Archivo de la etiqueta: Avenida Fuerzas Armadas

¿SABÍA USTED…

… que el 21 de marzo de 1941 se inaugura en Caracas el cine Hollywood, proyectado en 1939?

1. La esquina de Romualda con el cine Hollywood (c.1954)

Con la película «Brigham Young», protagonizada por Tyrone Power, daba inicio en 1941 a sus funciones el cine Hollywood, segunda sala caraqueña donde su arquitecto, Rafael Bergamín Gutiérrez (Málaga 1891-Madrid 1970), pondría en práctica la experiencia que había acumulado sobre el tema a través de su ejercicio profesional afincado en España por 20 años, desde donde había llegado a Venezuela en 1938 como exiliado de la Guerra Civil en el buque Colombie.

2. Rafael Bergamín (1891-1970) y el Colombie, buque en el que llegó a Venezuela como exiliado.
3. Teatro Ávila (1938-1940) primera incursión que realiza Bergamín en torno a la tipología de edificio multifuncional en Caracas.

El primer cine diseñado por Bergamín en la capital venezolana (y una de sus primeras obras), donde rápidamente logró establecer una sociedad con Rafael Emilio Velutini y José María Manrique (la empresa Velutini, Manrique y Bergamín que pronto de convertirá en Velutini y Bergamín C. A.), fue el teatro Ávila (1938-1940), ubicado en el casco central (de Bolsa a Mercaderes) en un terreno entre medianeras. Con él como punto de partida comenzó a desarrollar el “novedoso” concepto de edificio para proyecciones cinematográficas desde una perspectiva multifuncional con la sala de espectadores como elemento jerárquico en lo compositivo, locales de comercio a pie de calle y oficinas en las plantas superiores.

4. Izquierda: Cine Hollywood (1939). Derecha: Edificio Arismendi con el Teatro Acacias (1945)
5. Izquierda: Cine Rialto (obra de Alejandro Chataing intervenida por Bergamín en 1943). Derecha: Cine Diana (1948)

Dicha tipología sería puesta a prueba como solución en esquina cuando le corresponde proyectar en La Candelaria (esquina de Romualda, cruce entre las avenidas Este y Norte-Sur 7) el Hollywood. Luego también lo hará en la remodelación y ampliación del teatro Princesa (luego teatro Rialto) para convertirlo en cine Rialto (1943, entre medianeras, de Monjas a Principal, vuelto a remodelar como cine por Gustavo Wallis en 1951 y hoy Teatro Bolívar de nuevo intervenido en 2013), en el cine Diana (1948, también entre medianeras de clara semejanza con el Ávila, ubicado en la avenida San Martín, demolido en 1970), y en el teatro Acacias -incorporado al edificio Arismendi- (1945, otra oportunidad de resolver una esquina en el cruce de la Calle Real de Sabana Grande con avenida Las Acacias).

6. Luis Gutiérrez Soto (1900-1977). Tres cines madrileños insertados en sendos edificios multifuncionales. Arriba izquierda: el Callao (1926). Arriba derecha: el Europa (1928). Abajo: el Barceló (1931)

Como bien apunta Guillermo Barrios en “La arquitectura de los cines de Caracas: cinco casos emblemáticos (1925-1960)”, artículo publicado en la revista Apuntes, vol. 31, número 1, enero-junio 2018, el esquema multiuso utilizado en los cines mencionados “ya se venía practicando en Madrid desde principios de los años 1930, en medio de un trepidante clima de instalación de grandes salas de cine en diferentes lugares de la capital española. Para ese momento se habían construido allí alrededor de treinta de estos establecimientos, lo que había permitido la concreción de fórmulas funcionales y estilísticas de las cuales Bergamín fue un oportuno portador”.

Con el Hollywood, Bergamín resuelve su ubicación en esquina echando mano a la utilización de planos curvos que enfatizan la presencia del volumen, clara referencia a la arquitectura expresionista de Erich Mendelsohn (1887-1953), práctica común dentro del racionalismo español que siguió las pautas del profesional alemán, y de quienes proyectaron edificios para cines por aquellos años en Madrid. Entre ellos, y muy particularmente en el Callao (1926), el Europa (1928) y finalmente el Barceló (1931), llamado por David Miguel Sánchez Fernández en Cines de Madrid (2012) “el padre de los grandes cinematógrafos madrileños”, diseñados todos por Luis Gutiérrez Soto (1900-1977), se puede encontrar “un claro antecedente del partido de diseño que Bergamín planteó en su momento para el teatro caraqueño”, de acuerdo a lo indagado por Barrios. En tal sentido entre Gutiérrez Soto y Bergamín se establecerá con relación al desarrollo de este tipo de edificaciones un notorio paralelismo, el uno protagonizado en la capital española y el otro en la venezolana.

