En noviembre de 2020, AA celebra su 90 aniversario: 90 años de debates e investigaciones, 90 años de papel, diseño gráfico, fotografía y dibujo, 90 años de arquitectura que se honran en este número 439, a través de una selección de archivos, de los muchos que como joyas hacen que esta revista internacional sea tan especial.
En esta ocasión, el informe se centra en París y en una selección de proyectos emblemáticos de la capital francesa, que han marcado tanto el siglo XX como las páginas de AA.
El perfil está dedicado a un arquitecto joven y prodigio, Jean Nouvel, cuya carrera siempre ha sido un foco de atención para AA. De hecho, la revista ha registrado todos sus esfuerzos en la capital francesa. Mirar hacia atrás en la evolución de París durante el siglo XX también significa recordar proyectos extraordinarios como la Casa de Cristal de Pierre Chareau, el edificio de la Unesco de Bernard Zehrfuss, las torres residenciales de «nube» de Émile Aillaud, y también muchos concursos históricos como el del Parc de La Villette o la contracompetencia de los Paris Halles, una operación “pirata” que por entonces causó gran revuelo. Las páginas de AA son de las pocas que han registrado este debate. La sección “Diseño” reproduce un texto de Mallet-Stevens, fundador con Le Corbusier, Jean Prouvé, Pierre Jeanneret y Charlotte Perriand de la Union des Artistes Modernes, recordando que la revista siempre ha actuado como portavoz de todas las formas de creación. Para celebrar su aniversario excepcional, el equipo de AA ha invitado a algunos arquitectos contemporáneos (Salima Naji, Manuel Núñez Yanowsky, Manuelle Gautrand, Kengo Kuma, Eva Prats y Ricardo Flores, Paolo Portoghesi, FREAKS, Martha Thorne, Aldric Beckmann, Yung Ho Chang, Dominique Perrault et Chartier Dalix) para compartir su tema favorito. Estas historias ofrecen un panorama de las diversas vidas de AA y los diferentes compromisos que la revista ha apoyado desde su creación en 1930 por André Bloc.
1. Página 135 del nº 67-68 de L’architecture d’aujourd’hui (octubre de 1956) donde aparece reseñado el Hotel Cumboto de Don Hatch
Hotel Cumboto
Donald E. Hatch (1907-1977), arquitecto norteamericano egresado de la Universidad de Kansas (1930), quien luego de varios años de destacada experiencia profesional en su país llega a Venezuela en 1948 formando parte del equipo de trabajo de International Basic Economy Corporation (IBEC) Technical Services Corp, empresa del magnate Nelson Rockefeller, contó con el privilegio compartido con un selecto grupo de arquitectos y oficinas nacionales de haber sido elegido en 1955 por Daniel Camejo Octavio como proyectista de uno de los hoteles que la CONAHOTU decidió realizar como parte de la política oficial de impulsar el turismo en el país. Al igual que la mayoría de los casos de este ejemplar Plan Hotelero, Hatch logra una solución claramente identificada con el lugar que se le asignó: la localidad costera de Puerto Cabello en el estado Carabobo. Esta pieza, si se quiere menor y hasta excepcional dentro de los temas que Hatch usualmente solía afrontar, se convierte en una clara demostración de cómo un profesional “extranjero” se aproxima de forma racional y sensible a las variables del contexto convirtiéndose ello en toda una lección para quienes hemos sido formados en estas latitudes.
Recordemos a modo de paréntesis que Hatch, de quien se han contabilizado cerca de 30 participaciones entre proyectos y obras de diferente envergadura en el país entre 1948 y 1959, había trabajado como arquitecto diseñador en la firma Hood and Fouilhoux, Architects, New York, entre 1932 y 1934 participando en el proyecto del Rockefeller Center. También fundó con Carl Landefeld la oficina Landefeld & Hatch, Architects, New York (1935-1942) realizando varios edificios para la Feria Mundial de 1939 y, previa a su llegada a Venezuela, en 1942 había constituido la firma Donald E. Hatch, Architect, New York. Ya en nuestro país destacan, tanto desde su trabajo con el IBEC como desde su propia oficina ubicada de Veroes a Jesuitas Nº 28, en sociedad con el ingeniero Claudio Creamer, las siguientes realizaciones: la Quinta Macoroma, Caracas -con participación de Cramer- (1951); la Casa Club del Caraballeda Golf & Yatch Club, Litoral Central (1953); la Casa Penzini, Caracas -con participación de Creamer- (1953); el Centro Comercial Las Mercedes, Caracas -con participación de Creamer- (1955); la fábrica de Cauchos Good Year, Guacara -con participación de Creamer- (1956); el edificio NCR (National Cash Register) luego Summa Sistemas, Caracas -con participación de Creamer- (1956); el Centro Comercial (CADA) La Vega, Caracas (1958); la Embajada de los EE UU, Caracas -con participación de Creamer- (1959); el edificio Socony Mobil Oil Company (edificio Sucre), Caracas -con participación de Creamer- (1959); y, luego de varios años reinstalado de nuevo en los Estados Unidos, la Torre El Chorro, Caracas (1975).
2. Hotel Cumboto. Don Hatch. 1956. Vista desde la piscina
Volviendo al caso al que hoy hemos decidido dedicar esta nota, vale la pena destacar que el Cumboto se trata de un hotel de modestas dimensiones (50 habitaciones) con posibilidad de crecimiento futuro (25 más) que debía ajustarse a un presupuesto limitado. Las condiciones del sitio establecían el carácter predominante de los vientos del noreste coincidiendo esta orientación con las mejores vistas. De esta manera se propone un bloque ligeramente quebrado de tres plantas que otorga a las habitaciones (ubicadas en las dos superiores a una sola crujía) el privilegio de mirar al mar sin ser estorbadas por los volúmenes de servicios desplazados hacia la fachada posterior desde donde se accede. La planta baja del cuerpo de habitaciones, entendida en buena parte como planta libre, sirve para relacionar las diversas áreas recreacionales y de servicios que se extienden mediante un hábil juego geométrico de cubiertas planas entre el bloque y la calle.
