fue declarada Patrimonio Histórico Nacional el 7 de octubre de 1985 y el 28 de diciembre de 1988 se aprobó su restauración por un monto de 30.000.000,00 Bs. Desde entonces podemos verla con sus características iniciales encontrándose, en apariencia, en buen estado de conservación.

ACA

Procedencia de las imágenes

Postal. Colección Crono Arquitectura Venezuela.

  1. http://guiaccs.com/planos/la-busqueda-de-el-paraiso/

2 y 4. Graziano Gasparini y Juan Pedro Posani, Caracas a través de su arquitectura (1969)

3. https://www.pinterest.com/pin/384917099384292374/

5. http://www.guardia.mil.ve

6. https://es.wikipedia.org/wiki/Familia_Boulton

7. https://es.m.wikipedia.org/wiki/Archivo:Arturo_Michelena_04.JPG

8. http://guiaccs.com/obras/fundacion-john-boulton/

9. http://guiaccs.com/obras/fundacion-john-boulton/ y https://fundacionjohnboulton.org/

10. http://guiaccs.com/obras/quinta-las-acacias/

1933• Puente de Los Leones

Puente de Los Leones

1933•  Se concluye la construcción del Puente Los Leones en la Parroquia La Vega, el cual une la avenida O’Higgins (al norte) con el inicio de la avenida La Paz en la urbanización El Paraíso, Caracas.


El hermoso puente esta flanqueado por cuatro leones, símbolo de la ciudad, los cuales fueron esculpidos en piedra artificial por el artista catalán Ángel Cabré i Magriñá (1863-1940).
A pesar de los años transcurridos los cuatro leones permanecen observando el paso de los caraqueños.


Fotografía: Caracas del valle al mar. Guía de arquitectura y paisaje (2015)/ Fundación de Fotografía Urbana

HVH