7. Cine Hollywood. Arriba izquierda: Vista de la entrada. Arriba derecha: Vista de la sala. Abajo: Dos tomas de la fuente de soda.

Determinada la analogía, el Hollywood, a menor escala, igualmente envuelve la esquina y se proyecta a la escena urbana con sus niveles en altura contenidos en un plano curvo. “Sobre la sección superior de este plano se impone a todo lo largo el nombre del cine, mientras que las inferiores se intervienen con ventanas incisas y, a nivel de calle, el plano de acceso queda coronado por una generosa marquesina luminosa para el anuncio en grande de la programación. La integración de usos hacia los laterales del edificio justifica las grandes dimensiones del edificio y magnifica su presencia en el entorno”. La actividad cinematográfica, que además de la sala con balcón incluía un foyer de muy buena proporción, un bar y un restaurante, se vio acompañada con locales comerciales, oficinas en las plantas altas, y hasta un hotel de dos pisos en uno de sus flancos.

Barrios a modo de complemento, nos aportará lo siguiente: “Además del Ávila y el Hollywood, sus primeros edificios de cine con usos colaterales, Bergamín contribuye a la expansión del circuito con otros proyectos. Incursiona en el diseño de salas de barrio con el América (1940-1969; actualmente depósito), que integra en su construcción un pionero sistema de climatización; el Plaza (1941-1972; abandonado), y el cine Jardines (1943-1980; estacionamiento para buses)”. El Ávila hoy alberga una especie de mercadillo y tanto el Hollywood como Las Acacias se transformaron en sendos contenedores comerciales.

8. Izquierda: El cine Hollywod en medio de la construcción de la avenida Fuerzas Armadas (c.1955). Derecha: el cine en la actualidad fotografiado desde el elevado de la avenida Fuerzas Armadas
9. Izquierda: el Hollywood pintado por Damián Flores Llanos en 2017 dentro de la exposición abierta en Madrid que tituló «Caracas». Derecha: foto reciente que muestra el estado de la fachada del edificio.
10. Foto reciente del edificio donde funcionó el cine Hollywood.

Visiblemente afectado por la construcción e inauguración 1956 de la avenida Fuerzas Armadas sobre el trazado de la calle Norte-Sur 7, el Hollywood, como tantas otras salas de cine funcionó como tal hasta 1979 cuando cambió de uso, fenómeno que también ha afectado a las salas madrileñas que tomó como modelo. Anclado en La Candelaria, lugar que desde los años 1940 acobijó a numerosas familias españolas que migraron hacia Caracas, el edificio, que aún permanece en pie, sesgó desde muy temprano su programación hacia la presentación de cine español del cual se fue paulatinamente alejando en virtud del viraje que acompañó la comercialización del cine a nivel internacional.

Bergamín regresará a España en 1958 dejando tras su estadía de veinte años en Venezuela una obra construida que superó las cincuenta edificaciones (valga como dato decir que para el año de 1941, Bergamín ya había realizado en Caracas 155 proyectos, de los que se habían ejecutado 42), de entre los cuales las diferentes salas de cines proyectadas son un valioso legado, así como las variantes que realizó de edificios en esquina para otros usos. En particular, el cine Hollywood, de las pocas que quedan en pie, se trata de una pieza que debe ser protegida en virtud de su valor y atendida dado su acelerado deterioro.

ACA

Procedencia de las imágenes

  1. https://prodavinci.com/la-esquina-de-dona-romualda/

2. https://www.urbipedia.org/hoja/Rafael_Bergam%C3%ADn_Guti%C3%A9rrez y https://vitruvius.com.br/revistas/read/arquitextos/11.128/3545

3. https://vitruvius.com.br/revistas/read/arquitextos/11.128/3545

4. https://www.facebook.com/179485905418972/posts/3614647191902809/ y http://viejosrecuerdos.eklablog.com/teatro-acacias-a125652520

5. https://haimaneltroudi.com/el-hoy-teatro-bolivar-fue-la-primera-sala-de-cine-de-caracas/ y Colección Crono Arquitectura Venezuela

6. https://edificiosdemadrid.es/cine-callao/, https://www.tetuan30dias.com/reportajes/cine-europa-cumple-90-anos-entre-memoria-barrio-olvido y https://twitter.com/arquitect_viva/status/1658895259655458816/photo/1

7. https://www.facebook.com/179485905418972/posts/3614647191902809/ y Colección Crono Arquitectura Venezuela

8. Colección Crono Arquitectura Venezuela y file:///C:/Users/USER/Downloads/rigon,+01+Barrios-1.pdf

9. https://www.damianflores.com/caracas-por-damian-flores-llanos/ y https://vitruvius.com.br/revistas/read/arquitextos/11.128/3545