3. Hotel Cumboto. Don Hatch. 1956. Fachada hacia el estacionamiento
Don Hatch logra tomar en consideración las variables económicas y ambientales utilizando materiales de mínimo mantenimiento y gran expresividad: bloques calados como cerramiento de escaleras y áreas comunes, concreto obra limpia tratado de manera bruta para la estructura y las separaciones entre habitaciones, y madera como piel al exterior de éstas a modo de puertas plegables de romanilla. En consecuencia: poco uso del vidrio y del metal. El aprovechamiento del balcón convencional como verdadera loggia cobra un papel estelar dentro del diseño de la unidad básica que repercute en la cónsona caracterización final del conjunto: protege de las inclemencias del clima (fachadas este y noreste), sirve de espacio de transición y contacto con el exterior, pero fundamentalmente es aprovechable como espacio interior gracias a la decisión de alterar el plano donde convencionalmente se coloca el cerramiento y de escoger el sistema y materiales adecuados. La prolongación generosa de las losas en busca de convertir a la sombra en el mejor acompañante que la volumetría puede tener en el trópico, y el aireamiento constante logrado por el aprovechamiento de las brisas marinas en el diseño, cierran el listado de consideraciones que permiten ver este edificio como otra demostración de cómo el tema de la identidad arquitectónica surge donde menos se espera dentro de una obra que expresamente no se propuso incorporarlo.
4. Hotel Cumboto. Don Hatch. 1956. Fachada hacia el mar. Detalle de la página 135 del nº 67-68 de L’architecture d’aujourd’hui (octubre de 1956) donde aparece reseñado el hotel.
El hotel Cumboto junto a otras tres obras de Hatch fue recogido en el nº 67-68 de L’architecture d’aujourd’hui de octubre de 1956, dirigido por André Bloc, dedicado a California, Venezuela y a “Construcciones en países calientes (México, Brasil, Islas Hawai e India)”. El capítulo dedicado a nuestro país contó con la colaboración de Carlos Raúl Villanueva quien redactó el texto introductorio “La evolución de la arquitectura en Venezuela” que sirvió junto al titulado “Caracas”, elaborado por la redacción de la revista, como preámbulo a 24 edificaciones presentadas en momentos en que nuestro país era foco de atención de toda la prensa especializada internacional por el auge de la construcción y la calidad de las obras que se realizaban. De allí hemos extraído la página dedicada al modesto pero significativo hotel construido en Puerto Cabello que encabeza esta nota el cual, como tantos otros de esa época, ha sufrido a lo largo de los años el rigor y las penurias asociadas a su pésima administración y mal mantenimiento, cosa que aún no denotan las imágenes de cierre, más bien cercanas a su época de mayor esplendor.
ACA
Procedencia de las imágenes
1 y 4 . L’architecture d’aujourd’hui, nº 67-68, octubre 1956
1974• La revista francesa L’Architecture D’Aujourd’Hui, fundada por Andre Bloc en 1930, dedica su Nº 173 mayo-junio-1974 a Latinoamérica, poniéndole por título a la edición «América Latina. Problemas y Métodos» El número preparado por Pierre Lepetit y J. P. Cousin contó con la colaboración del arquitecto peruano Juvenal Baracco y del arquitecto-urbanista venezolano Marco Negrón. El largo texto preparado por el arquitecto Negrón, cuyo título general fue «Caracas, técnica del alojamiento», se centró en los procesos de urbanización, la marginalidad y dependencia en América Latina y los «sistemas de ciudades». Fue ilustrado con mapas de la ciudad de Caracas, indicando su crecimiento a través de los años, la ubicación de las viviendas informales, fotografías destacando los contrastes urbanos -Parque Central, San Agustín, El Conde-; ejemplos del Programa «Equipamiento de Barrios. El caso Vista Alegre» y el programa del U.P 3-Caricuao con sus viviendas en pendiente. Hoy día Marco Negrón (FAU UCV promoción 11A /1961) es profesor titular de Facultad de Arquitectura y Urbanismo, Universidad Central de Venezuela, está adscrito al Instituto de Urbanismo de esa facultad, fue Decano de la misma entre los años 1990-1996, recibió el Doctorado Honoris Causa de la UCV en el 2009 y fue incorporado como Miembro Honorario de la Academia Nacional de la Ingeniería y el Hábitat de Venezuela, en el 2016.
1986• La revista francesa L’Architecture d’Aujourd’hui en su número 247 del mes de octubre, incluyó un reportaje de Jean-Pierre Cousin sobre Caracas, al considerar el editor que era una de las ciudades que más rápidamente y mejor estaba transformándose en el mundo. El reportaje de J.P. Cousin titulado «Tres facetas de una ciudad» se complementaba con los siguientes artículos y reseñas: Expansión urbana y urbanismo de Marco Negrón; Rehabilitación de La Hoyada, restructuración de la Avenida Bolívar; Centro Empresarial Tamanaco. Enrique Gómez y J. Landi; Seguros Orinoco. José Miguel Galia; Ateneo de Caracas. Gustavo Legórburu; Teatro Teresa Carreño. Dietrich Kunkel, Tomás Lugo y Jesús Sandoval; Impacto del Metro. Frank Marcano y El Metro de Caracas.
HVH
Nos interesan temas relacionados con el desarrollo urbano y arquitectónico en Venezuela así como todo lo que acontece en su mundo editorial.