La Exposición de las «Notas Docentes de Carlos Raúl Villanueva» vuelve a montarse en la FAU UCV.

Inaugurada por primera vez en octubre de 2007 como cierre de las celebraciones del 65 aniversario de la Escuela de Arquitectura (luego de siete años entre el momento en que concibió el proyecto expositivo y se logró realizar), desmontada y conservada aún en muy buen estado, la muestra “Notas Docentes de Carlos Raúl Villanueva” vuelve a ofrecerse al público en los espacios expositivos del edificio de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la UCV.
Realizada en su momento gracias al aporte económico del Centro de Arte La Estancia, Brazo Social y Cultural de Petróleos de Venezuela (PDVSA), a través de su eje de Rescate Patrimonial, y del material en buena parte inédito que la Fundación Villanueva custodia como un preciado tesoro y sin cuya cuidadosa curaduría, gentileza y apoyo hubiese sido imposible disfrutarlo, se podría decir que el Villanueva escondido tras sus notas docentes, nos ofrece la oportunidad de apreciar, desde ese otro ángulo absolutamente complementario, el rigor, la frescura, la búsqueda constante, el encuentro con el conocimiento y el ejercicio cotidiano del análisis crítico que caracterizan su obra arquitectónica, insumos, a su vez, fundamentales para quienes ejercen a diario la retadora labor de enseñar. Quizá, sin palpar al detalle lo que aquí se nos muestra, sería muy difícil comprender la verdadera dimensión que cobra el calificativo de “maestro” que con toda justeza profesó quien, lejos de empeñarse en formar un séquito de imitadores, prefirió diseminar la semilla de la duda permanente y del compromiso con aquello a lo que la arquitectura sirve.

De la nota elaborada por Paulina Villanueva en 2007 para explicar el concepto y desarrollo de la muestra, extraemos lo siguiente: “Largo ha sido el camino en el que han cobrado vida los quince paneles que dan cuerpo a la exposición: Notas Docentes de Carlos Raúl Villanueva y para la Fundación Villanueva es realmente significativo el hecho de que su exhibición tenga lugar en la Facultad de Arquitectura y Urbanismo al cierre de la celebración del 65 Aniversario de la Escuela de Arquitectura. Para llegar hasta aquí transitamos primero por el arduo trabajo de reunir, ordenar y catalogar las Notas Docentes de Villanueva para sus cursos de Historia y Urbanismo. Luego pasamos a adentrarnos en sus contenidos y decantar una selección en su extensa geografía. Por último, terminamos por dar cuerpo a una idea expositiva en la que se reúnen: El Hombre, El Arquitecto y El Maestro de una manera singular. Ese cuerpo es el de quince paneles de gran formato, 2.10 x 1.20 metros cada uno, que colocados en serie alcanzan una longitud total de 18 metros. En su diseño, la franja central reúne la información que se mira de cerca, que puede y debe leerse con detenimiento; está a la altura de la cabeza y contiene dos líneas temáticas. La primera formada por una selección de las Notas Docentes de Villanueva reproducidas de forma facsimilar, para convertirse en la columna vertebral de la exposición y de la estructura gráfica de los paneles. Se trata de la secuencia ordenada de una selección de setenta y cinco Notas, cinco por cada panel, organizadas en cuatro partes, cada una con un color distintivo que permite su identificación dentro del conjunto. Comienza la Enseñanza identificada con el rojo, le siguen la Arquitectura y la Historia marcadas con azul y amarillo, para terminar con la Ciudad y el Urbanismo con verde y violeta. Estas partes temáticas reflejan con claridad la vocación de Villanueva como Maestro.
Esta línea continua se acompaña con otra que se desdobla arriba y debajo de la primera; en ella se desarrolla el perfil biográfico de Villanueva con fotos, dibujos y textos; aparece entonces una unidad de medida temporal que marca los años más significativos de su trayectoria profesional y personal. La información que completa cada panel toma otra escala, está pensada para verse desde lejos y para dar un telón de fondo; son fragmentos ampliados de las Notas los que construyen con la línea y la palabra ese rico universo de pensamiento en el que Villanueva se recreó tantas veces durante los años en los que compartió sus afectos entre La Enseñanza y La Arquitectura en la que fue siempre su Escuela de Arquitectura”.
Una vez desmontada se anuncia que la exposición tendrá carácter itinerante. Esperemos logre conservarse al menos otros 12 años más en el estado en que hoy la podemos apreciar.
ACA