10. Colección Fundación Arquitectura y Ciudad

1941• Inauguración del Cine Hollywood

 

Inauguración del Cine Hollywood.jpg

1941•  El 21 de marzo se inaugura con la proyección de una película con Tyrone Power el Cine Hollywood, ubicado en la esquina de Romualda (Av. Este con la Norte 7- actualmente Av. Fuerzas Armadas), La Candelaria, Caracas. El edificio que incluía un foyer de muy buena proporción, un hotel de dos pisos, un bar y un restaurante, fue diseñado por el arquitecto español Rafael Bergamín en colaboración con Rafael Emilio Velutini y José María Manrique, sus asociados.

Cine Hollywood, esquina de Romualda (Av. Este con la Norte 7 -actualmente Av. Fuerzas Armadas-), La Candelaria. Caracas. Rafael Bergamín, Rafael Emilio Velutini y José María Manrique. Vista de la entrada. (Fuente Internet)
Cine Hollywood, La Candelaria, Caracas. Rafael Bergamín, Rafael Emilio Velutini y José María Manrique. Vista de la Fuente de Soda. (Fuente Henry Vicente. Archivo Familia Bergamín, Madrid)

HVH

¿SABÍA USTED…

… que en 1973, en la V edición de la Bienal Nacional de Arquitectura se otorga el Premio Nacional al arquitecto José Miguel Galia por la obra Edificio Seguros Orinoco, ubicado en el ángulo noreste de la esquina de Socarrás, avenida Este 2 con avenida Fuerzas Armadas, Caracas?

1. Edificio sede de Seguros Orinoco, esquina de Socarrás, avenida Fuerzas Armadas, Caracas. José Miguel Galia en colaboración con Adolfo Maslach y Luis Martínez, 1971

Cuando en 1968 José Miguel Galia (1919-2009) proyecta Seguros Orinoco, en colaboración con Adolfo Maslach y Luis Martínez (arquitectura) y Paúl Lustgarten y Gilberto Bourgeot (estructura), ya habían transcurrido diez años de la disolución de Vegas & Galia, sociedad que entre 1952 y 1958 se constituyó, como dirá Alberto Sato en José Miguel Galia. Arquitecto (2002), en “uno de los equipos conductores de la arquitectura moderna venezolana, con sus 35 proyectos y 26 obras construidas, donde se han hecho presentes la normativa urbana, la tipología edilicia, el dispositivo ambiental, los materiales constructivos de las edificaciones, los detalles y acabados, con la maestría de quienes, por la vía de un riguroso profesionalismo, han dado verdaderas lecciones de arquitectura”.

Así, Galia deja su sociedad con Vegas a los 39 años con 11 años de labor profesional y se convertirá en una de las figuras más importantes dentro del panorama arquitectónico venezolano. A la vez, continuará siendo uno de los profesores de mayor valía dentro de la Escuela de Arquitectura de la UCV de cuya Facultad fue miembro fundador en 1953.

A partir de 1958 para Galia comenzará también una etapa en la cual Sato abre dos importantes vertientes: la de su participación en el desarrollo de un numeroso grupo de edificios de vivienda en propiedad horizontal, que constituyen en sí mismos una clara tipología; y otra, que denomina como “Protagonismo”, en la que tiene cabida el edificio que hoy nos ocupa, donde “una doble articulación de su poética se juega ante cada proyecto: por una parte la subyacencia de ideotipos con geometrías angulosas, en planta y elevación; por otra, la realidad del medio profesional, el gusto y el reconocimiento del cliente, que en general termina por dominar el proyecto”. A lo que valdría la pena agregar cómo “las nuevas tendencias arquitectónicas por una parte, y una realidad abierta y permeable a nuevas imágenes, estéticas y modos de abordar los temas de la arquitectura y de la ciudad, se hacen presentes en la obra de Galia”.

2. Izquierda: Fotomontaje de la propuesta inicial para la sede de Seguros Orinoco. Derecha: Edificio construido según el proyecto definitivo

Seguros Orinoco forma parte de uno de los dos “nuevos palacios del trabajo” (el otro será la sucursal del Banco Metropolitano en Sabana Grande de 1976) en los que, según Sato, Galia busca romper “la casi inevitable homogeneidad que en apariencia exige el edificio de oficinas” atacando “el problema desde un ángulo inesperado, desde el lugar, desde cómo acceder y qué buscar en la escala de la ciudad de Caracas” a modo de estrategias proyectuales fundamentales que llevan a desplazar una imagen que se había considerado como recurrente, y a la que una compañía aseguradora en franco crecimiento que buscaba constituirse en referencia dentro de una dura competencia apostó, considerando la importancia de que su sede se convirtiese en su símbolo y señal de identidad.

Si bien el primer anteproyecto de 1966 era en hormigón visto con un tratamiento volumétrico de gran potencia desde el punto vista plástico, muy diferente al que finalmente se construyó, cobra relevancia el hecho de que la aprobación de dicha propuesta por los clientes ocurriese el año anterior al que se produjera el terremoto de Caracas de 1967, cuyos efectos obligaron a repensar por completo los sistemas estructurales en el país y por ende a descartar el primer proyecto. Sato, quien recoge con cuidado todos los detalles que rodearon el proceso que condujo la solución definitiva, señala cómo “en el segundo proyecto, la inestabilidad estructural y visual de la pirámide invertida se transforma en una sólida pieza de envigados ortogonales”, complementada “con cerramientos prefabricados de hormigón en placas de una pieza que salvaban la distancia entre la viga y la placa maciza”, derivando en una imagen donde predominaba la obra limpia.

La modificación de la segunda imagen en pro de la definitiva provino de la poca experiencia que existía para la época en la utilización de elementos prefabricados (en particular por parte de la empresa Edificaciones C.A. perteneciente al grupo Orinoco), los cuales si iban además destinados a una obra en particular significaban, paradójicamente, aumento del tiempo de ejecución dada su complejidad constructiva y, en consecuencia, de su costo.

“Así, luego de intentar otras soluciones de cerramiento, Galia se decidió por el empleo de piezas de alfarería como material de revestimiento, manteniendo el sistema distributivo original”, nos dirá Sato. “De este modo, pese a la notable diferencia de estructura, forma e imagen de los proyectos, la constante distributiva define el ‘qué’ frente al ‘cómo’ de la proposición kahniana”.

3. Vista desde la avenida Fuerzas Armadas del edificio sede de Seguros Orinoco
4. Planta baja del edificio sede de Seguros Orinoco
5. Dos tomas interiores de la planta baja del edificio sede de Seguros Orinoco

Deteniéndonos en aspectos más precisos, cabe señalar que el edificio fue construido en una parcela rectangular de 650 m2 (con frentes sur y oeste de 20 y 32,5 mts., respectivamente), ocupa el 100% del terreno en la planta baja y las dos mezzaninas, para luego elevarse en una torre de 10 niveles, con 59% de ocupación de la parcela y rematar con 3 niveles adicionales para los equipos de aire acondicionado, sala de ascensores y aviso luminoso. En total un 528% de construcción que se traducen en 6.640 m2. Su ejecución se realizó en 24 meses (1969-1971) a un costo de Bs. 7.500.000,00.

El programa arquitectónico buscó, además de cumplir con las exigencias funcionales, lograr una edificación que diera una flexibilidad de utilización y ubicación de los espacios internos necesarios para una entidad cambiante y en transformación. Los arquitectos resolvieron el edificio con una volumetría dinámica en la que se juega con los llenos y vacíos que explota la condición de esquina, produciendo secuencias espaciales positivo-negativas continuamente cambiantes que en cierto momento engañan en cuanto a la apreciación real de sus dimensiones. Además, del revestimiento de las fachadas ya descrito, logrado con piezas de alfarería en medidas especiales que sirven para obtener la trabazón vertical y horizontal con junta continua, los proyectistas dejaron las vigas y columnas de concreto a la vista en el interior del edificio recubriendo los pisos de las zonas públicas y escalera con mármol travertino. Por otro lado, la solución estructural, acatando las nuevas normas, se define con base en un sistema de hormigón armado aporticado, conformando placas macizas y de fundación sobre pilotes.

6. Izquierda: Acceso al edificio donde se aprecia la puerta-reja tridimensional de Carlos González Bogen (1920-1992). Derecha: Corte

Henrique Vera en la nota que acompaña la presentación del edificio publicada en Caracas del valle al mar. Guía de arquitectura y paisaje (2015), buscando resaltar los valores espaciales y ambientales que la obra posee, apunta: “al ubicar el núcleo de circulación vertical opuesto al acceso, se generan espacios internos flexibles, silenciosos, con jardines y terrazas cerradas, apergoladas o caladas.(…) El acceso a la triple altura desde la avenida se produce a través de la hermosa puerta-reja tridimensional de Carlos González Bogen (1920-1992)”.

Con la intención de entender Seguros Orinoco como parte de un continuo que se inicia en la la época de Vegas & Galia, particularmente en cuanto a su potente imagen y al uso tradicional del ladrillo de alfarería que Galia refuerza, perfecciona y hace parte suya, Sato nos recuerda cómo se puede “trazar un recorrido de veinte años desde las fachadas laterales de El Municipal, el primer proyecto de la Torre Polar, los muros del Teatro del Este, la pequeña Torre de Servicios de Anglo.-Ven y los edificios de propiedad horizontal. Éstos conformaban una identidad tectónica, que en el caso de la sede de Seguros Orinoco, empleado como revestimiento, institucionalizó un modo de recubrimiento que se ha hecho frecuente en la arquitectura caraqueña, acogiéndose a una imagen construida al calor del debate latinoamericano sobre la identidad regional, pero que no puede ocultar procedencias internacionales, llámense aaltianas o kahnianas. Estos aspectos constituyen en Galia detalles de un ‘procedimiento’, que si bien nunca ha sido impermeable a los acontecimientos de la arquitectura internacional, permite explicar más ajustadamente el significado de su obra.”

Si se quiere ampliar la información sobre este importante edificio, además de los textos señalados, recomendamos consultar las revistas Arquitectura e Ingeniería, enero 1972; Punto nº 47, diciembre 1972; y CAV nº 35, 1973, así como el libro Guía de edificaciones contemporáneas en Venezuela. Caracas. Parte 1 de Mariano Goldberg (1980) y el catálogo de la VII Bienal Nacional de Arquitectura. La arquitectura del lugar  (1987).

7. Edificio sede de Seguros Orinoco, Puerto Ordaz. José Miguel Galia, 1976

 Como demostración de que “nunca segundas partes han sido buenas”, en 1976 la misma compañía de seguros inaugura en Puerto Ordaz, estado Bolívar, un segundo edificio proyectado igualmente por Galia sin la compañía de Maslach pero si del mismo equipo en cuanto a estructura e instalaciones, siguiendo las directrices volumétricas y de recubrimiento de la sede caraqueña, en este caso sobre un terreno de 2.350 m2 lo cual arrojó 16.450 m2 de construcción. La desproporción que terminó alcanzando la propuesta guayanesa abarcó incluso al portal del acceso principal del edificio el cual, diseñado también por Carlos González Bogen, alcanzó 8 metros de ancho y 12 metros de alto, y está compuesto de dos hojas pivotantes fabricadas en hierro.

8. Vista de la sala del MoMA, Nueva York, en la que se puede apreciar la maqueta del edificio sede de Seguros Orinoco (Caracas) como parte de la exposición “Latin America in Construction: Architecture 1955–1980″, marzo-julio 2015

Para finalizar no olvidemos que Seguros Orinoco fue uno de las obras seleccionadas para representar a Venezuela en la importante exposición “Latin America in Construction: Architecture 1955–1980”, montada en los espacios del Museo de Arte Moderno de Nueva York (MoMA) del 29 de marzo al 19 de julio de 2015, y que la maqueta allí presentada había sido elaborada para la muestra “José Miguel Galia. Arquitecto”, organizada por la Fundación Museo de Bellas Artes y la Facultad de Arquitectura y Urbanismo, abierta en el Museo de Bellas Artes de Caracas en marzo de 1992.

ACA

Procedencia de las imágenes

1 y 4. Alberto Sato, José Miguel Galia. Arquitecto (2002)

2, 3 y 7. Colección Crono Arquitectura Venezuela

5 y 6. Revista Punto nº 47, diciembre 1972

8. https://www.moma.org/calendar/exhibitions/1456/installation_images/10535

ALGO MÁS SOBRE LA POSTAL Nº 208

La construcción de la avenida Fuerzas Armadas, inaugurada el 5 de diciembre de 1956, conllevó el reforzamiento de manera definitiva del acceso al centro de la ciudad de Caracas por el sur desde puntos tales como: la conexión al occidente del país, la zona de El Valle y el recién estrenado Sistema de La Nacionalidad del cual se terminó considerando una prolongación. Además, su realización cumplía con la necesidad de desarrollar un eje norte-sur que compensara las predominantes direcciones este-oeste que remarcaban el sentido longitudinal del gran Valle. Junto a las avenidas Bolívar, Urdaneta, Baralt, Lecuna y México, la Fuerzas Armadas conformó el sistema central previsto dentro del Plan Regulador de Caracas de 1951 y fue considerada como una de las 9 obras imprescindibles dentro de las 19 que incluía el Plan Municipal de Vialidad de aquel mismo año.

1. El Portachuelo. Vista hacia el norte antes de la construcción de la avenida Fuerzas Armadas (circa 1949)
2. Inicio de la avenida Nueva Granada en El Portachuelo. Vista hacia el norte (circa 1949)

La avenida Nueva Granada, abierta en 1949, la más importante arteria del sur de la ciudad había quedado truncada en cuanto a su capacidad de absorber un elevado flujo vehicular e inyectarlo al norte de la capital, al permanecer conectada a él con el aún estrecho paso por El Portachuelo de la Roca Tarpeya y la vía que, empalmando con el antiguo Puente Sucre, atravesaba el Guaire y se internaba convertida en la angosta avenida Norte-Sur 7, cuyo ancho se conservaba incólume prácticamente desde la colonia.

También es bueno recordar que junto a la avenida Urdaneta, la Fuerzas Armadas personificó un incontrolable afán modernizador, avasallante por demás, puesto en marcha desde el poder político que no reparó en consideraciones de costos por expropiaciones ni de respeto por la preservación patrimonial cuando sus respectivos trazados los debieron enfrentar.

Así, tomada la decisión, el 3 noviembre de 1955 el Gobernador del Distrito Federal, Guillermo Pacanins, por orden expresa del ciudadano Presidente de la República, General Marcos Pérez Jiménez, emite un decreto donde anuncia la necesidad de facilitar la comunicación entre los sectores norte-sur de la ciudad. Dicho decreto, una vez hechos los estudios respectivos, contemplaba la construcción de una avenida de 2774 metros de longitud y entre 30 y 40 metros de ancho (según el sector que atravesara), con aceras de 3 metros de ancho.

3. Plano de Caracas por Ricardo Razetti, 1929
4. Antiguo Puente Sucre (1950)
5. Izquierda: Avenida Norte-Sur 7 antes de la construcción de la Avenida Fuerzas Armadas vista al sur (circa 1950). Derecha: Avenida Fuerzas Armadas en construcción vista al norte (circa 1956)
6. Iglesia del Sagrado Corazón de Jesús (1916) sobre la avenida Norte-Sur 7 (circa 1950)

Se ordena la compra y expropiación con respectivo pago a sus dueños, de las áreas adyacentes a una de las calles externas al cuadrilátero fundacional que primero se llamó “Calle del Triunfo de Jerusalén”, luego “Calle Girardot” y finalmente «Norte-Sur 7», cuando se puso en marcha la nueva nomenclatura que registra el Plano de Caracas de Ricardo Razetti de 1929.

La construcción de la avenida Fuerzas Armadas implicó demoler 300 edificaciones y buena parte de la fachada de la Iglesia del Sagrado Corazón de Jesús (que perdió 8 metros de longitud en sus tres naves) como caso más llamativo. Además de la avenida se realizó un puente sobre la Avenida Urdaneta de 273 metros de paso subterráneo (cuya imagen ilustra nuestra postal del día de hoy) y el nuevo Puente Sucre con 2 pistas este y oeste de 270 metros para salvar el río Guaire y la autopista. También debió preverse el paso por debajo de las avenidas Lecuna, Bolívar y Universidad.

La Fuerzas Armadas se constituyó en la vía más costosa en proporción a su extensión de cuantas se habían emprendido en la metrópoli (superando a la Urdaneta), por razón de los edificios y casas que fueron adquiridos por la Gobernación del Distrito Federal con esa sola finalidad. Ejecutada en tiempo récord por el Ministerio de Obras Públicas (MOP) -poco más de un año-, durante ese lapso “en los números reservados de la cuenta del Ilustre Concejo Municipal, se registraba no menos de diez contratos de compra de inmuebles destinados a la construcción de la Avenida Norte-Sur 7”, puntualizará María F. Sigillo en su blog “Caracas en retrospectiva”. Se bautiza, como no, en honor de quienes para ese momento detentaban el poder en el país.

Iniciada su construcción, las obras se abrieron paso sin contemplaciones desde la Roca Tarpeya en la Parroquia Santa Rosalía, ampliándose la ruta de El Portachuelo en simultáneo con el inicio de la construcción de El Helicoide, hasta la esquina de San Luis, avenida Este 15, en la Parroquia de San José donde se ubica el Mercado de Las Flores, eliminando en su camino buena parte de la vieja nomenclatura caraqueña que se caracterizó por darle vida a una amplia gama de eventos, elementos identificativos, familias, construcciones, personajes o locales que se encontraban en los cruces de las calles. “Esquinas tan famosas como la de Socorro, La Romualda, Socarrás, La Hoyada, Tejar, Rosario, Los Isleños, etc.., quedaron borradas de la antigua nomenclatura”, recordará Sigillo, aunque todavía se pueden encontrar vestigios de algunas de ellas.

7. Obras a marcha forzada. Al fondo la iglesia de San José
8. Obras de Puente Sucre (1956)
9. Inauguración de la avenida el 5 de diciembre de 1956

Vale la pena señalar que la construcción apresurada de la avenida, que ameritó jornadas continuas de trabajo las 24 horas (como puede verse en la foto que incluimos con la parte alta de las torres de la Iglesia Parroquial de San José asomando por sobre las vallas), para cumplir con el deseo del dictador de inaugurarla el 2 de diciembre de 1956, tuvo que sortear el enorme contratiempo que significó el colapso del nuevo Puente Sucre, el cual la noche del 16 de noviembre vio como se vino abajo todo el encofrado del tramo en sentido norte-sur hacia la Roca Tarpeya. En la tragedia perdieron la vida ocho obreros y resultaron heridos más de cuarenta trabajadores. No obstante, a toda prisa, para complacer a Pérez Jiménez se enterraron los muertos, removieron los escombros, rehicieron los encofrados, armó la estructura, vació el concreto, y se inauguró la avenida (con el nuevo Puente Sucre incluido) el 5 de diciembre, únicamente tres días después de lo inicialmente programado.

10. Puente Sucre. Vista hacia el sur. Helicoide y edificio del IVSS (1962-63)
11. Izquierda: Vista de la avenida desde El Helicoide (1957). Derecha: Puente Sucre.Vista al sur
12. Izquierda: Iglesia de San Agustín (1941-1942). Derecha: Edificio sede del Cuerpo de Bomberos de Caracas (1967)
13. Izquierda: Fachada remodelada de la Iglesia del Sagrado Corazón de Jesús (1963). Derecha: Edificio sede de Seguros Orinoco (1971)
14. Puente sobre la avenida Urdaneta en construcción (1956)
15. Izquierda: Iglesia Parroquial de San José. Derecha: Vendedor del Mercado de Las Flores
16. Foto reciente del sector norte de la avenida Fuerzas Armadas con El Ávila al fondo

Una vez culminada su construcción y luego de su flamante inauguración, el despejado panorama que abrió la avenida Fuerzas Armadas permite registrar de sur a norte la presencia de las siguientes edificaciones, unas con mayor y otras con menor valor arquitectónico:

  • El ya mencionado Helicoide de la Roca Tarpeya (Gutiérrez, Bornhorst y Neuberger, 1958-1961).
  • Edificio del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (lado este).
  • Iglesia de San Agustín (lado oeste, esquina de Isleños; Alejandro Chataing, 1930).
  • Colegio Fray Luis de León -antigua Escuela Apostólica San Agustín, 1935- (lado oeste, esquina de Isleños contiguo a la Iglesia de San Agustín con frente a la avenida; 1941-42).
  • Edificio sede del Cuerpo de Bomberos de Caracas (lado este, esquina El Rosario, cruce con la Av. Lecuna; Oscar Carpio y Guillermo Suárez, 1967).
  • Iglesia del Sagrado Corazón de Jesús (lado este, esquina Corazón de Jesús, cruce con Av. Universidad; proyecto de Luis Muñoz Tébar de 1916, terminada de construir en 1923. Reconstrucción y nueva fachada a causa de la demolición de que fue objeto la original por la construcción de la avenida; Jan Gorecki, 1963).
  • Edificio sede de Seguros Orinoco (lado este, esquina de Socarrás; Premio Nacional de Arquitectura; José Miguel Galia, 1971).
  • Cine Hollywood (lado este, esquina de Romualda; Rafael Bergamín, 1941).
  • Edificio Sudameris (lado este, esquina Plaza España, cruce con la Av. Urdaneta; al comienzo sede del Banco Francés e Italiano para América del Sur -luego Banco Latino- y de Ars Publicidad; Vincenzo Nasi, 1956).
  • Iglesia Parroquial de San José (lado este, esquina San Enrique a Telares; 1888-1890).
  • Mercado de Las Flores (esquina San Luis, remate de la avenida al norte).
17. Puente sobre la avenida Urdaneta sentido sur-norte (años 1960)
18. Vista del puente en el cruce con la avenida Urdaneta (años 1960)
19. Foto reciente de los puestos de venta de libros usados ubicados bajo el puente de la avenida Fuerzas Armadas cruce con avenida Urdaneta

El puente construido para salvar la avenida Urdaneta, cuya poderosa imagen permitía atribuirle un talante arquitectónico, sirvió muy temprano en su parte inferior de estacionamiento de vehículos mostrando rápidamente su condición “habitable” en las proximidades de la importante arteria este-oeste. Estuvo recubierto, según se recoge de la página de Instagram micaracasantigua, “de mosaico vitrificado de autor desconocido, los cuales fueron preinventariados por la Fundación de la Memoria Urbana para el Instituto de Patrimonio Cultural en 2006. A pesar ello, fueron demolidos en 2012.”

Hoy esta obra ha perdido todo el atractivo que muestra la imagen de la postal escondida tras el mal uso, la falta de mantenimiento y la degradación de la zona.

Sin embargo, tal y como se registra en https://www.seisgrados.com.ve/2018/04/puente-de-las-fuerzas-armadas-refugio-de-libreros-y-lectores-a-pesar-de-la-crisis/, “debajo de la vía, que pasa por una de las zonas más neurálgicas de Caracas, en la que confluyen miles de personas atribuladas de obligaciones y pensamientos a pie o en vehículos, hay un punto de encuentro, una burbuja en la que el peatón se desconecta de la tribulación que genera todo al derredor. Cornetas, tubos de escapes envejecidos, motos rampantes, el humo asfixiante, el bus atestado, la tranquilidad olvidada, todo queda en otra dimensión. (…) Los libreros que durante más de 30 años han hecho de la zona una tradición son la distensión para lectores apasionados, estudiantes y caminantes desprevenidos que fortuitamente se encuentran con las decenas de kioscos que ofrecen toda clase de títulos, desde los clásicos de lectura obligatoria en el colegio, o aquellos en los que todo lector apasionado sabe que debe adentrarse”.

20. Foto reciente en sentido sur-norte de la avenida Fuerzas Armadas en el sector de La Hoyada donde se aprecia el canal central destinado al BusCaracas

Hoy la avenida Fuerzas Armadas se ha visto, al igual que la Nueva Granada, afectada por la incorporación de un canal destinado exclusivamente al BusCaracas, sistema de transporte que buscaba aligerar el tránsito norte-sur y brindar un buen servicio a los usuarios que por allí se desplazan pero que sin embargo, no sólo ha dejado mucho que desear en cuanto a la regularidad de su funcionamiento sino que se ha convertido, por su pésima realización, en una herida que aún no ha cicatrizado.

ACA

Procedencia de las imágenes

Postal, 1, 2, 9, 11, 12, 13, 14. Colección Crono Arquitectura Venezuela

3. http://guiaccs.com/planos/ultimo-plano-de-razetti/

4. https://i.pinimg.com/originals/d0/23/89/d02389193a4eb0a35f47d3acb2161206.jpg

5. https://mariafsigillo.blogspot.com/2011/03/historia-de-la-avenidas-de-caracas.html

6, 8. https://mariafsigillo.blogspot.com/2012/06/la-avenida-de-los-37-millones.html

7, 15, 16, 17, 19, 20. Colección Fundación Arquitectura y Ciudad.

10. https://twitter.com/gfdevenezuela/status/1098775965679923200?lang=hu

18. http://viejosrecuerdos.eklablog.com/av-urdaneta-con-fuerzas-armadas-a135971062

1956• Edificio Sudameris

Edificio Sudameris 2

1956•  Se concluye la construcción del edificio Sudameris, ubicado en el cruce de Av. Urdaneta con la actual Av. Fuerzas Armadas, proyectado por el ingeniero (titulado arquitecto por la Universidad de Nacional de Colombia) Vincenzo Nasi, con proyecto estructural del ingeniero Carlo Nasi.
El edificio de planta baja a doble altura, una mezzanina, 11 pisos tipo y una última planta de menor dimensiones, fue construido por la empresa Técnica Constructora (Alfredo Rodríguez Delfino, Luis Pietri Lavie y Enrique Pardo Morales).
La edificación cuenta con esculturas del artista italiano Vico Consorti (1902-1979).
El arquitecto Vincenzo Nasi tuvo amplia práctica profesional en Colombia, proyectando entre muchas edificaciones la casa del Presidente del partido Liberal Enrique Olaya Herrera. Por su parte el escultor Vico Consorti es el autor, entre muchas destacadas obras, de la Puerta Santa de la Basílica de San Pedro, realizada en 1949 para el jubileo de 1950.
En la imagen se puede observar que mientras se daban lo últimos toques y remates al edificio, se estaba procediendo a construir la estructura del paso a nivel de la avenida Fuerzas Armadas sobre la avenida Urdaneta.
Muy poco después en el mes de mayo del mismo año el edifico pasaría a ser la sede del Banco Francés e Italiano para la América del Sur (luego conocido como Banco Latino) y algún tiempo después en sede de la empresa ARS Publicidad.

HVH

Edificio Sudameris.jpg

En la imagen la ya terminada construcción del paso a nivel de la avenida Fuerzas Armadas sobre la avenida Urdaneta, pero aún no puesto en servicio. A la derecha el Cine Hollywood, proyectado por Rafael Bergamín (Velutini y Bergamín, C.A. e inaugurado en 1941) y al fondo la fachada sur del edificio Sudameris.

HVH

Edificio Sudameris 3

El Edificio Sudameris en momentos en que ya era la quinta sede de la empresa ARS Publicidad creada en 1938 por Carlos Eduardo Frías.